Cine Documental

I. Cine documental y cine de ficción Cine documental y cine de ficción Cuando vemos una película estamos observando una

Views 81 Downloads 4 File size 61KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

I. Cine documental y cine de ficción Cine documental y cine de ficción Cuando vemos una película estamos observando una representación de la realidad, independientemente de si se trata de un documental o una ficción (incluso las más fantasiosas). ¿qué realidad crees que representan cada una de estas películas ficción? Esta idea se hace más clara cuando observamos películas de épocas pasadas.  Por ejemplo, el cine latinoamericano de los años sesenta estaba fuertemente influenciado por la situación política y social del territorio; asimismo, el cine norteamericano de la guerra fría, convencionalmente, tenía como protagonistas a los americanos y como antagonistas, y viles villanos, a comunistas y nazis. En ambos casos, las estructuras y temáticas de estos cines nos permiten hacer un análisis del contexto histórico en que se insertaron esas producciones. Teniendo en cuenta lo anterior, es posible cuestionarse la relación con la realidad que tienen los géneros de ficción y documental. En pocas palabras, las diferencias fundamentales entre ambas modalidades son: que la ficción busca la representación de algo imaginario, es decir, propone una historia que ocurre dentro de un universo inventado y para esto la creación de un relato es una herramienta principal para hacerlo verosímil. Por su parte, el documental tiene como objetivo la representación de algún aspecto de la realidad. Es decir, mientras que el realizador de ficción elabora un guion y junto con su equipo técnico realiza cuidadosas planificaciones, decorados, efectos especiales y los actores representan el papel asignado, el realizador documental busca exponer algún aspecto desconocido de la realidad, muchas veces proponiendo un argumento de carácter persuasivo. Para esto busca en los hechos acontecidos, realizando una investigación que le permite además acceder a información que fortalezca su propuesta. Bill Nichols (1991), en su libro La representación de la realidad, sugiere que el cine documental no posee una definición unívoca y que sus límites son flexibles. Teniendo esto en cuenta, considera que como género se puede definir por su corpus, es decir, por sus rasgos

característicos. En general, el cine documental tiene como objetivo informar o exponer un suceso, y por ello basa su estructura narrativa en la necesidad de comprobar hechos. Para esto utiliza los recursos del lenguaje audiovisual para reforzar la información que desea transmitir, acudiendo, por ejemplo, a voces en off, material de archivo y/o entrevistas. Además, Nichols señala que el cine documental se puede definir considerando los siguientes aspectos: 

El control que ejerce el realizador: generalmente, un realizador

documental ejerce menos control sobre los hechos retratados que el de una ficción, interviniendo menos o de distinta manera. El director de una película documental propone un punto de vista sobre la realidad.  Comunidad de practicantes: el circuito del documental está compuesto por una comunidad que se relaciona con este género, es decir, los documentalistas comparten un mundo, preocupaciones y lenguaje. En la misma línea, comparten espacios de distribución y difusión, que como regla general, son lejanos a los circuitos comerciales.  Práctica institucional: si bien el cine documental no es una institución cerrada y altamente burocratizada como la iglesia o el ejército, sí posee una serie de organismos que delimitan de cierta manera qué discursos y modos de enunciarlos corresponden al ámbito del documental. Sus espectadores: el autor hace énfasis en que, en rigor, no hay nada que pueda dibujar una línea divisoria absoluta entre documental y ficción. En este sentido, la capacidad del espectador de interpretar lo que está viendo se hace fundamental. En el caso del cine documental, en la medida en que el espectador observa este tipo de cine, desarrolla capacidades de comprensión e interpretación, que a su vez están influenciadas por los códigos culturales de cada espectador. Podemos decir entonces que el espectador de cine documental posee un rol activo.

Sin embargo, a pesar de las diferencias que podemos hacer entre un documental y una película de ficción, diversos autores cuestionan la noción de objetividad y realidad absoluta del cine documental, ya que independientemente de su género el cine recurre a una serie de recursos técnicos y artísticos para articularse como tal. Sobre esto, el cineasta y académico Rafael Sánchez indica que “desde el momento que observa esa realidad como posible materia-prima para su obra, ya comienza a encajarla dentro de un espacio y un tiempo completamente diversos. Con este cambio empieza a dar una forma diversa a las cosas reales; de tal manera que podría afirmarse que está transformando la naturaleza misma de aquellos seres” (Sánchez, 2007: p.57). De esta manera, podemos encontrarnos con documentales de carácter expositivo que tienen un vínculo más cercano con la realidad, así como podemos encontrar documentales de ensayo donde el o la realizadora busca transmitir una opinión. Por otro lado, en el ámbito de la ficción, podemos encontrar historias de fantasía como las de la trilogía de El señor de los anillos (2001, 2002 y 2003) o películas que se arraigan fuertemente en la memoria histórica de nuestro país, como el largometraje de Pablo Larraín, No (2012), que aborda la historia de la elaboración de la campaña del plebiscito de 1988, y que como decisión estilística fue grabada con las mismas cámaras de la época de la campaña, permitiendo utilizar imágenes del spot original, así como material de archivo y mezclarlo con las grabaciones actuales de manera fluida y realista.

Tráiler película No: