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Autopsia de una iglesia muerta Copyright © 2014 por Thom S. Rainer Todos los derechos reservados Impreso en los Estados Unidos de América. 978-1-4336-8392-3 Publicado por B&H Publishing Group Nashville, Tennessee Clasificación decimal de Dewey: 262 Título de la asignatura: IGLESIA \ RENOVACIÓN DE LA IGLESIA \ LIDERAZGO Todas las citas de las Escrituras están tomadas de la Biblia Holman Christian Standard (HCSB) Copyright © 1999, 2000, 2002, 2003, 2009 por Holman Bible Publishers. Utilizado con permiso. Tabla de contenido Expresiones de gratitud Parte 1: La autopsia Capítulo 1 Introducción Capítulo 2 Erosión lenta Capítulo 3 El pasado es el héroe Capítulo 4 La iglesia se negó a parecerse a la comunidad Capítulo 5 El presupuesto se movió hacia adentro Capítulo 6 La gran comisión se convierte en la gran omisión Capítulo 7 La iglesia conducida por la preferencia Capítulo 8 Disminuye la tenencia pastoral Capítulo 9 La Iglesia Raramente Juntos Capítulo 10 La Iglesia no tenía un propósito claro Capítulo 11 La iglesia obsesionada por las instalaciones Parte 2: ¿Hay esperanza para la iglesia moribunda? Doce respuestas Capítulo 12 Mi iglesia tiene síntomas de enfermedad: cuatro respuestas Capítulo 13 Mi iglesia está muy enferma: cuatro respuestas Capítulo 14 Mi iglesia se está muriendo: cuatro respuestas A Mis nietos Canon rainer Maggie rainer

Nathaniel Rainer Will Rainer Harper Rainer Bren Rainer Joshua rainer Con muchos más seguramente a seguir. Y siempre a Nellie jo "Jo Jo" a nuestros nietos Expresiones de gratitud Nunca esperé escribir un libro sobre la muerte, si el tema sería la muerte de los seres humanos o la muerte de las iglesias. Soy optimista y optimista por naturaleza. La muerte y la muerte, francamente, son temas que preferiría evitar. Pero luego escribí una publicación llamada "Autopsia de una iglesia fallecida" en mi blog en www.ThomRainer.com. Me sorprendió la respuesta. Se convirtió y sigue siendo mi post más visto. Incluso meses después, la gente sigue leyendo ese artículo a diario. Sabía que había golpeado un acorde. Primero expreso mi agradecimiento a la comunidad de lectores en mi blog. Conozco a algunos de ustedes por su nombre, pero con millones de espectadores al año, no los conozco a todos. Gracias, cada uno de ustedes, por tomarse el tiempo de leer lo que escribo. Todavía me sorprende que alguien quiera leer mis obras. Le debo mucho aprecio al equipo de B&H, uno de los equipos más capaces y excelentes en publicación hoy. Desearía poder nombrar a cada uno de ustedes individualmente. Gracias Jennifer Lyell y Devin Maddox. Ustedes son excelentes editores, líderes dinámicos y alentadores persistentes. Y gracias a los dos principales líderes de B&H: Selma Wilson y Cossy Pachares. Has tomado un gigante dormido y lo has convertido en una fuerza poderosa en la publicación cristiana. No hay palabras adecuadas para agradecer al "Equipo Rainer" en la oficina del presidente. Me encanta tener jugadores "A" en mi equipo. Tengo la suerte de tener tres jugadores "A +": Amy Jordan, Amy Thompson y Jonathan Howe. Son los cerebros y los corazones detrás de mis redes sociales, mi vida organizativa y todo lo que escribo. Gracias equipo Si me conoces, sabes que amo a mi familia. Amo a mi esposa, Nellie Jo. Amo a mis hijos, Sam, Art y Jess. Amo a mis nueras, Erin, Sarah y Rachel. Y amo a mis siete nietos cuyos nombres están a la vanguardia en la página

