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• Daniel Farfán

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Katie Brazelton y Shellev Leith Remodelación del Carácter 40 DÍAS PARA DESARROLLAR LO M EJOR DE TI

5 ZONDERVAN

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.4 nuestrasfam ilias, que nos dan la seguridad para m antenernos hum ildes,

Contenido

que son generosas en am or y paciencia cuando nos tom am os insoportables y que nos acom pañan en el viaje del desarrollo espiritual perm anente.

Cover Title Page Dedicatoria PRIM ERA PARTE: Entabla una relación adecuada con Dios Capítulo i Humildad: Día íH um ildad: Día 2H um ildad: Día 3H um ildad: Día 4 Humildad: Día 5 SEGU N DA PARTE: Entabla una relación adecuada contigo misma Capítulo 2 Confianza: Día iConñanza: Día 2 Confianza: Día 3 Confianza: Día 4 Con fianza: Día 5 Capítulo 3 V alentía: Día iValentía: Día ¿Valentía: Día 3Valentía: Día 4Valentía: Día 5 TER CER A PARTE: Entabla una relación adecuada con los demás Capítulo 4 Autocontrol: Día lAutocontrol: Día ¿Autocontrol: Día 3Autocontrol: Día 4Autocontrol: Día 5 Capítulo 5 Paciencia: Día íP acien d a : Día 2Paciencia: Día 3P acien d a: Día 4 Paciencia: Día 5 C U AR TA PARTE: Entable una relación adecuada con las cosas Capítulo 6 Satisfacción: Día iSatisfacción: Día 2Satisfacción: Día 3Satisfacción: Día 4 Satisfacción: Día 5 Capítulo 7 Generosidad: Día íGenerosidad: Día 2Generosidad: Día 3Generosidad: Día 4Generosidad: Día

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Q U IN TA PARTE: Entabla una relación adecuada con el futuro

Remodela tu personalidad con un asesorainiento lleno

Capítulo 8

de gracia.

Perseverancia: Día iPerseverancia: Día ¿Perseverancia: Día 3 Perseverancia: Día 4Perseveráncia: Día 5 Apéndice

Para los seguidores de Cristo, la transform ación espiritual es esencial, no opcional.

Apéndice A: Plan M aestro de A cciónA péndice B: Oraciones enriquecedoras para cada rasgo

La transform ación espiritual es un proceso, no una circunstancia.

del carácterA péndice C: Em pezar de nuevo con Jesús

La transform ación espiritual es tarea de Dios, pero requiere de m i participación.

Epílogo

J o h n O rtb e rg . p a s to r y a u to r

Agradecim ientos About the Author Praise Copyright About the Publisher Share Y our Thoughts

T U A S E S O R A A L A D IS T A N C IA ¿Alguna vez deseaste que existiera algo así como una «renovación de vida», sim ilar al cambio de apariencia que te puede ofrecer un arreglo de cabello diferente en la peluquería, o como cuando un asesor de imagen revoluciona tu vestuario y sales transform ada? D esearía que la rem odelación de m i vida fu era tan sencilla como esas ocasiones en las que decidí cam biar mi apariencia exterior con un enfoque cosm ético. Y a se tratara de una fiesta de cum pleaños im portante o para lucirm e en una fotografía fam iliar, debo adm itir que esos cam bios siem pre me resultaron fascinantes. De hecho, ¡me encantaría que todas las m ujeres fueran invitadas a disfrutar tan siquiera por una vez de esa experiencia deliciosa! En m i caso particular, viví una rem odelación pequeña de m i propiedad y gracias a una mano de pintura y alfom bras nuevas el estilo de mi hogar cambió radicalm ente. Debo adm itir que la m ejora fue rápida y evidente. Sin embargo, existen otras renovaciones más profundas, como el caso en que las fam ilias deben m udarse por un período de tres m eses mientras u n equipo de personas dedicado a la construcción realiza arreglos en los cim ientos, derrum ba paredes, instala cableado eléctrico o tuberías nuevas. Estos cambios resultan más angustiantes, causan incom odidad y suelen ser costosos —a m enudo emocional y físicam ente estresantes— , y por lo general requieren de la colaboración de más de un experto. Shelley Leith, quien es coautora de este libro, y yo profundizam os en la idea de rem odelar el

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carácter o de renovar la personalidad. Tanto para Shelley como para su marido. Greg, el enfoque

a una aventura de 40 días en la que irás al fondo de tu personalidad de la mano de Dios, de guías

que utilizaron en la crianza de sus cinco hijos podría considerarse algo así como lo que ella misma

m odelo y de m í misma, para que te prepares en el cum plim iento de tu legado.

llam aría paternidad basada en la personalidad. Ellos establecieron cuáles eran los rasgos de

Pat Summitt, de la Universidad de Tennessee, es la entrenadora de baloncesto universitario más

carácter que creían necesarios para que sus niños vivieran como cristianos prósperos y luego se enfocaron en edificar esos rasgos en sus hijos durante los años que pasaron junto a ellos. Desde otro ángulo. Shelley y G reg son conferencistas en tem as m atrim oniales, y pudieron observar una y otra vez que la ausencia de atributos im portantes de la personalidad tales como la humildad., la satisfacción, el autocontrol, la paciencia o la perseverancia puede conducir a las parejas al borde del divorcio.

exitosa de todos los tiem pos. Sus más de 900 victorias la convirtieron en la única entrenadora que sobrepasó el récord anterior de 900 partidos ganados. Un entrenador así sueña con m uchas cosas: dirigir un equipo del cam peonato nacional o el equipo olím pico, preparar jugadoras para que se conviertan en las m ejores profesionales de todos los tiem pos, o ser escogida para integrar el Hall de la Fama. Sum m itt alcanzó todas estas cimas, ¡y a veces en varias ocasiones! En su libro R e a c h fo r the Sum m it (Broadwav Books, 1998), dice lo siguiente acerca del rol de entrenador:

Para mí, este tem a del desarrollo de la personalidad se convirtió en una pasión por motivos diferentes. Durante años me desem peñé como asesora en objetivo de vida., ayudando a que las

N uestras jugadoras com prenden que lo único que pretendo es ayudarlas. Ellas quieren ganar el

m ujeres descubran —y aquí tomo prestada una frase de Billy Cristal en la p elícula City Slickers—

cam peonato nacional. Pues bien, haré todo cuanto m e sea posible para que eso suceda [...] El

su «gran asunto en la vida». Me interesé no solo en ayudarlas a encontrar su propósito m ayor en

éxito prolongado y repetido que alcanzaron consiste en construir u n sistem a de principios y

la vida, sino en crear un plan para asegurarles que dejaran un legado. Incluso escribí una serie de

apegarse a él. Los principios son anclas; sin ellos, irás a la deriva.

libros (‘P athw ay to Purpose. Praying fo r Purpose, Conversaciones con propósito p a ra mujeres, y P athw ay to Purpose Personal Journal) para asesorar a las m ujeres en el hallazgo de su misión específica en la segunda m itad de sus vidas.

