Bosque Estacionalmente Seco

UNIVERSIDAD NACIONAL FEDERICO VILLARREAL FACULTAD DE INGENIERÍA GEOGRÁFICA, AMBIENTAL Y ECOTURISMO BOSQUE ESTACIONALMEN

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UNIVERSIDAD NACIONAL FEDERICO VILLARREAL FACULTAD DE INGENIERÍA GEOGRÁFICA, AMBIENTAL Y ECOTURISMO

BOSQUE ESTACIONALMENTE SECO PARAMO MATORRAL ANDINO Curso:

Ecologia Aplicada

Alumno

Huamán Clemente, Luis Anthony Apaza Vilca, Juan Luis Lengua Gutiérrez, Antonio Erazo Medina, Bruno Wilbert

2019 LIMA – PERU

BOSQUE ESTACIONALMENTE SECO INTRODUCCION Los Bosques Estacionalmente Secos (BES) del Perú han sido desde la antigüedad un recurso subestimado por las poblaciones que se asentaron a sus alrededores. Ya desde la época prehispánica las diferentes culturas que allí habitaron hicieron uso intensivo de sus recursos sin preocuparse por el impacto que sus actividades podrían causar. Esta es la situación que se ha mantenido a través de toda nuestra historia hasta la actualidad. Aún ahora mucha gente no está al tanto de los beneficios y el equilibrio que este tipo de formaciones boscosa resguarda con bastante fragilidad. Sumado a la presión que ejerce el hombre sobre los bosques estacionalmente secos se encuentra el hecho de la falta de investigación existente sobre estas áreas. Hasta la fecha no se han realizado estudios lo suficientemente profundos que permitan entender la complejidad con la que estos bosques se desenvuelven para persistir en el tiempo aún en las condiciones más desfavorables. Estos factores son los que han determinado el fracaso de múltiples intentos por manejar estas superficies.

DISTRIBUCION GEOGRAFICA Debe quedar claro, que los Bosques Estacionalmente Secos del Perú no deben de verse como entidades aisladas. El hecho de que se analicen para el contexto peruano, no significa que su distribución termina en las fronteras. Estos bosques están presentes en todo el Neo trópico y la parte peruana debe de ser considerada junto con los bosques del Ecuador como una sola unidad .Sin embargo, se descarta cualquier relación florística con las formaciones de Bosques Estacionalmente Secos en Bolivia que tienen mayores lazos florísticos con la vegetación estacional chaqueña boliviano-argentina. En un estudio reciente utilizando análisis florísticos, se pudo reconocer tres subunidades de bosques secos: BES Ecuatoriales, BES Interandinos y BES Orientales.

 BES Ecuatoriales Aquí se incluyen los BES de Tumbes, Piura y Lambayeque y representan la mayor extensión de BES en el país y probablemente la muestra menos fragmentada y destruida de este tipo de ecosistema en el Perú. En principio se pueden diferenciar dos tipos de BES: de llanura y de montaña. Los BES de llanura se encuentran en las llanuras de la costa. Tienen densidades bajas de árboles y pocas especies en general. Por el contrario, los BES de montaña se ubican principalmente sobre las vertientes y cadenas occidentales de los Andes y densidades y riqueza de especies mucho más altos. Las formaciones de BES en la región de la Costa del noroeste del Perú se han estimado en 3’230,363 hectáreas que comprenden alrededor del 58% del área total de los departamentos de Tumbes, Piura y Lambayeque. Las relaciones florísticas y fitogeográficas más fuertes de esta subunidad se dan con la subunidad de BES Interandinos. Esta afinidad es mayor de parte de los bosques menos diversos de las llanuras.

 BES Interandinos A diferencia de la subunidad anterior, está compuesta principalmente por fragmentos y remanentes de BES en las laderas de los valles de los ríos Huancabamba, Marañón, Apurímac y Mantaro principalmente, pero también algunos valles en Cusco (Quillabamba) y Puno (Sandia). Ocupa una superficie de 310 600 has. (0,24% del territorio nacional). Colecciones botánicas y expediciones más recientes han descubierto otros remanentes pequeños y aislados de formaciones de BES en las áreas de Quillabamba, Machupicchu y Manu-Parobamba (entrada a Callanga) en el departamento del Cusco y Sandia en el departamento de Puno, en la sección interandina del valle del Huallaga en el departamento de Huánuco. Las relaciones florísticas y fitogeográficas internas y externas de esta subunidad son muy complejas. Su mayor afinidad esta con los BES Ecuatoriales. Sin embargo, existe asimismo cierto grado de afinidad con los BES interandinos de Bolivia, aunque

es difícil establecer un límite preciso por la poca información disponible. Esto ha hecho que diversos autores hayan propuesto considerar a los BES de los valles interandinos del sur del Perú y del noroeste de Bolivia como estrechamente relacionados.