de dedicación. Espero que haya más nietos en camino cuando se publique este libro. Sin presión. Aunque estoy sorprendido de que alguno de sus lectores realmente lea mis publicaciones, se lo agradezco. Y aunque no sé qué expectativas, esperanzas o cargas traes a la lectura de este libro, ruego que Dios lo use grandemente para ti y tus congregaciones. En última instancia, mi mayor gratitud va a mi Señor. Este libro es sobre su iglesia. Él se preocupa por su iglesia. Él ama a su iglesia. Rezo para que mis simples palabras se utilicen de alguna manera para ayudar a Sus iglesias en Su poder y fortaleza. Y si este tomo se usa de tal manera, sé dónde irá el crédito y a quién pertenece la gloria. PARTE 1 La autopsia CAPÍTULO 1 Introducción Conocí a la paciente antes de que ella muriera. Fue hace diez años. Estaba muy enferma en ese momento, pero no quería admitirlo. Solo había un destello de esperanza en el mejor de los casos. Pero esa esperanza podría convertirse en una realidad solo con un cambio radical. Ella no estaba casi lista para ese cambio. De hecho, ella era muy resistente a cualquier cambio. Aunque estaba muy enferma. A pesar de que ella se estaba muriendo. Le dije bruscamente las malas noticias: te estás muriendo. Espero haber dicho esas palabras con algo de compasión. Me sentí mal compartiendo la noticia. Pero era la única manera que podía ver para llamar su atención. Incluso le dije que, en el mejor de los casos, tenía cinco años de vida. En el momento en que dije esas palabras, realmente no creo que fuera tan optimista. No me habría sorprendido si ella muriera en el transcurso del año. Pero ella no solo estaba en negación; ella estaba en negación enojado "Te lo mostraré", dijo ella. "Voy a demostrar que estás equivocado. No me estoy muriendo ". Sus palabras fueron feroces. Desafiante. Enojado. Ya era hora de que me fuera. Hice todo lo que pude.

Me fui No estaba enojado. Yo estaba triste. Muy triste. Ahora, para su crédito, ella tenía razón hasta cierto punto. Ella no murió en cinco años. Ella demostró ser resistente y sobrevivió otros diez años. Pero su última década, aunque estaba técnicamente viva, estaba llena de dolor, enfermedad y desesperación. No estoy tan seguro de que su supervivencia a largo plazo fuera algo bueno. Ella nunca mejoró. Ella se deterioró lenta y dolorosamente. Y entonces ella murió. La autopsia Ella, por supuesto, es una iglesia. Una verdadera iglesia. Una iglesia en el medio oeste. Una iglesia que probablemente nació fuera de visión. Una iglesia que murió porque ella ya no tuvo una visión. Fui el consultor de la iglesia hace más de una década. La iglesia había alcanzado su pico de asistencia muchos años antes. La asistencia al culto de 750 en 1975 tuvo lugar durante "los viejos tiempos". Hablaremos sobre esos días en breve. Cuando llegué, la asistencia había caído a un promedio de ochenta y tres. El gran santuario parecía tragarse a la pequeña multitud el domingo por la mañana. La realidad era que la mayoría de los miembros no me querían allí. No estaban dispuestos a pagarle a un consultor para que les dijera lo que se negaban a escuchar. Solo cuando un miembro benévolo se ofreció a pagar mi factura completa, la congregación accedió a regañadientes a retenerme. Trabajé con la iglesia por tres semanas. Los problemas eran obvios. Las soluciones fueron difíciles. En mi último día, el benefactor me acompañó a mi coche de alquiler. "¿Qué piensas, Thom?", Preguntó. Podía ver la incertidumbre en mi expresión, por lo que aclaró. “¿Cuánto tiempo puede sobrevivir nuestra iglesia?” Ese fue el momento en que di mi declaración de cinco años como máximo. Por supuesto, me equivoqué en el número exacto de años. La iglesia sólo ha cerrado recientemente. Como muchas iglesias moribundas, se mantuvo