Esto resum e la esencia de este libro. ¿Si te lo propones, eres capaz de lograr tu «cam peonato nacional»? R em odelación del carácter te entrenará en la tarea de hacer realidad tu s sueños a

Sin em bargo, se ha vuelto evidente para m í luego de analizar m is propios patrones de vida y los de m is pacientes por más de una década, que algunos de nosotros vivim os una brecha entre el entendim iento de nuestro legado diseñado por Dios y la realización efectiva de ese propósito

través de la «construcción de un sistema de principios y su seguim iento». Sin carácter, señala Summitt, «irás a la deriva», ¡y los náufragos no concretan sus metas! Seré una buena asesora de personalidad para ti, porque fui m uy exigente conm igo misma hasta

m agnífico. N os autosaboteamos, sucum bim os ante patrones antiguos de derrota, heridas,

hace seis o siete años atrás, y recuerdo con nitidez lo que era sufrir el síndrom e del «no soy lo

inseguridad, falta de autoestim a o egocentrism o, lo cual nos m antiene incapaces de llevar a cabo

suficientem ente buena». Puedes confiar en que hoy día soy del todo consciente del privilegio que

los designios de Dios para nuestra vida.

significa cam inar a tu lado en este viaje de gracia (¡imagina esa palabra subrayada tres veces!)

Puede que sepas todo acerca de ti m isma, de tu potencial y de tus objetivos, pero si te sientes

dirigido a la verdad en tu propia vida. Esto será u n ejercicio hacia la novedad y el júbilo, no uno

dubitativa sobre el desarrollo de las cualidades esenciales de la personalidad para concretar tus

que cause que te sientas derrotada. Me lastim aría el corazón si así fuera. ¡La vida tiene ya batallas

sueños divinos como la hum ildad, la generosidad y la confianza, perderás el camino de tu

suficientes como para que yo llegue y te ocasione un agotam iento m ayor y culpa por vivir una vida

vocación en cada giro. Com encé a advertir que m i rol de asesora debía llegar más lejos. Así nació

más santa!

Rem odelación del carácter. En este libro, m e convierto en tu virtual asesora personal, y te llevaré

En cam bio, lo que sí necesitas de mí es que cam ine a tu lado y te m uestre el m odo en que el

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desarrollo de tu personalidad podrá llevarte sobre las alas de los ángeles durante los épocas más

¿Qué son las fortalezas?

difíciles de tu vida. M i com prom iso contigo será enseñarte, con la evocación de la gracia y de la piedad de Dios brillando fuerte sobre m is propias elecciones de vida equivocadas, no ju zgarte o poner sobre tus hombros una carga m ayor de la que puedas tolerar. He aquí algunas cosas im portantes que sabem os por anticipado: Dios se preocupa más por el carácter que traem os a nuestra m isión de vida, que por el plan estratégico de nuestro m inisterio. Dios se interesa más por nuestra integridad a la im agen de Cristo que por la productividad con que edificam os su reino. Dios desea nuestra honradez en todas las áreas de nuestra vida más que nuestros logros para él. En su Libro Sagrado, el punto principal es aprender a ser santos ( i Pedro

El térm ino fortalezas hace referencia a aquellas áreas en las que nuestro enemigo. Satanás, levantó cam pam ento y cavó un foso, creándose una fortificación desde la cual dirige sus ataques destructivos hacia nosotros. E stos son los sitios donde experim entam os repetidam ente el desánimo, la angustia, la derrota y el dolor causado por un daño. Estos son los m onstruos que nos alejan de los sueños que Dios preparó para nosotros.

1:15-16). Nosotros, que soñamos con realizar actos magníficos para la gloria del Señor, somos llevados a niveles más altos p o r el mismo Dios Todopoderoso. Nosotros, que amamos la vida rectificada, no podem os llevar intencionalm ente una vida equivocada. Debem os hacer cuanto nos sea posible p o r convertirnos en los líderes que Dios nos requiere ser en nuestros hogares,

Las ocho cualidades de la personalidad que escogí están enfocadas en las fortalezas predom inantes que detecté en las m ujeres de hoy. M ientras leas cada una de las cualidades y

com unidades, iglesias, escuelas, m inisterios y vocaciones.

fortalezas que figuran en la lista detallada que encontrarás a continuación, pregúntate: «¿Poseo en m i vida alguna de estas buenas cualidades o sus opuestas asperezas? ¿Estoy volando como las

CAR ACTER V S . FORTALEZAS

águilas (Isaías 40:31), o llevo una vida vacía y herida, retenida por alguna de aquellas fuerzas?».

Literalm ente con docenas de rasgos de la personalidad de entre los cuales escoger, te preguntarás por qué seleccioné las ocho cualidades que hallarás en este libro: hum ildad, confianza, valentía, autocontrol, paciencia, satisfacción, generosidad y perseverancia. Mi elección tiene que ver con el

Creo con toda seguridad que, cuando nos dam os a la tarea de reflexionar sobre cómo reafirm ar estas buenas cualidades específicas de la personalidad en nuestras vidas, al mismo tiempo transform am os sus fortalezas respectivas en zonas de victoria.

reverso de estas mismas cualidades, lo que el N uevo Testam ento (2 Corintios 10:4) denom ina fortalezas.

N otarás que la m itad de estos rasgos del carácter se m anifiestan de m anera interna, en tanto que los restantes son más bien visibles. Y ellos involucran cinco tipos de relación diferentes, las cuales afectan definitiva y repetidam ente el resultado de nuestro propósito de vida:

R e la c ió n c o n D io s 1 . L a h u m ild a d conduce a la fortaleza interior del orgullo, el egocentrism o, el criticismo y —créase o no— de la falta de amor propio. (Por cierto, la hum ildad e s de prim er orden; si no com enzam os p o r ella, ¡cualquier labor que realicem os en otras áreas puede volvernos

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orgullosos!)

Personaliza tu secuencia de lectura R e la c ió n c o n n o s o t r a s m is m a s 2. L a c o n f ia n z a e s una cualidad interior que se dirige a las fortalezas de la inseguridad., la autoestim a baja y el perfeccionism o. 3 . L a v a le n t í a es una cualidad exterior perseguida con ahínco p o r m ujeres que luchan contra el miedo, la ansiedad y la falsedad. R e la c ió n c o n lo s d e m á s 4 . E l a u t o c o n t r o l es un rasgo que las m ujeres deben m ostrar interiormente si es que poseen una personalidad impulsiva, adictiva, indisciplinada., em ocional en exceso o propensa al

Puede que desees h acer algo diferente y encares la lectura de este libro en otro orden que el propuesto. Lee con atención los rasgos de carácter enunciados en la lista precedente y luego invita al E spíritu Santo a que te hable acerca de cada uno. ¿Reconoces alguna de las fortalezas m encionadas com o tus propios campos de batalla? ¿Vives tribulaciones inusuales, o sientes un sentido de quebranto en alguna de esas áreas? Quizá se trate del punto de partida que Dios planeó para ti. Intenta leer este libro en la secuencia que te indique el Señor, dirigiéndote a las cualidades que sientas m ás débiles en tu personalidad prim ero, luego aborda las restantes.

estrés. 5 . L a p a c ie n c ia es una valiosa cualidad exterior del carácter para m ujeres intolerantes o demandantes. TRES M O D O S DE CO LABO R AR R e la c ió n c o n la s c o s a s

La rem odelación del carácter es un esfuerzo en colaboración, sobre todo entre tú y Dios. Se inicia

6 . L a s a t is f a c c ió n es una característica interior im portante para aquellas m ujeres que

con tu salvación y continúa hasta que alcanzas la sem ejanza de Cristo. Es un proceso que no se com pleta hasta el m om ento en que logras verlo cara a cara (1 Juan 3:2). Dios acelera este proceso

com baten contra las fortalezas de la envidia, la insatisfacción o la perm anente inquietud.

al otorgarte oportunidades para edificar tu personalidad., circunstancias orquestadas en pos de 7 . L a g e n e r o s id a d e s una expresión exterior que viene a com batir la codicia y los delirios de grandeza.

desarrollar el carácter que necesitas para honrarlo con tus esfuerzos cada día más. Por ejem plo, si adviertes que te hallas en un derrotero de situaciones irritantes, pregúntate si Dios no intenta enseñarte la paciencia. Si las circunstancias te vu elven tem erosa, tal vez sea la valentía lo que

R e la c ió n c o n e l fu t u r o

Dios está fom entando en tu vida. ¿Aún sigues cruzándote con gente a la que envidias de alguna

8 . L a p e r s e v e r a n c i a es una cualidad exterior del carácter que se necesita cuando una m ujer

m anera? ¿Q uisieras conversar acerca de la satisfacción?

está al borde de la renuncia, duda., evita tom ar decisiones o concluir una actividad. C hanco olvides q u e el cario taes u n o c e los prop ó sito s ¿5 Dios e n tu vida, te v a i s frustrado p e r las circunstancias.