 BES Orientales Compuesta por fragmentos de BES en los flancos orientales de los Andes en Tarapoto, departamento de San Martín. Existe una similitud muy baja de los bosques de esta región con otros BES en la costa de Ecuador-Perú y de los Andes peruanos. El endemismo de esta región es alto.

CARACTERISTICAS CLIMATICAS  BES Ecuatoriales El clima de estos bosques corresponde al tipo desértico, con influencia de la corriente marina de Humboldt, generalmente cálido y húmedo, de precipitaciones ínfimas a pesar de las diferentes nubosidades que puedan cubrir el cielo. La temperaturas alcanzan valores que van entre los 23ºC y 24ºC y las precipitaciones se encuentran en los 2500 mm anuales. La alternancia de temporadas secas y húmedas es afectada por oscilaciones climáticas cíclicas, aunque irregulares, que la mantienen entre años secos y años lluviosos. Estas alteraciones son las manifestaciones del desplazamiento de las corrientes marinas, fría y caliente, a lo largo del litoral tumbesino, piurano y lambayecano. Suelen haber fuertes sequías y grandes diluvios, consecuencia de fenómenos conocidos con el nombre de El Niño y La Niña.  BES Interandinos El valle medio y alto del río Marañón, que corre de sur a norte, entre las cadenas occidental y central de la cordillera de los Andes, presenta características muy especiales. Desde los 9º 30' L.S. hacia el norte; el piso inferior es seco debido a las bajas precipitaciones por el encajonamiento del valle, pues las cadenas de montañas no permiten el paso de las nubes y de precipitaciones abundantes. La cordillera Central, ubicada entre el Marañón y el Huallaga, se constituye en una barrera para los vientos cargados de humedad provenientes de la parte amazónica. La temperatura media anual oscila entre 17 y 25º C y la precipitación media anual entre 230 a 530mm.  BES Orientales La irregular fisiografía de San Martín da como resultado un clima heterogéneo, que varía principalmente con la altitud y la época de año, correspondiendo a los tipos climáticos de bosque tropical húmedo en la zona del Alto Mayo y bosque tropical seco en la zona del bajo Mayo y Huallaga Central; con precipitaciones que oscilan entre 600-1200 mm y temperaturas promedio de 26ºC.

CARACTERISTICAS DE LA VEGETACION  BES Ecuatoriales En cuanto a su fisonomía, se han identificado tres tipos de bosques: seco semidenso, sabana y chaparral (Cevallos, 1998). El primero se encuentra encima de los 400 msnm, de fuertes pendientes que lo hacen inaccesible para el hombre; sin embargo, han sido sometidos a una tala selectiva de sus principales especies: Loxopteriygium huasango(hualtaco) y Bursera graveolens (palo santo); el número promedio de árboles es de 81,61 árb/ha, y el volumen comercial de 6,5 m3/ha. El bosque tipo sabana se caracteriza por su baja densidad, consecuencia de la tala discriminada y sobrepastoreo, la vegetación predominante es: Prosopis pallida

(algarrobo) y Capparis scabrida(sapote). El número promedio de árboles es de 44,25 árb/ha y el volumen comercial de 3,21 m3/ha. El bosque chaparral se caracteriza por tener una asociación vegetal de tipo arbustivas y árboles pequeños, inclinados y totalmente retorcidos, con pastos desérticos.

 BES Interandinos El bosque está constituido por una masa homogénea de árboles caducifolios, representado en un 90% por el pasayo, especie de porte bajo (5-8 m) y de fuste irregular o tortuoso; es común la presencia de la salvajina, que se cuelgan del pasallo, al igual que en los bosques secos de colinas y el bosque seco de montañas.

 BES Orientales La vegetación arbórea y arbustiva presenta características típicas de los bosques secos como son: la predominancia de especies caducifolias y presencia de algunas plantas espinosas, así como la escasa ocurrencia del epifitismo; existiendo también una predominancia de árboles de fuste delgado, estimándose que la mitad de los árboles tienen un Dap menor de 32 cm. mientras que el resto son de mayor grosor, hasta aproximadamente un diámetro máximo de 100 cm. En cuanto a las alturas de los árboles altura comercial el 77% tiene entre 3 y 7 m., siendo escasos (menos del 3%) los individuos más de 12m.

