• Categories
• Ocio

Citation preview

CUENTO DE JUAN ADIVINADOR

En aquellos tiempos de los reynos y de las clases sociales vivían en una casa muy humilde, Juan Adivinador y su mama la señora Candelaria. Un cierto día se escuchó el comentario que el rey está proponiendo matrimonio a su hija; que se le daría a quien adivina el producto que se encontraba colgado de una soga en la parte superior de su casa. Es así que este comentario llego a sus oídos de Juan, pero el mal interpreto las cosas entendió a su manera y pensó que iba a ver una recompensa para los que echaban, una mayor cantidad de adivinanzas; motivo por el cual se fue preparando para dicho acto. Dijo a su madre prepara mi fiambre que estaré viajando al reino, su mama le contesto a dónde vas a ir hijito por allí ya nunca vas a volver. Juan con lágrimas en los ojos le dijo a su madre yo volveré. Voy a echar mis adivinanzas y regreso, bueno hijo contesto doña Candelaria entre desasosiegos y llantos “ADIVINADOR DE MIERDA VAS hacer”. Es así que doña Candelaria comienza a preparar el fiambre para su hijo, entonces entre ideas y aturdida por el acontecimiento entre si se preguntó y dijo: no quiero que mi hijo sufra por allá por ese reyno. Preparo las cachangas hechos de harina, pan favorito de Juan entonces en la primera cachanga le coloco veneno para que Juan coma y muera. Entonces Juan recibió el fiambre de su madre envuelto en un mantel y echo a la alforja, apero su burrito y montó y se despidió de su madre y se fue. Ya cuando fue medio día decidió comer el fiambre y su burro shantango su amigo fiel, se acercó como quien pedirle que comparta con él y el tubo mucha lastima le dio de comer, la primera cachanga para el shatango. Depues de comer, comenzó a ponerse mal el burrito y murió producto del veneno que coloco la madre. Decidió echarle el burrito al agua para que los gallinazos no devoraran su cuerpo de su amigo. Ya en el agua los gallinazos se comían el burrito, entonces pensó ya tengo una adivinanza. Uno corriendo y dos comiendo que será. Siguió caminando, ya por el camino diviso un zorro en la colina y apunto al zorro con su arma y disparo, pero el zorro astuto en cuestión de segundo se movió y el disparo paso y le dio a dos inocentes águilas y bueno dijo ya tengo otra adivinanza. Por matar a uno mate a dos Ya al caer la tarde se acercaba al reyno entonces dijo tengo que entrar y bueno entro, allí se encontraban muchos príncipes de otros lugares y mucha gente de renombre de esa época.

El rey dijo el que adivina que hay colgada en esa olla se casara con mi hija, pero el que no será muerto en la orca y pasaban muchos queriendo adivinar, que es lo que allí había, algunos decían oro mi rey, otros plata, diamantes, perlas pero no se imaginaban lo que allí había. Entonces llegó el turno de Juan, le preguntaron usted como se llama le contesto Juan. Dígame que hay colgado arriba y le contesto juan yo he venido a echar mis adivinanzas el rey le dijo yo no quiero adivinanzas tú vas adivinar lo que hay arriba colgado, entonces Juan se acordó de su madre, de las palabras que le dijo: ADIVINADOR DE MIERDA VAS hacer. Dicho esto Juan estuvo dentro de los dos seleccionados para casarse con la princesa de la cual ella escogería y de hecho que Juan no sería el afortunado de tan belleza, los finalistas fueron Juan y un doctor de medicina. En esa noche ella escogió al doctor y Juan seria el sirviente. Entonces Juan decía lo bueno que algún día regresare con mi madre. Entonces viendo esto una hormiga, vieja amiga de juan; se acercó al oído y le comenta a Juan no tengas pena ni miedo, yo te ayudare esta noche entonces juan le contesto ya amiga. Entonces el plan de la hormiga mal humorada era que al momento que el doctor dormía a su lado de la princesa, ella se encargaría de penetrarse por el ano y sacar toda la suciedad extraerlo de tal manera que la princesa sintiera error, asco y desprecio de aquel doctor. Al despertar en la mañana dio un grito muy fuerte y salió el rey y le dijo que pasa hija mira este cochino lo que a echo a mi lado entonces viendo esto lo sentenciaron a la orca al doctor y el único que quedaría seria Juan entonces la boda fue con él y fueron felices para siempre.

Autor: Jorge Luis Chavez

i