____________________________________________________ R ick W a rre a pastor, autor____________________________________________________

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¿Quizá Dios puso algunas circunstancias frustrantes en tu cam ino? No olvides que Dios dispone

En Rem odelación del carácter, para cada una de las ocho cualidades tratadas, dispondrás de cinco

de esos m om entos para edificar tu personalidad. Cuando com ienzas a advertir que esas

días de lecturas, evaluaciones, escritura guiada de un diario y oraciones. Recom iendo que no te

situaciones son las herram ientas que Dios provee para que profundices en tu carácter, entonces

apures en leer los cinco días juntos. Detente al final de cada día de lectura. Reflexiona acerca de

estás preparado para h acer tu parte en el trabajo m ancom unado de la rem odelación del carácter.

los conceptos y m edita sobre los versículos. Cava hondo y sé sincera; no te conform es con

En este libro, te daré la guía y el consejo necesarios para que desarrolles tu personalidad

respuestas superfluas que dism inuyan el crecim iento en tu vida espiritual. Eleva la oración en voz

utilizando tres métodos eficaces de colaboración con Dios: la preparación, la oración y la práctica.

alta o escribe una tú misma. Con el objetivo de m antenernos organizadas en este esfuerzo que em prenderem os, la lectura de

1. P r e p a r a c ió n

cada día ha de transportarte a u n escenario especial entre asesor y cliente, para que puedas

Una de las maneras en que podem os colaborar con Dios en la rem odelación del carácter es a través de la preparación. Esto significa que por m edio de este libro aprenderem os todo lo que podam os acerca de lo que Dios desea de nosotros, para así consolidar sus principios en nuestros pensam ientos y actitudes.

centrarte con atención en u n tópico específico: D ía 1: ¡ B ie n v e n id a a m i h o g a r ! Deseo que cada semana im agines que te encuentras conmigo en m i hogar. Podrem os escoger entre sentarnos en el com edor o la sala; relajarnos en el banco situado en la entrada principal o en la ham aca del patio de atrás; o tam bién podríam os cam inar por los alrededores. La imagen mental que te pintaré será la de mi tiem po real en los lugares

2. O r a c ió n

auténticos de m i vida diaria, sin exagerar ni h acer alarde. Cuando me visites en mi propio entorno Otro m odo esencial de unirnos a la labor de Dios para hacernos más semejantes a Cristo e s por

hogareño, pronto verás cuán similares somos en m uchos aspectos. En m i rol de tu asesora de

m edio de la oración. O rar significa conversar con Dios. A través de las oraciones escritas en este

carácter (!o si prefieres de socia de crecim iento espiritual o colaboradora de sueños!), quiero

libro, invitarem os a Dios para que nos transform e, y entonces serem os capaces de apoyarnos en el

invitarte a que entres en m i vida y mi corazón, para que así logres sentirte más dispuesta a recibir

poder del Espíritu Santo para que edifique en nuestro interior los principios del carácter que aquí

lo que tengo para com partir contigo.

tratamos. El prim er día se inicia con el entrenam iento de fuerza por m edio del cual levantarem os los cim ientos para la cualidad del carácter a tratar en particular. Em pezam os p o r aprender acerca

3 . P r á c t ic a

del rasgo de carácter y cómo puede ser m ejor expuesto en nuestra vida. M ás im portante aún, Rem odelación del carácter te ayudará a ser proactiva y dar los pasos para desarrollar y

aprenderem os acerca de una cualidad com plem entaria de los m odos de Dios, tales como su

profundizar las ocho cualidades esenciales del carácter que han de ten er impacto en el plan de Dios para tu vida y alistarte en su servicio como sea que él disponga. Q uizá nunca pensaste que tu personalidad fu era algo sobre lo que pudieras llegar a realizar un trabajo. Sin em bargo, con el Plan de Acción te levantarás por ti misma y trabajarás codo a codo con el Espíritu Santo para

piedad, com pasión, poder o amor. N uestro firm e punto de apoyo y la convicción en cada atributo de Dios nos ayudará a profundizar esas características en nuestras propias vidas y a librarnos de las fortalezas que bloquean nuestra santidad y productividad para Dios.

lograrlo.

D ía 2: LTn m e n s a je . Estarás leyendo u n mensaje de m i corazón dedicado a ti. El segundo día exam ina las fortalezas a las que se dirige el rasgo de carácter de la sem ana. Este

C Ó M O S A C A R E L M A Y O R P R O V E C H O D E E S T E L IB R O

panoram a general te dará una base de conocim iento superior, más verdades para que incluyas

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en tus oraciones, y una convicción profunda para asegurarte los próxim os pasos.

pasos de acción.

En los días 2 y 3. te presentaré a una m aravillosa amiga mía. una m ujer real de la vida cotidiana como nosotras, una m ujer que intenta afianzar algunas cualidades específicas en su propia vida.

PLAN DE ACCIÓ N M AESTRO

No veo la hora de que conozcas a estas am igas im perfectas, pero tan adorables asesoras en

Cada sem ana serás alentada a elegir un paso clave de tu plan de acción, algo que deberás realizar

objetivo de vida. ¡Ellas sienten pasión verdadera por com pletar con obediencia el trabajo que Dios

en prim er térm ino, para así elaborar un Plan de Acción Maestro. Si puedes avanzar un paso firme

les encomendó!

en el camino del fortalecim iento de una de las cualidades, encontrarás que el resto se te dará naturalm ente. (Ver el Apéndice A en la página 362, en la sección en línea, si deseas un anticipo).

D ía 3 : T ie n e s c o r r e o . Cada semana estarás leyendo un mensaje especial de parte mía. Q uiero que im agines que me has dado tu dirección de correo y que mis palabras de aliento aterrizaron en tu buzón. El día tres penetra más hondo en el rasgo de carácter, ya que.