CARECTERISTICAS DE LA FAUNA La fauna de las 3 formaciones de BES es de origen amazónico. Los mamíferos que se pueden observar, si bien muchos están hoy amenazados por la extinción, son pumas, tigrillos, venados, zorros, ardillas y osos hormigueros. Los pájaros más comunes son los chilalos, gallinazos, halcones y cóndores, garzas, patos y flamencos. Hay serpientes como colambos y macanches, así como corales. Se encuentran peces de ríos y de lagunas, como la lisa. En ciertas zonas quedan sajinos, jaguares, pumas, venados colorados, venados grises, perezosos, armadillos de nueve bandas, nutrias, etc. Se pueden ver monos como el coto de Tumbes (BES ecuatorial) y machines blancos en los otros (Brack, 2004). Entre las características de este tipo de fauna podemos mencionar: 

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Color generalmente ente de pálido que le ayudan al animal a mantenerse fresco. Esto se debe a que los colores claros reflejan los rayos candentes del sol y los oscuros los absorben. Actividad nocturna, cuando las condiciones son de mayor humedad y menor temperatura. Capacidad de sobrevivir sin beber agua directamente ya que su agua metabólica la obtienen totalmente de las plantas. Adaptaciones para aumentar la ventilación de los cuerpos. Reproducción durante los meses de lluvias. Por ejemplo, los ciclos reproductivos de muchas de las aves que habitan los BES están ligados a la llegada de las lluvias, cuando la comida es más abundante. Letargo durante las épocas secas. Alguno anima les como el pacaso (Calllopistes flavipunctatus) vive en huecos del suelo, donde se refugia durante la época seca, resistiendo largos meses de la grasa acumulada, especialmente en la cola.

CARACTERISTICAS ECOLOGICAS Son varios los factores que interactúan en el desarrollo del bosque. Si bien es cierto que el bosque estacionalmente seco es una sola unidad ecológica y, dentro de él, el factor determinante es la precipitación, también hay marcada influencia de la calidad de sitio, de la profundidad de la napa freática, etc. Todas estas condiciones han propiciado una serie de adaptaciones en las especies de flora que les han permitido mantener su sitio en el ecosistema. Generalmente las especies que se pueden encontrar en los bosques estacionalmente secos presentan la particularidad de resistir décadas de años secos y de recuperarse naturalmente, a pesar de reducirse hasta el borde de la desaparición. Esto debido a una serie de adaptaciones como:

 







Semillas resistentes a las más severas y prolongadas sequías, brotando con el primer retorno de las lluvias. Pérdida temporal de las hojas (especies caducifolias) durante los periodos secos para reducir las superficies a través de las cuales las plantas podrían perder rápidamente agua por efecto de las altas temperaturas. Reducción o desaparición de las hojas, como en los cactus, en los que las hojas se han transformado completamente en espinas, por lo cual, además de prevenir la evaporación del agua por transpiración mejor que las hojas normales, sirven de defensa a la planta contra el ataque de animales sedientos. La mayoría de árboles florecen en la estación seca, pues en esta época no hay competencia por luz ya que los árboles están sin hojas y es el momento en el cual la polinización, por medio de los diferentes vectores, se hace más efectiva. Los insectos llegan a las flores con mayor facilidad y el viento puede dispersar el polen sin que el foliaje sea un obstáculo. Raíces primarias muy desarrolladas o pivotantes que le permiten a la planta captar agua de la napa freática para aliviar sus necesidades hídricas.

IMPORTANCIA ECONOMICA Y ECOLOGICA 

Importancia Económica Los árboles que conforman estos bosques son de usos muy variados. Especies como el Algarrobo (Prosopis pallida) son ampliamente utilizados por los pobladores por producir excelente leña y carbón de leña, muy utilizados en las zonas rurales. La famosa chicha de Catacaos, en Piura, se cocina con rajas de algarrobo. Además, este árbol también se caracteriza por tener madera muy dura y resistente. En los sitios arqueológicos se han encontrado vigas de algarrobo que han resistido miles de años. En la actualidad se usa su madera para construcciones rurales de casas, cercos, establos, muebles, utensilios y artesanías. Por último, brinda productos no maderables como la algarrobina, bebida ampliamente comercializa.



Importancia Ecológica Los suelos en los cuales se desarrollan los BES son muy frágiles y, de estar descubiertos, son propensos a la erosión. En este contexto es que los diferentes bosques estacionalmente secos juegan un papel muy importante al controlar el avance de la desertificación, pues modera los vientos y asegura la detención del suelo dentro del ecosistema. Además de prevenir la perdida de suelos también los enriquece a través de la hojarasca que se deposita en los estratos inferiores del bosque. La descomposición de la hojarasca da lugar a la aparición y crecimiento de la capa de materia orgánica de los suelos. La tala de estos bosques puede generar un desequilibrio y deterioro del ecosistema como se puede apreciar en el departamento

de San Martín, donde el retroceso de los bosques secos dio lugar a fenómenos y desastres naturales cada vez más marcados como, por ejemplo, el cambio de comportamiento de los flujos de agua de ríos a torrentes.