tenazmente en la vida. La iglesia duró diez años después de mi declaración de un diagnóstico terminal. Mi amigo de esa iglesia me llamó una semana después de que la iglesia cerrara oficialmente sus puertas. Hablamos por más de una hora. No tuve el placer de descubrir que mi diagnóstico era correcto. Juntos, mi amigo y yo revisamos los últimos diez años o más. Pudimos armar una autopsia bastante precisa. Aprendimos con más claridad por qué murió la iglesia. Realizamos una autopsia. No fue divertido, pero pensamos que era necesario. ¿Por qué pasar por el dolor? Mi hermana murió antes de que yo naciera. Hace poco me enteré de que mi padre convenció al médico tratante para que realizara una autopsia y que él lo convenció para que lo dejara estar en la sala mientras se realizaba la autopsia. Mi padre afligido tenía que saber por qué murió su amada Amy. Tenía que saber por qué su pequeño corazón había fallado. Él tenía que saberlo. Solo tenía que saberlo. ¿Por qué debería llevarte a través del dolor de descubrir por qué mueren las iglesias? Porque necesitamos saberlo. Se realizan autopsias en humanos para descubrir por qué murieron. Los descubrimientos pueden darles a los familiares sobrevivientes la información que necesitan para evitar el mismo camino que su ser querido. A veces, un patólogo forense realiza una autopsia para descubrir cómo se cometió un asesinato o cómo ocurrió un accidente. La información siempre es útil. A veces lleva a la gente a la justicia. Pero eso no significa que las autopsias sean agradables. Planeo llevarte a través de los resultados de catorce autopsias de la iglesia. No te aburriré con un informe iglesia por iglesia porque hay mucha redundancia. En su lugar, resumiré mis hallazgos de todas las iglesias fallecidas. Les debo mucha gratitud a quienes hablaron conmigo de manera libre y abierta, a quienes realizaron las autopsias conmigo. Cada uno de ellos era miembro de una iglesia que una vez estuvo viva, pero ahora está muerta. Cada uno de ellos pasó por el dolor de una autopsia conmigo.

Las iglesias son diversas en sus antecedentes denominacionales o no denominacionales. Son diversos en sus ubicaciones. Son diversos en sus características demográficas locales y regionales. Pero todos son similares de una manera significativa: siguieron caminos que causaron su muerte. Jesús le dijo a Pedro que la Iglesia nunca morirá: "Y también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré Mi iglesia, y las fuerzas del Hades no la vencerán" (Mateo 16:18). De hecho, la Iglesia nunca morirá. Pero las iglesias tienen y están muriendo. Es mi oración que estas autopsias, aunque dolorosas de ver, resulten útiles para los líderes y laicos de las iglesias de hoy. Tanto como 100,0001 iglesias en América están mostrando signos de declive hacia la muerte. Que Dios nos dé el coraje para hacer los cambios necesarios para dar nueva vida a nuestras iglesias. El compromiso de oración En cada capítulo, se te hará una pregunta simple: "¿Harás un compromiso de oración?" El compromiso es realmente entre tú y Dios. Tal vez Dios levantará un ejército de miembros de la iglesia que ya no están satisfechos con los negocios como de costumbre. El trauma de observar una autopsia solo es beneficioso si se recibe como una advertencia a los vivos. Este libro no se trata de detenerse en el pasado, sino de dar frutos en el futuro. El compromiso de oración en cada capítulo es un desafío positivo para tomar la colina, por así decirlo, donde otros pueden haber fallado. Los compromisos son vitales en este libro. Porque si prestamos atención a las advertencias de la autopsia, podemos beneficiarnos mucho más de lo que podríamos imaginar. Compromiso de oración 1 Dios, abre mis ojos para que pueda ver mi iglesia como Tú la ves. Déjame ver dónde debe producirse el cambio, incluso si es doloroso para mí. Y utilíceme, oro, para ser un instrumento de ese cambio, cueste lo que cueste. Preguntas para mayor reflexión 1. Si a su iglesia le hicieron un "examen físico" hoy, ¿cuál cree que sería el diagnóstico del médico: sano, un poco enfermo, muy enfermo o moribundo? ¿Por qué?