Tres formas de profundizar tu experiencia

llegada esa instancia, habrás visto las dos caras, la buena y la mala, y desearás m ayor inform ación sobre cómo vivirlo con diligencia en tu propia vida. ¡Adelante, disfruta del asesoram iento en el ciberespacio! D ía 4 : U n a e x c u r s ió n q u e c a m b ia r á t u p e r s p e c t iv a . ¡He planificado un viaje de estudios cada semana! N os encontrarem os «lejos» de m i casa, en algún lugar que sea propicio para ayudarnos a cam biar nuestra perspectiva y salir del tedio y la pasividad de nuestro m odo de vida. En este día especial, debes proponerte «dejar la ciudad» y disfrutar para regresar a tu hogar vigorizada. El cuarto día e s una ocasión crítica en este proceso. Aquí es cuando vo. asistida p o r la gracia, te ayudo a que logres realizar tu autoevaluación, y te pediré que respondas con sinceridad acerca de tu experiencia en cada una de las áreas tratadas. Los progresos de este día serán como un salto gigante que te llevará más lejos en el cum plim iento de las tareas que Dios te asignó desde antes de nacer. D ía 5 : S ié n t a t e e n p a z j u n t o a t u C r e a d o r . Este día es un momento de reflexión y retiro en la intim idad de tu propio espacio de paz con Dios. El ejercicio de esta jornada te perm itirá adoptar ciertas prácticas que tendrán como efecto profundizar en tu vida la cualidad específica

1. Diario del carácter: Intenta iniciar un diario del carácter en el que guardes registro de tus pensam ientos, escribas tu propias oraciones, e incluso dejes constancia de otras tantas preguntas y respuestas a medida que avanzas en la lectura de Remodelación del carácter. 2. Cuarenta días: C om o señalamos previam ente, utiliza cuarenta días (cinco días por sem ana durante ocho sem anas) para trabajar con el libro. O. si lo prefieres, puedes extenderlo a cincuenta y seis días (siete días por semana en ocho sem anas com pletas), leyendo durante cinco días y luego m editando acerca de las oraciones de las E scrituras que encontrarás en el A péndice B antes de pasar al aspecto del carácter de la próxim a semana. 3. Compañero a quien rindes cuentas: Procura la asistencia de un com pañero de lectura y oración, alguien capaz de brindarte apoyo y m antenerte responsable mientras avanzas a través del libro.

tratada durante la sem ana. Las decisiones finales que tom es serán un asunto entre tú y Dios. Un buen asesor o colaborador nunca intentará convencerte de h acer algo para lo que no estés preparada; ¡eso no funciona para nadie! Encontrarás estrategias de oración, estudio de las Escrituras, ideas para trabajar, y metas desafiantes que puedes utilizar en la form ulación de tus

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L A O R A C IÓ N D E U N A A S E S O R A P A R A T I

una m ujer de carácter.

En prim er lugar, quisiera hacerte la pregunta más im portante para alcanzar la rem odelación:

Ella tiene el sueño de hacer algo p or ti. pero el enem igo la retiene en forta leza s que utiliza

¿Estás absolutam ente segura de que deseas hacer esto? Eso e s lo que cualquier buen estilista te

para desalentarla y derrotarla. Señor, muéstrale quién eres en verdad y quién es ella por

preguntaría antes de cortarte la cabellera de sesenta centím etros, ¿no es así? O lo que cualquier

medio de la verdad de tu Palabra y el poder de tu Espíritu Santo, para lograr así sobreponerse

capataz de la construcción inteligente te preguntaría antes de com enzar una refacción com pleta en

ante las cosas que la detienen.

tu casa. Asum iré que la respuesta será: «¡Sí, deseo ser la m ejor versión de m í misma para agradar a Dios!»

E levo m i oración para que la envuelvas en tu protección mientras inicia el reto de su renovación. Bríndale valentía cuando los obstáculos o la autocondena am enacen m enoscabar

En este sentido, recuerda concederte alguna gracia en la m edida que aprendes más acerca de la

sus esfuerzos. M uéstrale la cualidad del carácter p or la que deseas que em piece, transform a su

personalidad sem ejante a Cristo que expone este libro. Incluso el apóstol Pablo dijo: «D e hecho,

vida de oración y asístela en su labor para que no decaiga hasta el fin a l. Ruego tus bendiciones

no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero» (Rom anos 7:19). Me encanta la sinceridad

para que su colaboración contigo la convierta en la m ujer hum ilde, segura, valiente, m edida,

de Pablo al adm itir que es m eram ente hum ano. Debes saber que Dios se com place en ver el

paciente, satisfecha, generosa y perseverante que tú creaste. Que el tiempo y la energía que

esfuerzo que realizas. Él se regocijará por tu s avances, y no te reprenderá por tus debilidades.

dedique al desarrollo de su personalidad te lleven a em plearla más poderosam ente en propósitos

Como y a lo com enté, si este libro no está lleno de am or y esperanza, ¿qué beneficio representará

que edifiquen tu reino, lo cua l perm itirá cosechar recom pensas eternas para ella y aquellos a

para ti? Lo últim o que necesitas es una presión m ayor. ¡Entonces, respira hondo y prepárate para

quienes la envíes a servir.

gozar convirtiéndote en la m ejor cristiana que puedas llegar a ser! Te alabo en el nombre poderoso de Jesús, amén. Cuando lleguen los tiem pos en que la m archa se vuelva pesada en el camino de este sueño de la renovación del carácter en colaboración, — ¡y dejem os en claro que así será!— quiero que te com prom etas a m antener tu m irada puesta en el prem io de alcanzar una personalidad semejante a la de Cristo, que te pondrá en una m ejor posición para vivir el sueño que Dios ideó desde siem pre para ti. Ahora, m ientras nos alistam os para dar inicio, haré algo fundam ental en toda sesión de asesoría espiritual, y eso es orar.

A m ado Señor: M i herm ana en Cristo inicia desde este momento la labor divina de llegar a ser lo mejor que pueda para ti. Ella tomó este libro acerca de cómo rem odelar su personalidad porque, desde lo más intimo de su ser. desea com placerte. Tú. Señor, eres el arquitecto de su vida, y edificaste algo herm oso en ella desde antes que fu era concebida. Ella desea unirse a ti en la tarea que realizas en su vida. Asim ism o, anhela preparar su corazón, orar p o r el cambio, y poseer los hábitos de

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P R IM E R A P A R T E

Capítulo i

Entabla una relación adecuada con Dios La humildad

No hagan nada por egoísm o o vanidad; más bien, con hum ildad consideren a los demás como superiores a ustedes mismos. F ilip e n s e s 2 :3

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alm as, en esta renovación de la personalidad.

H u m ild a d : D ía i

Am én. ¿Nos zam bullirem os en este concepto de la hum ildad que cam biará nuestras vidas y en verdad

Ver a Dios

nos dará la ayuda necesaria para v e r con los ojos de Dios? K A T IE : U N B U E N A C E R C A M IE N T O A L A H U M IL D A D

Todos quisiéram os ser hum ildes. Sin em bargo, ¿qué pasaría si nadie reparara en ello?

Recuerdo la actitud arrogante que yo tenía años atrás cuando era directora de relaciones públicas

J o h n O rtb e rg , p a s to r , a u to r

de una com pañía estatal altam ente rentable. M e hallaba en el cénit de m i época usar ropas caras y joyas valiosas, y era m uy consentida por mis patrones, tanto en la económ ico como en lo em ocional. Yo era de las pocas personas que pertenecían al círculo de los que eran im ita d o s a la

¡B IE N V E N ID A A M I H O G A R !

casa del jefe en ocasión de las celebraciones navideñas. ¡Había llegado a la cum bre! Creo que lo

¡Que alegría verte, bienvenida a m i hogar! ¿Por qué no me acom pañas hasta la sala y damos

que más am aba de aquel em pleo era que tenían en cuenta mi opinión, tenía una voz propia. El

com ienzo a la conversación sobre la renovación actualizadora que decidiste experim entar? Estoy

problem a estaba en que no sentía vergüenza de jactarm e de m i buena fortuna. Entonces sobrevino

em ocionada con este encuentro. Tengo u n sillón grande y cóm odo que te va a gustar, creo que le

la crisis cuando en u n instante, se produjo una reorganización corporativa como consecuencia de

dicen sillón y medio. Siéntete como en tu propio hogar, así que puedes quitarte los zapatos y

la puesta en venta de la com pañía, y yo term iné «en la calle» en búsqueda de u n nuevo trabajo

recostarte en los alm ohadones m ullidos como te plazca. Y a encendí la pequeña cascada que está

junto a m uchos otros com pañeros.

sobre la m esa para crear un sonido de fondo que arm onice con la charla, y en seguida traeré los bocadillos. Pero prim ero iniciem os nuestra aventura de cuarenta días orando juntas:

Fue por aquella época cuando alguien m e llamó caja de vapor. Era la única m anera que esa persona encontró para decir que solo había vapor dentro del recipiente de m i vida, que yo no tenía nada para ofrecer. N ada. Cero. Vacío. Mi corazón se hundió en la pena. ¡Me habían

D ulce y am ado Señor:

humillado! Yo sabía que eso no era cierto, pero me dolía dem asiado advertir que alguien pensaba N inguna renovación es sencilla, ya se trate de nuestra apariencia, el interior de nuestro hogar

tan pobrem ente de mí. Lo que aprendí aquel día fu e que la hum illación cruel no era la m anera de

la entrada de nuestra casa, o nuestro carácter. Ya que hoy com enzam os nuestra tarea, no

Dios, solo del hombre. D ecidí cam biar mi vida a partir de aquel com entario hostil. Me sum ergí en

necesitamos una tenaza ni un rodillo ni una pala jardinera como herramientas; solo requerimos

una búsqueda personal para «hacerm e real» y llenar mi vida plástica con sustancia cristiana.

de ti y la sabiduría de tu Palabra. Com prendem os que esta rem odelación de la personalidad no

Podría d ecir que Dios utilizó el despido de ese em pleo que acrecentaba m i orgullo, así como el

tendrá lugar si perm anecem os en la friv o lid a d y la pasividad; únicam ente se dará si nos

com entario hum illante, para atraer mi atención y generar en m í el deseo de trabajar en mi

involucram os en el proceso con entusiasmo. G uíanos con valor en tanto exploram os la hum ildad. Im prímela hoy en nuestros corazones. A yúdanos a ver cómo este rasgo del carácter es esencial

edificación, desarrollando una m ayor hum ildad en mi vida. Le estaré agradecida eternam ente p or ello.

en el desarrollo de todos los dem ás y p a ra com pletar el p lan m aravilloso que ideaste para nuestras vidas. Siéntate a nuestro lado en este momento inicial de la transform ación de nuestras

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C A S O S T Í P I C O S D E H U M IL D A D

Por otro lado, las personas hum ildes reconocen sus dones y fuerzas, y desean utilizarlos de la

La hum ildad es una cualidad m ovilizadora y atractiva en una persona. Las personas

m anera que Cristo les indica. Una persona verdaderam ente hum ilde servirá a Dios en cualquier

verdaderam ente hum ildes son agradables, hasta irresistibles. Cuando pienso acerca de algunos

m edida que le sea posible, incluso si no se considera habilidosa en esa área particular. ¿Qué

cuentos reconocidos que crecí leyendo, advertierto que aquello que los hacía tan cautivantes era el

podem os d ecir acerca de aquel que se presenta con diligencia cada semana para sacarles punta a

hecho de presenter personajes hum ildes, solidarios y generosos. En Wíllie W onka y la fá b rica de

los lápices de la congregación? ¿Acaso se le puede considerar habilidoso en el afilado de lápices?

chocolate 1 nos ponem os del lado del niño pobre Charlie Bucket, el único pequeño amable en el

N o, él sabe que ese trabajo debe realizarse y no se pregunta si su capacidad está por encim a de la

paseo por la fábrica de chocolate. Cenicienta es una m uchacha criticada pero de corazón hum ilde

tarea ni tam poco evalúa si debería conservar la energía para otra actividad más acorde a su

que se gana nuestro corazón en su trayecto hacia la conquista del príncipe. To K ill a

talento. ¿Con qué frecuencia oímos que el ministro de una iglesia solicita voluntarios?

M ockingbird 2 nos transporta cerca de un abogado blanco en el profundo sur llamado Atticus

G eneralm ente decim os: «Ese no es mi punto fuerte». ¿Sería otra m anera de decir: «Yo podría

Finch, un hom bre de hum ildad verdadera, quien siente un gran respeto por el hom bre de color al

ganar m ayor prestigio al h acer algo en lo que estoy capacitado»?

que defiende. En I t :s a W onderful LifeS se nos presenta a George Bailey, u n hom bre tan hum ilde

T al vez nosotros pensam os que la hum ildad es algo que no es en realidad. Q uizá asum im os que

que solo p o r m edio de un ángel pudo reconocer el valo r que tenía para las otras personas. Y

consiste en descubrir nuestro ser interior, pero, como ilustra m i ejem plo personal, hum ildad no

Chariots o f F ir e l es la historia real de Eric Liddell, u n m isionero convertido en atleta olím pico

es lo m ism o que hum illación. La hum illación es una autom ortificación que evoca la sensación de

que se gana nuestro respeto honrando a Dios p o r sobre su posibles m edallas. Son estos héroes

deshonra, vergüenza, de no ser m erecedores. ¡Nos dice a gritos que hicim os algo mal y que, por lo

diferentes, hum ildes y altruistas quienes logran que nos encariñem os con ellos, ya sea en la ficción

tanto, som os despreciables! Es mi deseo aclarar que Dios nos am a profundam ente para querer que

como en la vida misma.

nos sintam os de ese m odo; su anhelo no es avergonzarnos o hum illarnos. Ese es el propósito corruptor del dem onio. La Biblia dice que Dios nos honra, nos escoge, nos sigue, se sacrifica p or

L A H U M IL D A D E S L A P E R S P E C T I V A A D E C U A D A

nosotros, nos d a valentía, nos protege y nos brinda cuanto necesitam os, pero no dice que Dios

Entonces, ¿qué debem os hacer para volvernos hum ildes? ¿Es necesario provenir de un m edio

quiere hum illarnos. Debemos dar por sentado que Dios nos disciplina para que quitem os nuestros

hum ilde, como Charlie Bucket? ¿O ser m ortificado, como Cenicienta? ¿Debem os tolerar

ojos de nosotros m ism os y los posem os sobre él, pero disciplina no es lo mismo que humillación.

difam aciones por ayudar al acusado, como A tticus Finch? ¿O acaso debem os despreciarnos a nosotros mismos, como G eorge Bailey? ¿Significa el sacrificio de nuestra propia gloria, como lo hizo Eric Liddell? De hecho, ninguno de estos m étodos garantiza la hum ildad. Del mismo modo, podrían causarnos ira, pretensión de superioridad m oral, deseos de venganza, orgullo v/o

La hum ildad puede coexistir junto con el valor propio, la estim a y la dignidad personal. El pensam iento adecuado acerca de ti m ism a en relación a Dios e s u n pensam iento realista, un cuadro com pleto de tus fuerzas y debilidades, de tu apariencia verdadera, talentos genuinos, hábitos negativos y valor auténtico. C reer que eres una persona más valiosa de lo que eres en

depresión.

verdad es caer en el orgullo, y pensar que eres más desdichada de lo que en verdad eres es caer

El único camino seguro para alcanzar la hum ildad e s consiguiendo la perspectiva adecuada. La hum ildad es el resultado natural de poseer una visión precisa de quién es Dios y asimismo la

en la falsa hum ildad; otra form a de orgullo en tanto continúa siendo una actitud egocéntrica. No te confundas: somos los elegidos de Dios, sus valiosas posesiones. Isaías 62:4 nos dice:

correcta perspectiva de quién eres tú en relación a él. La gente hum ilde no se com para con otros, solo con Cristo. Ellos advierten su condición de pecadores y com prenden sus limitaciones.

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Ya no te llam arán «abandonada», ni a tu tierra la llam arán «desolada», sino que serás

Se trata de la m entalidad potencialm ente peligrosa del «poder del pensam iento positivo» que

llam ada «m i deleite"; tu tierra se llam ará «m i esposa»; porque el Señor se deleitará en ti. y tu tierra tendrá esposo.

dice: «Si lo creo, puedo lograrlo». Esto elim ina la dependencia de Dios y le roba cualquier gloria en el proceso. U na m ujer hum ilde recibe su fuerza para el viaje con Dios, luego le da su reconocim iento

Conclusión: es necesario que resolvam os esta cuestión de la falsa hum ildad versus la divina

cuando algo bueno sucede. La hum ildad ha de ser el punto de partida para transitar el angosto

hum ildad versus el orgullo con firm eza en nuestra m ente por m edio de la com prensión de que

pasaje que nos conduce a la profundidad de carácter. Sin ella, todos nos convertirem os en

nuestro valor reside en Dios, no en nosotros. Para graficarlo con un rango, piensa en la hum ildad

personas de grandes logros y altos principios, quienes no están más próxim as a la verdadera

como encontrarse en la m itad de la escala:

sem ejanza de Cristo que cuando iniciaron el viaje. ¡Y de seguro no es así como deseam os acabar!

¡Todos son m ejores q u e yo!

I

H um ilde

—

N i»

A rro g a n te

H U M IL D A D S I G N I F I C A C O N F I A N Z A E N T I M I S M A

I

Y a que nos referim os a la sem ejanza de Cristo, es fascinante descubrir cómo describía Jesús su

La falsa hum ildad está en el extrem o izquierdo de la escala, es decir, en pensar que todos son m ejores que tú. En el extrem o derecho de la escala se halla el pensam iento arrogante, orgulloso. La hum ildad ocupa el espacio interm edio, el equilibrio, con una visión adecuada de quién eres y quién no eres, de quién es Dios y de que tú no eres él. Cuando tus ojos se fijan solo en ti y en lo maravillosa que eres, eso equivale al orgullo. Cuando tu s ojos están fijos en Dios, no puedes más que ser humilde.

propio carácter. H allam os una única instancia en la que Jesús habla de sí m ism o en este sentido, y en esa conversación utilizó solo dos palabras para describirse. Puede que estas palabras te sorprendan. No son «fuerte y poderoso», u «om nisciente y sabio», o «perfecto y hom bre de Dios». Su auto descripción dice: Soy am able y hum ilde de corazón (Mateo il:29b). Tiem po después, al final de su vida, Jesús brindó a los discípulos una ilustración gráfica de su carácter amable y hum ilde m ientras les lavaba los pies:

Sabía Jesús que el P a dre había puesto todas las cosas bajo su dominio, y que había salido de

L A H U M IL ID A D E S T Á E N L A B A S E

D ios y a él volvía; así que se levantó de la mesa, se quitó el manto y se ató una toalla a la

De todos los rasgos de carácter sobre los que trabajarem os juntos, la hum ildad es no solo el más

cintura.

entrañable, sino el m ás fundacional de todos los dem ás. No puedes edificar cualidades genuinas sin disponer de la hum ildad como parte constitutiva de ellas. Perm ítem e ponerlo de la siguiente

Luego echó agua en un recipiente y com enzó a lavarles los pies a su s discípulos y a secárselos

manera. Sería algo natural para mí, con mi tendencia al asesoram iento, utilizar el m odelo de

con la toalla que llevaba a la cintura.

desarrollo de la personalidad de los «diez pasos fáciles hacia el carácter», o las «veinte maneras

JU A N 13:3-5

para ser el m ejor», o las «ocho cualidades de la personalidad triunfadora», y así reducir el proceso a una fórm ula superficial. La dificultad con dichas fórm ulas reside en el hecho de que,

Esta historia no com ienza con las acciones de Jesús, sino con su sabiduría. Jesús sabía de su

una vez seguidas las indicaciones, podrías suponer que conseguiste desarrollar tu persona, cuando

poder, sin embargo, no lo utilizó para dom inar o manipular; su poder se hallaba bajo el control

en verdad atravesaste una serie de ejercicios para el orgullo.

de Dios ... y esta es la definición bíblica de am abilidad. Jesús era hum ilde. No obstante, advierte

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que hum ildad no significa m inim izarte con cosas tales como «no soy así de talentoso», o

parte. Pero, aun cuando levanté la vista con enojo, él conocía el deseo de hum ildad que albergaba

«sim plem ente lo im provisé, no es para nada valioso». Jesús tenía conocim iento de su naturaleza

en m i corazón. No tenía que lavar retretes para volverm e hum ilde ... debía enfocarm e en el poder

verdadera, sus fuerzas, su identidad y su porvenir brillante. No obstante a ello, sin dar aviso

de Dios y la hum ildad le seguiría. Debo adm itir que el proceso que atravesé fue largo y dificultoso,

interrum pió su com ida, hizo los preparativos y se dispuso a servir a los dem ás. Por la solidez de la

como ya te debes imaginar, sin em bargo, estoy agradecida p o r la paciencia que él m e tuvo. Una

imagen que tenía de sí mismo, Jesús s e m a con hum ildad.

advertencia final: ¡Ten cuidado con lo que pides en la oración!

¿Consideraste alguna vez que poseer hum ildad y una imagen propia consistente son conceptos contradictorios? Jesús no lo hizo. Su hum ilde acto de servicio nació del sentido de seguridad que guardaba acerca de todo aquello que era bueno y verdadero en él. La lección en este punto es tener en cuenta que es necesaria una im agen propia favorable para realizar actos de servicio hum ildes. G. K. Chesterton, un influyente escritor inglés de principios del siglo veinte, dijo: «Los hum ildes son siem pre seguros de sí». ¿ D E B E R ÍA S O R A R P O R L A H U M IL D A D ? Pedirle a Dios hum ildad e s algo que asusta. Todo lo que puedo decir es: ¡Ten cuidado con lo que pides! Q uizá te preguntes: ¿Responderá Dios a m is oraciones por hum ildad avergonzándom e? ¿H um illándom e? Bueno, ciertam ente yo pensaba que la respuesta era sí muchos años atrás, cuando realizaba tareas de lim pieza en casas de fam ilias adineradas. Un día, luego de pasar una hora lavando u n m agnífico baño principal, me encontré de rodillas en la planta baja, fregando un piso de m árm ol que parecía extenderse por m illas desde la entrada hacia la sala de estar y el cuarto fam iliar, pasando por la cocina hasta la puerta trasera deslizante. De pronto, levanté la vista al cielo, agité mi puño ante Dios y grité con ira: «¿Así es como respondes m i oración sincera y constante por hum ildad? ¡Cómo te atreves a tratarm e de este modo!» Estaba furiosa con Dios. Había orado que m e librara de todo orgullo, ¡pero fregar retretes y pisos semana tras semana era dem asiado! Advierte que incluso mi reacción iracunda hacia Dios era evidencia de un corazón sin hum ildad. (Por cierto, esto ocurrió en 1989, inm ediatam ente antes de obtener el em pleo fantástico de relaciones públicas ... ¡y y a expusim os m i orgullo allí!) Ahora bien, la gran pregunta: ¿Dios me había puesto en el sitio de m ucam a para así responder a mi oración de hum ildad? N o, ser una derrochadora m adre soltera cursando la universidad fue lo que m e había llevado a ese sitio. Yo misma había dispuesto las circunstancias, p o r lo m enos en

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O R A C IÓ N Diario Si la humildad consiste en poseer la perspectiva adecuada acerca de quién es D ios y quién soy yo en relación a él. empecemos por afirmar dicha p e r f e c tiv a en nuestra mente. Este concepto es descrito poder osam ente en el Salmo 103. Lee cada parte del salmo, luego resume tus respuestas a las tres presuntas:

A m ado Señor:

Salmo 103:1-5

la hum ildad del modo que escojas. Reafirm a m i identidad en ti p a ra que pueda tener la

¿Q uién es Dios0 ___________________________________ ¿Q uién soy yo en relación a D io s '________________________ ¿Cómo puede volverme humilde esta com prenaón?

Te agradezco que no causes m i hum illación, sino que la redimas p a ra bien en m i vida. Esto me alivia. Deseo tener hum ildad, pero es intim idante orar p or ella, ¡pienso en qué circunstancias utilizarás p a ra que yo pueda aprenderla! Confío en ti. Señor, y me entrego para que me enseñes confianza necesaria y así volverm e hum ilde. Retiene mi m irada en ti. p a ra que deje de estar centrada en mí misma. M uéstram e las necesidades de los que me rodean; luego ayúdam e a hacer algo para m odificar lo que me muestras. Y en tanto voy dejando de pensar en mí y poso mis ojos en ti y en los demás, espero ansiosa ser advertida p or ti com o una más de tus hum ildes

Salmo 103:6-10

servidoras.

¿Q uién es Dios0 _______________________________

En el nombre de Jesús, amén.

¿Quién soy yo en relación a D io s '_______________ ¿Cómo puede volverme humilde esta com prenaón?

Salmo 103:11-14 ¿Q uién es Dios?

1 WtUie JTcn-'M a n d th e Chocolate Facían; (Sota del T.) 2 M atar a un ruiseñor (S o ta del T.) 3 La \id a ec trarar.i ¡losa (Sota del T.) 4 Carrozas de Juego (Sota de! T.)

¿Q uién soy yo en relación a D io s '_______________ ¿Cómo puede volverme humilde esta com prenaón?

Salmo 103:15-1S ¿Q uién es Dios? ¿Q uién soy yo en relación a Dios? ¿Cómo puede volverme humilde esta com prenaón?

Salmo 103:19-22 ¿Q uién es Dios? ¿Q uién soy yo en relación a Dios? ¿Cómo puede volverme humilde esta com prenaón?

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hacían con sus brazos articulados o al lanzarlo en el aire; y la supuesta m isión exclusiva existía

H u m ild a d : D ía 2

solo en su cabeza. Eso es lo que hace el orgullo. No vuelve unos delirantes. N os concentram os tanto en nuestra capacidad exagerada, posesiones, apariencia, valo r y condición de indispensables, que evadim os el hecho de que la realidad es otra, ya que nos m uestra que todo lo que som os

Orgullo: Descubre a tu Buzz Lightyear interior

proviene de Dios y que no podem os h acer nada sin él. En Toy Story. Buzz sufre un accidente m ientras discute sobre su habilidad de volar, entonces W oody sale al rescate. Esto viene a dar prueba de la bien conocida frase: «Al orgullo le sigue la

El orgullo es la raíz de todo mal y todo pecado. A n d r e w M u r r a y , 1 S 2 8 -1 9 1 7 , m in is t r o d e la I g le s ia H o la n d e s a R e f o r m a d a y a u t o r .

destrucción; a la altanería, el fracaso» (Proverbios 16:18). LAS M U C H A S C A R A S D EL O R C U L L O En esencia, el orgullo e s u n problem a que se presenta cuando me considero el centro de todas las

UN M EN SA JE

cosas. N os encontrarem os con u n rango com pleto de pecados dirigidos por el orgullo, los cuales se NOTA: H oy es el Día 2. p or lo que tienes que leer el texto que sigue. ¡Que disfrutes de este

observan más a m enudo en las m aneras en que nos valoram os erróneam ente y tam bién a los

asesoram iento y no olvides com enzar con una oración!

demás, ya sea exaltándonos, hum illándonos, atacando a otros o ignorándolos. El orgullo nos enfrenta con Dios y trata de apropiarse de su señorío para nosotros.

4

L a e x a lt a c ió n d e l e g o : « T o d o g ir a a m i a lr e d e d o r » .

EL R EVER SO D EL O R GU LLO

La p elícula anim ada Toy Story de 1995 cuenta la historia de la rivalidad entre W oody, el honesto

La exaltación del ego tiene lugar en el momento en que nos sobrevaloram os. cuando intentam os

vaquero de ju guete, y Buzz Lightyear. el orgulloso y selecto astronauta de plástico. El problem a

enaltecernos a nosotros m ism os. Pasem os a considerar algunas de las conductas que las m ujeres

con Buzz es que está convencido de ser un soldado espacial auténtico, encargado de la misión de

utilizan para exaltar sus personalidades:

salvar a la galaxia de su destrucción. Se encuentra tan centrado en sí m ism o que no repara en su condición de simple m uñeco de ju guete. W oody tiene la tarea de señalar los puntos débiles de

♦Alarde constante de los logros de sus hijos.

Buzz en cada ocasión que se presenta. Por ejem plo, cuando Buzz prepara su láser insensibilizador al m odo matar, W oody replica: «Ah, m uy bien. Si alguien ataca, lo podrem os estropear hasta

♦Exageración, porque la verdad simple y pura no genera la reacción suficiente.

matarlo». Cuando Buzz despliega sus alas de plástico, W oody se mofa diciendo: «¡Eso no es volar!

♦Servir para ser advertida. Este fue uno de mis problem as particulares durante una

¡Eso es caer con estilo!».

tem porada. U na vez que m e hallaba realizando cierta m isión en África, mi orgullo

Buzz estaba obsesionado con sus poderes, sus armas, su m isión extraordinaria y su rol clave en

asom ó su rostro desagradable. M ientras aseábam os a los niños de la calle, yo estaba pasando por un día terrible, así que ... decidí evitar al fotógrafo que sacaba imágenes

la salvación del m undo. Por causa de su orgullo, perdió contacto con la verdad de que sus poderes provenían de un p ar de baterías; sus habilidades eran los movimientos que los niños

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inocentes de las actividades que se llevaban a cabo. ¿Orgullosa? Sí, pero aquí fue

donde entró a ju gar el lado más retorcido del orgullo: ¡De repente, m e senti m u y furiosa

♦M ujeres que se desprecian y señalan sus defectos de continuo, sus faltas, o las áreas en que

porque no iba a figurar en ninguna de las fotografías que circularían una vez

otras personas son mejores.

estuviera de regreso en mi casa! Cuando ayunen, no pongan cara triste como hacen los hipócritas, que dem udan su s rostros ♦Sentirse con derecho a ser tratada como una estrella, especialm ente en períodos de trabajo duro.

p a ra m ostrar que están ayunando. Les aseguro que éstos ya han obtenido toda su recompensa.