CONCLUSIONES Los bosques estacionalmente secos del Perú son ecosistemas únicos y frágiles que se encuentren fuertemente amenazados por las actividades antrópicas que avanzan de forma descontrolada a lo largo de nuestro territorio. Actualmente estas formaciones boscosas abarcan menos del 3% del territorio peruano pero su importancia para mantener al margen la desertificación es crucial. Zonas que originalmente contenían a los BES y ahora se encuentran sin ellas presentan sequías prolongadas y lluvias torrenciales de carácter catastrófico. Los BES constituyen un valioso recurso actual y potencial de subsistencia de las poblaciones marginales, así como las urbanas, por los múltiples beneficios que brinda en los rubros industrial, artesanal, pecuario, alimenticio, energético y ornamental.

MATORRAL ANDINO INTRODUCCION El matorral es un campo caracterizado por una vegetación dominada por arbustos y matas, y que a menudo incluye céspedes, plantas de porte herbáceo y plantas geófitas. El matorral también puede surgir como consecuencia de la actividad humana.1 Puede ser la vegetación madura en una región particular y seguir de un modo estable durante un periodo, o una comunidad transitoria que se desarrolle temporalmente como resultado de un disturbio, tal como el fuego.

DISTRIBUCION GEOGRAFICA Hay que recalcar que los matorrales no solo los encontramos en el Perú si no en el resto del mundo con diferentes condiciones, los siguientes matorrales que presentamos son los presentados por el MINAM, que nos dice que se encuentran ubicados en la región yunga y la región andina.

CLASIFICACION DE LOS MATORRALES EN EL PERÚ  Matorral esclerófilo de montaña Este tipo de cobertura se encuentra ubicado en las mesetas ubicadas en la cima de la Cordillera El Cóndor, arriba de los 1800 m. s. n. m. Ocupa una superficie de 2508 ha, que representa menos del 0,01 % del área nacional. Este matorral está conformado por especies mayormente de porte arbustivo mezclado con algunas especies arbóreas de porte muy bajo o enanas (< 5 m), caracterizadas por sus hojas duras o coriáceas que le permiten contrarrestar las condiciones de periodos secos y de bajas temperaturas. Debido a su estructura entrelazada es difícil de penetrar, debido a la alta densidad de tallos que se entrelazan cerca de la base en un humus suelto y profundo. Expediciones botánicas como la expedición RAP (1994) que exploró la parte norte de la cordillera del Cóndor, reportan parte de la composición florística de estos matorrales, tales como: Ilex (familia Aquifoliaceae), Weinmannia (familia Cunoniaceae), Clusia (familia Clusiaceae) y Persea (familia Lauraceae), Drimys (familia Winteraceae), Schefflera (familia Araliaceae), Miconia (familia Melastomataceae) y Steospermatium robustum (familia Araceae). Este tipo de cobertura debido a su inaccesibilidad y a la poca información que se tiene, merece sea conservada para futuras investigaciones.  Matorral arbustivo altimontano Este tipo de cobertura se encuentra ubicada en algunos sectores de la porción superior del bosque de montaña altimontano, arriba de los 3500 m. s. n. m., es decir, en contacto con el pajonal andino. Es una cobertura conformada por comunidades de especies arbustivas, como por ejemplo: Miconia andina, Brachiotum sp., Lupinus sp., Berberis sp., Bacchartis sp., Monnina sp., Gynoxis sp., Hesperomeles sp., Bocconia sp., Robus sp., Vernonina sp., entre otras. Abarca un superficie de aproximadamente 26 227 ha, lo cual representa el 0,02 % del territorio nacional.  Matorral arbustivo Este tipo de cobertura vegetal se encuentra distribuido ampliamente en la región andina, desde aproximadamente 1500 hasta 3800 m. s. n. m. en la zona sur y centro del país, y desde 1000 hasta los 3000 m. s. n. m. en la zona norte del país, es decir, en ambos casos, hasta el límite de los pajonales naturales. Ocupa una superficie de 7 496 882 ha, que representa el 5, 83 % del total nacional. En el matorral arbustivo se distinguen tres subtipos de matorral, influenciado principalmente por las condiciones climáticas, los cuales se describen a continuación: El subtipo matorral del piso inferior, es influenciado por la condición de humedad del

suelo, es decir aridez y semiaridez, ubicado aproximadamente a partir de 1500 m. s. n. m., es decir, a continuación del cardonal. Aquí, las comunidades arbustivas pierden su follaje durante el período seco del año, mezcladas con suculentas y herbáceas de vida efímera. Las especies arbustivas más comunes de este piso son: Jatropha sp. (“huanarpo”), Cnidoscolus sp., Ortopterigium huasango (“huancoy”),

Carica candicans (“mito”), Heliotropium arborescens, Mutisia sp., Tecoma arequipensis, Fourcroya andina (“maguey”), Grindelia sp., Ambrosia artemisioides, Balbisia sp., etc. Se incluyen algunas suculentas de porte arborescente, como por ejemplo, Echinopsis pachanoi (“San Pedro”), Armatocereus sp.

En el subtipo matorral del piso medio y alto, es comprendido en los rangos altitudinales de aproximadamente 2500-3800 m. s. n. m., dominado por las condiciones subhúmedas. La vegetación está conformada por comunidades arbustivas tanto de carácter caducifolio como de carácter perennifolio, mostrando una mayor diversidad florística que el subtipo descrito anteriormente. Entre las especies más frecuentes se mencionan a las siguientes: Dodonea viscosa (“chamana”), Kageneckia lenceolata (“lloque”), Mutisia acuminata (“chinchilcuma”), Barnadesia dombeyana (“yauli”), Agave americana (“maguey azul”), Tecoma sambucifolia (“huaranhuay”), Ophryosporus peruvianus (“arenilla”), Ambrosia arborescens (“marco”), Grindelia sp., Heliotropium sp., Spartium junceum (”retama”), Senecio sp., Bidens sp., Aristeguietia sp., etc; entre las cactáceas más frecuentes se encuentran Opuntia subulata “anjokishka”, etc. Se incluyen en este piso algunas especies arbóreas de porte bajo y de manera dispersa, tales como: Acacia macracantha (“faique”), Schinus molle (“molle”) y Caesalpinea spinosa (“tara”).

En el nivel superior, comprendido en los rangos altitudinales de 2000-3500 en la zona central y valles interandinos, de 3500-3800 en la zona central occidental y de 3600 y 3800 en la zona sur, existen mejores condiciones de humedad y menores valores de temperatura las condiciones humedad propicia el desarrollo de una mayor diversidad de especies arbustivas, entre ellas se mencionan a las siguientes: Lupinus balianus (“chocho”), Baccharis tricuneata (“tayanco”), Parastrephya lepidopylla (“tola”), Diplostephyum sp., Dunalia espinosa, Hesperomeles sp. (“manzanita”), Brachiotun sp., Tibouchina sp., Aristeguietia sp., Senna biflora (“mutuy”), Bereberis lutea, Monnina sp., Solanun Mapa Nacional de Cobertura Vegetal - Memoria descriptiva 81 Figura n.° 48. Matorral arbustivo - zona húmeda El inventario de la vegetación realizado a la Reserva Paisajística de Nor Yauyos Cochas (MINAM, 2011), reporta las siguientes especies: En el denominado matorral semiárido se registró un total de 23 especies arbustivas, 2 especies de suculentas (familia Cactaceae) y 5 especies arbóreas. Las especies de mayor abundancia relativa en orden descendente son las siguientes: Boraginaceae sp.1, Jungia paniculata (familia Asteraceae), Euphorbiaceae sp.1, Viguiera sp. (familia Asteraceae), Opuntia subulata (familia Cactaceae), Dodonea viscosa (familia Sapindaceae), Chinopappus benthamin (familia Asteraceae) y Mutisia acuminata (familia Asteraceae). En el estrato inferior del matorral se desarrolla un tapiz herbáceo ralo de carácter estacional, dominado mayormente por gramíneas. En el matorral subhúmedo comprendido desde los 3000 hasta los 3600 m. s. n. m., se registró un total de 24 especies arbustivas, entre caducifolias y perennifolias, y 2 especies suculentas (familia Cactaceae). Las especies con mayor abundancia relativa las siguientes: Chinopappus benthamin (familia Asteraceae), Dodonea viscosa (familia Sapindaceae), Colletia spinosissima (familia Rhamnaceae), Mutisia acuminata (familia Asteraceae) y Senecio sp. (familia Asteraceae). Algunas de las especies registradas en este matorral son de porte arbóreo, como por ejemplo, Schinus molle (familia Anacardiaceae), Kageneckia lanceolata (familia Rosaceae).

PARAMO El páramo es un concepto europeo, aplicado a un bioma tropical. Como describe Reyes (1995), los parámetros de la civilización europea dieron nombre nuevo a las altas montañas ecuatoriales. No sólo fueron «bautizadas» con una voz celta acogida por el latín (Vareschi, 1970) y trasmitida a las lenguas romances donde páramo significa meseta desértica y árida batida por el viento; sino que su nueva definición, procurando conceptuar los biomas ecuatoriales de alta montaña, estuvo condicionada por las características de las montañas mediterráneas, principalmente los Alpes. Si bien el concepto general de páramo es claro (ecosistema de alta montaña del trópico húmedo, dominado por vegetación abierta y ubicado entre el límite del bosque cerrado y las nieves perpetuas), su definición exacta varía, lo cual dificulta saber exactamente lo que se considera páramo en algún lugar determinado. Rangel (2000) lo define como región natural por la relación entre el suelo, el clima, la biota y la influencia humana. Esto indica que existen varios procesos que interactúan y resultaría difícil poner un límite entre el páramo y sus ecosistemas vecinos más al norte, más al sur y más abajo en la montaña. Por esto, Reyes (1995) menciona que no se debe preocupar la síntesis definitoria de los paisajes y ecosistemas parameros, cuando se sabe que el reduccionismo y la simplificación se esconden detrás de las definiciones, las cuales se consideran desde siempre incompletas. Sin embargo, la definición más amplia y más práctica para aplicar en la mayoría de lugares que se consideran páramos es: un ecosistema húmedo tropical zonal, caracterizado por una vegetación dominada por vegetación herbácea y arbustiva, y ubicada predominantemente a partir del límite superior del bosque Se ubican por lo general, desde altitudes de aproximadamente 3400 m s. n. m. hasta los 4000 o 5000 m s. n. m. El más conocido es el páramo andino de Sudamérica, siendo el más extenso el páramo de Colombia.