♦Especular p o r una posición preferencial dentro de la fam ilia, la com unidad o el lugar de

M ATEO 6:16

trabajo. ¡Ay de ustedes, fariseos!, que se mueren p o r los prim eros puestos en las sinagogas y los saludos

E l a t a q u e a lo s d e m á s : « N o e r e s t a n b u e n o c o m o y o » .

en las plazas. El orgullo que ataca a los demás es un espíritu sentencioso, una fuerza que devalúa a otros p or LUCAS 11:43

medio de agresiones. A dvertirás este rasgo en m ujeres de tem peram entos críticos, irritables, intolerantes, discutidores, y en m ujeres que consideran su conducta m oralm ente superior. Lee el

¡No hay dudas de que Jesús sabe decir las cosas tal cual son! Cuando nos envanecem os, no estamos exaltando a Dios. De hecho, la propia exaltación conduce a que nos adueñem os del

conocido pasaje de la Biblia acerca de la paja en el ojo ajeno y la viga en el propio para adquirir una nueva perspectiva sobre este tipo de orgullo:

crédito que pertenece a Dios ... reclam ándolo como si lo hubiéram os ganado por mérito propio. .Yo ju zg uen a nadie, p a ra que nadie los ju zg u e a ustedes. Porque tal com o ju zg uen se les L a h u m illa c ió n d e l e g o : « P o b r e d e m í» .

ju zg a rá , y con la m edida que m idan a otros, se les medirá a ustedes. ¿Por qué te fija s en la

La desvalorización es la form a más engañosa del orgullo. Esta clase de orgullo se enm ascara con la

astilla que tiene tu herm ano en el ojo. y no le das im portancia a la viga que está en el tuyo?

hum ildad, pero en realidad es un m étodo para atraer la atención de m anera inversa. Las mujeres

¿Cómo p uedes decirle a tu herm ano: «Déjam e sacarte la astilla del ojo», cuando a h í tienes

que se dan poca im portancia son verdaderas m aestras en subestim ar su valor. Piensa en algunos

una viga en el tuyo? ¡H ipócrita!, saca prim ero la viga de tu propio ojo. y entonces verás con

de los m étodos que viste utilizar a las m ujeres para ponerse p o r el suelo, a la espera de que

claridad p a ra sacar la astilla del ojo de tu hermano.

alguien repare en ellas y les dé ánimo con adulaciones. ¿Qué dirías de las siguientes m ujeres?

M ATEO 7:1-5

♦M ujeres que trabajan dem asiado y perm iten que otros saquen provecho de ellas.

A tacar a los demás y tratar de cambiarlos conduce a querer ocupar el sitio del Espíritu Santo en la vida de la gente.

♦M ujeres con dificultad para aceptar ayuda, regalos o cum plidos porque no se sienten suficientem ente m erecedoras, o piensan que es vergonzoso o incóm odo necesitar ayuda. ♦Perfeccionistas que intentan probar su valía en secreto controlando por com pleto ciertas áreas de sus vidas.

I g n o r a r a lo s d e m á s : « N o e r e s m i je f e » . Cuando m i hija era pequeña solía d ecir a su hermano m ayor: «Tú no puedes dirigirm e. ¡No eres

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mi jefe!». Este tipo de indiferencia hacia los demás es una m anera evidente de subestim ar su

una niñera adolescente que hizo del hecho «una condición para una am istad sincera y eterna», y

consejo. Las m ujeres que son dem asiado orgullosas como para recibir consejos deben lidiar con

am istad era justam ente lo que Bette tenía deseos de conseguir. A la edad de nueve años Bette

algunos de los siguientes asuntos:

com ía dem asiado con el objetivo de engordar y así m antener alejados a quienes la acosaban. En su adolescencia se volvió una estudiante de grandes logros escolares para com pensar su pobre

♦No se les puede enseñar nada. La actitud típica de «ya lo tengo todo resuelto» les cierra las

autoestim a y la vergüenza que sentía. Aun así, cuando contaba con dieciocho años, oyó al pasar el com entario de una com pañera de trabajo: «Nunca llegará a nada», lo que m arcó a fuego la vida

puertas al consejo u opinión que otras personas podrían brindarle para sus vidas. ♦Se quedan atrapadas en malos hábitos. Algunas m ujeres ven su pasado y su personalidad como una tram pa en la que han caído sin lograr soltarse, en lugar de reconocer que

de Bette por los siguientes treinta años, durante los cuales vivió intentando dem ostrar que no era cierto.

bien pueden escoger seguir así o cam biar su conducta. Para algunas de ellas la frase

Bette buscó m ejorar su autoestim a por sus propios m edios. Trabajó duro en el ámbito legal,

«Tienes que aceptarm e tal como soy» hace las veces de cortina de humo para evitar

enfocada en conseguir los m ejores títulos y los salarios más altos prom oviéndose de una manera

cam biar sus malos hábitos.

exagerada, con el fin de esconder sus insuficiencias. Escondía su inseguridad en las relaciones

♦N unca adm iten sus faltas. Estas son las m ujeres «duras de oído», quienes parecen no percibir o asim ilar palabras de consejo o correcciones, indicaciones, reprim endas o

com prando regalos para sus amigos en cada ocasión y en los negocios de más prestigio, aun con dinero que ella no tenía. Ocultaba su tem or de no estar a la altura de las circunstancias tratando de ser la mamá perfecta, la amiga perfecta, y hasta la perfecta m iem bro de iglesia.

señales de alerta.

El punto de quiebre llegó en el 2001. Según palabras de Bette: «Un día, mientras estaba sola en La arrogancia de Israel testifica en su contra, pero él no se vuelve al Señor su Dios; a pesar de

casa escuchando una canción, descubrí que llevaba encim a una enorm e carga de vergüenza.

todo esto, no lo busca.

Escuché la palabra «vergüenza» y em pecé a llorar. ¡Yo no quería continuar avergonzada de la OSEAS 7:10

persona que Dios me había creado para ser!» En el 2003, siguiendo la guía inconfundible de Dios, Bette y su fam ilia abandonaron California y

Ignorar a los dem ás es un rechazo a ser influenciada p o r aquellos que el Espíritu Santo intenta utilizar para hablar a tu vida. Es como decirle a Dios: Estoy bien así.

se m udaron a la hacienda fam iliar de Texas. A llí em pezó a dejar sus m étodos de com pensación, uno tras otro, y en el proceso se hizo consciente de la vida llena de sencillez y honestidad que podía llevar sin aquellas m áscaras de orgullo y vergüenza. Desde luego que no ocuparía cargos

L A H I S T O R I A D E L Q U E B R A N T A M IE N T O D E B E T T E

jerárquicos en grandes com pañías ni otros em pleos prestigiosos. Tam poco podría pagar los regalos

Es probable que hayas escuchado por ahí que el quebranto e s uno de los pasos que llevan a la

de N avidad, pero tras la hum illación inicial de verse avergonzada por no creer alcanzar las

hum ildad. Pero ... al principio puede que te lleve en la dirección contraria. El quebranto de mi

expectativas que im aginaba tendría la gente, experim entó un sentido liberador de retorno a la

amiga Bette le trajo años de com pensaciones por su vergüenza, lo que de hecho se convirtió en

am istad sincera basada en el amor, no en los regalos.

orgullo. Siendo una niña pequeña, las am istades de Bette resultaron arruinadas p o r numerosas instancias de abuso sexual que m antuvo en secreto. En unos de esos episodios fu e m anipulada por

Cuando el pastor de su nueva com unidad se enteró de su pasado como líd er de m inisterios de m ujeres, la invitó a que ocupara ese lugar en su iglesia. Pero, dado que no sintió la confirm ación

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de Dios, prefirió no aferrarse a la aprobación y la aceptación que vendrían de la mano de aquella S / / / / /

«salida fácil». En cambio, se mantuvo a resguardo con u n perfil bajo, realizando proyectos tem porarios a pedido y esperando p o r el m inisterio que Dios deseara para ella. Visto que disponía

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