Visualización de trópicos humedos con relacion ecosistemas llamados Páramos

En general, los páramos también presentan temperaturas muy bajas, alta radiación ultravioleta, vientos fuertes, baja presión y densidad atmosférica, alta humedad (Páramo Andino) o alta sequedad (Paramo de Ecuador) y rugosidad; así como lluvias constantes que lo convierte en el origen de riqueza hídrica de los ecosistemas debajo de ellos. Además con la presencia de animales propiamente adaptados y de plantas que puedan protegerse de altos niveles de radiación solar incidente y de las temperaturas congelantes.

Según la altura y temperatura en los páramos andinos se identifican los siguientes tipos: 1. EL SUBPÁRAMO Tiene una temperatura en promedio de 10ºC – de 2700 a 3500 msnm. Conocido como bajo páramo. Es considerado como una zona de transición entre el límite superior del bosque alto andino y el páramo propiamente dicho; por lo tanto, presenta mucha vegetación mezclada por ser zona transitoria. FLORA Presentan cerca de 112 comunidades vegetales, como resultado de una gran heterogeneidad de condiciones ambientales y fisiográficas, en muchos casos determinadas por factores locales de temperatura, humedad, suelos, precipitación y contacto con el bosque altoandino; entre ellas se destacan algunos árboles propios de los bosques enanos, densos matorrales compuestos principalmente por ericáceas, varios tipos de chuscales y algunos frailejones.

Bosques Enanos El rodamonte —pequeño árbol de tallos bajos y retorcidos—, forma parches de vegetación de bosques enanos en hábitats muy húmedos o en fondos de cañadas, cuando crece en contacto con el bosque alcanza alturas que superan los 8 m, mientras que su crecimiento en áreas abiertas de páramo es más limitado, — de 1 a 2 m— y su forma se torna aparasolada. Los bordes de los suelos permanentemente pantanosos son el hábitat propicio para los bosques enanos de romero de páramo, arbusto con copas en forma de globo de color verde oscuro, que crece en medio de los pajonales de cortaderas y juncos. Su utilización con fines medicinales y como leña, hacen de ésta, una especie en peligro de extinción.

Los Matorrales Se componen de plantas arbustivas de tallos de poca altura —de 1 a 5 m— muy ramificados desde la base, hojas reducidas y coriáceas y flores de colores intensos. En páramos con tendencia seca, los matorrales conforman una densa cobertura conocida como cinturón de ericáceas, pero en los páramos húmedos se encuentran dispersos. Entre las especies que los conforman se encuentran uvos de monte, agraces o uvas caimaronas y reventaderas, así como rosetas de helechos con tallos cortos; en los lugares bien drenados y expuestos al viento se entremezclan con comunidades del frailejón

Los Frailejonales Una de las formas de vida mejor adaptadas a las condiciones de la alta montaña tropical, es quizás el frailejón. En el subpáramo del Parque Nacional Natural Chingaza, a 3.100 msnm, se puede observar una reducida población endémica de frailejones no ramificados de Espeletia uribei, que alcanzan hasta 18 m de altura; sus tallos desprovistos de hojas están en contacto con las copas de los árboles del borde del bosque altoandino.

2. El PÁRAMO Tiene una temperatura en promedio de 5ºC – de 3500 a 4300 msnm. Es la más extensa y la mejor consolidada ecológicamente. En ella imperan condiciones extremas de temperatura y clima, el paisaje es aparentemente uniforme y tranquilo, en donde predominan los vientos fuertes. Entre los 3.000 y los 3.800 msnm existe un piso que se caracteriza por el modelado heredado de la glaciación pleistocénica. Este modelado glaciar, compuesto por cubetas de socavamiento ocupadas por lagunas,tuberas o pantanos, valles glaciares, morrenas laterales, frontales o de fondo y abundantes bloques y afloramientos rocosos arrastrados por los glaciares, se manifiesta en una topografía suave y ondulada que permite clasificarlo como el más estable y consolidado de los pisos del páramo. Los suelos tienen un cobertura densa, que impide la erosión hídrica superficial.

FLORA La principal característica del páramo, desde el punto de vista de la vegetación, con 146 comunidades vegetales, es el dominio del pajonal–frailejonal y de los pastizales. En la cordillera Oriental, la matriz principal del paisaje paramuno se compone de extensas áreas cubiertas de pajonales del género Calamagrostis y de otros pastos y plantas graminoides del género Festuca, en general asociados con más de 20 especies de frailejones; su máximo límite de distribución altitudinal se sitúa aproximadamente a los 4.700 msnm. Debido a procesos de dispersión, ocurridos durante miles de años, en la cordillera Central se destaca la presencia de extensos pajonales de Calamagrostis recta asociado con una especie de frailejón.Los frailejones Espeletia grandiflora tiene un amplio rango de distribución y abarca casi toda la franja; los frailejones Espeletia lutescens y Espeletia timotensis, en Venezuela, por estar especialmente adaptados a condiciones extremas de temperatura, prefieren las zonas sobre los 4.000 m de altitud. Entre otros elementos propios de la flora del páramo de la cordillera Oriental se destacan los chuscales de varios géneros, especialmente de Chusquea tesselata, normalmente entremezclados con los pajonales; en el macizo volcánico Ruiz–Tolima de la cordillera Central, hay una ausencia casi total de chusques. Los pastizales están compuestos por gramíneas de porte bajo, de hojas anchas y suaves que se encuentran en ambientes abiertos donde se entremezclan con otras especies de hierbas de reducido tamaño. Los Matorrales Debido a las limitadas condiciones ambientales de esta franja de páramo, los matorrales son escasos y están conformados por vegetación con hojas menudas, densas, superpuestas o con forma de aguja y con flores de colores brillantes, amarillas principalmente. La especie más difundida es el chite, que se encuentra en los páramos desde Venezuela hasta el Perú; en Colombia abundan diferentes comunidades con arbustal–pajonal.

Las Turberas En el páramo hay grandes extensiones de turberas con abundante flora, las cuales constituyen ambientes permanentemente saturados de agua; debido al aporte de materia orgánica producida por su propia vegetación y por el ingreso de sedimentos acarreados por la lluvia y los riachuelos, generan suelos turbosos y negros que sirven como filtro al retener la materia orgánica y liberar agua limpia. En su origen fueron pequeñas cubetas lacustres y actualmente se encuentran en proceso de sedimentación, con una tendencia natural a desaparecer, que en algunos casos se ha acelerado por la elaboración de drenajes para crear zonas de pastoreo. 3. LOS SUPERPÁRAMOS Tiene una temperatura en promedio de 2ºC – de 4300 a 5000 msnm. Es que la sigue a la anterior franja y llega hasta donde comienzan las nieves perpétuas. El superpáramo es el espacio más recientemente abandonado por el hielo; desde el Holoceno temprano —hace 10.000 años—, cuando los glaciares descendían hasta los 3.900 msnm aproximadamente, los espacios liberados por las nieves perpetuas se han ido integrando al superpáramo o piso periglaciar. En las depresiones dejadas por la excavación glaciar o entre los arcos modelados por las morrenas, se formaron pequeñas lagunas que lentamente fueron colonizadas por la biota acuática y terrestre.

FLORA Este hábitat, con 69 tipos de comunidades vegetales conocidas, tiene una escasa cobertura vegetal del suelo, que está ocupado principalmente por musgos y otras plantas criptógamas, entre las cuales llama particularmente la atención el liquen errante del género Tamnolia. Sin embargo, especies más características del superpáramo son las del género Senecio, que generalmente están cubiertas por una densa capa de pelos blancos muy finos; varias de sus especies de hojas blancas o grisáceas, como el Senecio niveoaureus en la cordillera Oriental y el Senecio latiflorus en la Central, son endémicas. En el superpáramo alto, la vegetación crece dispersa y aislada sobre un suelo incipiente de arenas y gravas de origen reciente, o entre las fisuras y oquedades de las rocas que acumulan la materia orgánica de musgos, líquenes y arenas derivadas de la erosión del sustrato rocoso. Son muy escasos los frailejones

y el pajonal es discontinuo sobre grandes superficies de suelo desnudo; en cambio los tapetes de mus gos y las plantas en cojín son abundantes.

Los Matorrales Están integrados por pequeños arbustos de la familia de las compuestas que no sobrepasan los 1,50 m de altura; se encuentran dispersos en los escarpes rocosos, formando fajas angostas. En las zonas más húmedas del superpáramo alto de la cordillera Central hay comunidades de Pentacalia gelida y de Loricaria colombiana. En el páramo de Sumapaz y en la Sierra Nevada del Cocuy, los matorrales de Loricaria complanata, acompañados de Jamesonia goudotii y Lachemilla nivalis, cubren los suelos bien drenados y arenosos Prados de Pastizal Azul Esta comunidad vegetal se encuentra más extendida en las dos vertientes del volcán Santa Isabel y en el de Santa Rosa, en la cordillera Central. Está constituida por una agrupación de gramíneas de porte medio y coloración azulosa, entre las que predominan Agrostis araucana y Festuca breviaristata. Poa y Agrostis dominan entre los pastos. Es notoria la ausencia de estos prados en la cordillera Oriental y en la Sierra Nevada de Santa Marta.

Vegetacion Pionera Este tipo de vegetación se especializa en colonizar los espacios que dejan los deshielos, es la que se desarrolla en la parte más alta del superpáramo, entre los arenales en proceso de estabilización y en los suelos incipientes poco evolucionados. Su aspecto es xeromórfico y su cobertura discontinua. Algunas de las especies que ocupan estos suelos en las cordilleras Central y Oriental son Valeriana plantaginea, Senecio canescens, Lachemilla nivalis, Hypochoeris sessiliflora,etc. Una de las características del paisaje de alta montaña es la presencia de numerosas lagunas dispuestas una tras otra en un mismo valle a causa del modelado de los glaciares, que en sus avances y retrocesos les dio forma. Se pueden citar, entre otras, la laguna de Chingaza, en la cordillera Oriental y la laguna del Otún en la Central. Estas lagunas presentan una vegetación característica con grandes juncos y plantas sumergidas en un medio de aguas oligotróficas. En otros casos, por su reducido tamaño y profundidad, presentan tapetes de musgos y plantas en forma de cojín; estos hábitats actúan como «filtros» al retener los sedimentos transportados desde su periferia y constituyen un nicho importante para la fauna paramuna.

FAUNA EN PÁRAMO La fauna del páramo en realidad, ha sido muy poco estudiada, posiblemente por el difícil acceso a estas regiones o porque los animales se mueven mucho de un lado a otro. Se estima que la mayoría de las especies, especialmente de aves y mamíferos, utilizan al páramo como un corredor o zona de transición, para realizar sus actividades en otras zonas de vida con temperaturas más adecuadas, como por ejemplo el bosque. Sin embargo, los animales del páramo también presentan rasgos sobresalientes dados sus adaptaciones fisiológicas para soportar las condiciones extremas de bajas temperaturas y radiación. Entre los animales se pueden localizar palomas, osos, venados, patos, anfibios, reptiles, roedores o aves. Que presentan un pelaje abundante para poder vivir ante las situaciones climatológicas frías durante el invierno.

IMPORTANCIA DEL ECOSISTEMA PARAMO 1. Biomas y paisajes únicos en el mundo. 2. Estrellas hidrográficas con infinita red hídrica que origina los ríos más caudalosos del mundo. 3. Abundancia de endemismos (60% flora vascular). 4. Alta biodiversidad por intensos procesos de especiación e inmigración. 5. Orobiomas reguladores y generadores del recurso hídrico. 6. Compleja estructura eco sistémico, considerada estratégica como fuentes de agua, biodiversidad y servicios ambientales.

CAMBIO CLIMATICO AFECTA AL ECOSISTEMA PÁRAMO El acelerado cambio del clima, causado por el efecto de un rápido aumento de gases de efecto invernadero originarios del uso de combustibles fósiles, deforestación y agricultura, es una realidad innegable y sus efectos son percibidos por grandes grupos de la sociedad. Sin embargo, las evidencias del cambio del clima en los Andes son muy variables: si bien el aumento de temperatura es absolutamente evidente y se encuentra presente en todo el mundo, datos sobre la conducta de los diferentes aspectos de la temperatura son mucho más escasos y no son uniformes. La información existente sobre las características del cambio climático en cuanto a precipitación es mucho menos uniforme que la referente a la temperatura. Hay algunas tendencias comprobadas a nivel local pero éstas son tan diversas (en ciertas áreas hay más lluvia y en otras hay menos) que no agregan a una tendencia clara a nivel de los Andes. En este aspecto, tampoco han ayudado los modelos matemáticos para simular posibles efectos de cambio climático. Se considera que la humanidad ya ha terminado con el 50% de los humedales que existían en los páramos y un 35% de las especies de agua dulce. Todo esto hace necesario que nos implicamos todos para cuidar lo poco que nos queda de estos santuarios de vida, hemos de empezar a cambiar nuestras costumbres para evitar esa degradación continua que están sufriendo los ecosistemas de paramos. Por otro lado, la ganadería y la agricultura intensiva están afectando extensiones considerables donde la mano del hombre parece que no tiene límites, sin considerar que los necesitamos para abastecernos de agua dulce.