2. ¿Por qué muchos miembros de la iglesia en las iglesias moribundas se niegan a ver el deterioro de la salud de la iglesia? 3. Explique cómo las iglesias pueden morir en el contexto de Mateo 16:18, que dice que el Hades no prevalecerá. Nota 1. Este número se basa en la investigación fundamental de mi libro Breakout Churches. CAPITULO 2 Erosion lenta No había estado en casa en años. Mi madre murió en 1997, y fue la última miembro sobreviviente de nuestra familia en vivir en nuestra ciudad natal. Como no tenía familia inmediata allí, realmente no tenía razón para regresar. Pero volví más de una década después. Me quedé estupefacto. El nivel de deterioro superó mi peor imaginación. Desde mi perspectiva, mi pequeña ciudad natal se parecía más a un pueblo fantasma. Varios negocios en la calle principal estaban cerrados y vacantes. Se podía ver el tenue contorno de pintura en el vidrio que una vez dijo el nombre de la tienda. Caminé tienda por tienda. Mis recuerdos de la infancia cobraron vida. Ahora para estar seguros, la ciudad nunca fue un bullicio de actividad. En los años sesenta y setenta, la mayoría de la gente decía que la ciudad era "pintoresca". Era algo parecido a Mayberry, para todos ustedes, fanáticos de Andy Griffith. Parecía ser un buen lugar para crecer, aunque las comodidades eran pocas. Miré en los escaparates de las tiendas cerradas. El polvo y más polvo eran todo lo que podía ver en el suelo y en los estantes de exhibición vacíos. Cada tienda trajo un recuerdo vívido. Cada paso me llevó de vuelta a otro momento, un mejor momento para esta ciudad. Pero el estado general de la ciudad era triste, muy triste. Sabía que el lugar no era lo que era en mi infancia, pero era mucho peor de lo que esperaba. Decidí ir a uno de los dos lugares de comida rápida de mi infancia. También estaba cerrado. Parecía que no había sido ocupado en una década. Más tarde ese día, hablé con un conocido que había vivido allí toda su vida. Estaba en sus sesenta y tantos. Tiendo a ser sencillo en mis conversaciones,

así que le pregunté sin rodeos qué le había pasado a nuestra ciudad natal. Su mirada perpleja y simple pregunta lo dijo todo: "¿Qué quieres decir?" No notó el deterioro. No vio el pueblo fantasma que yo vi. Su perspectiva era día a día. No ves muchos cambios en un día. No ves la acumulación de polvo en horas. Para él, seguía siendo en gran parte la misma ciudad de medio siglo antes. Para él, no había cambiado mucho. La lenta erosión de las iglesias Es raro que un miembro de la iglesia a largo plazo vea la erosión en su iglesia. El crecimiento puede llegar rápidamente, pero el declive suele ser lento, imperceptiblemente lento. Esta lenta erosión es el peor tipo de declive para las iglesias, porque los miembros no tienen ningún sentido de urgencia para cambiar. Ven a la iglesia regularmente; no ven la disminución gradual que se está produciendo ante sus ojos. A menudo, la disminución se produce en las instalaciones físicas, pero es mucho más que eso. El declive se produce en los vibrantes ministerios que una vez existieron. El declive está en la vida de oración de los miembros que permanecen. El declive está en el foco exterior de la iglesia. El declive está en la conexión con la comunidad. El declive está en las esperanzas y sueños de quienes permanecen. La decadencia está en todas partes en la iglesia, pero muchos no la ven. Retroceder en el tiempo Retrocede en el tiempo conmigo al 520 a. Lo sé, eso es hace mucho tiempo. Pero la historia sigue siendo relevante. Se cuenta en el libro del Antiguo Testamento de Hageo. Un remanente de judíos regresó a Jerusalén después de un largo exilio. Regresaron a una ciudad devastada, pero comenzaron a reconstruirse. Su primer objetivo fue construir el templo, la casa de Dios. Comenzaron por poner los cimientos. Pero dejaron de trabajar en el templo y comenzaron a trabajar en sus propios hogares para su propia comodidad. Durante una década no trabajaron en la casa de Dios. Imagina el templo. Imagina la casa de Dios. Ver la suciedad que se acumula en los cimientos. Ver las vides y el crecimiento excesivo comenzando a cubrirlo. Ver el descenso. Entonces Dios habla. Quiere saber por qué los judíos no notaron la decadencia. Dios quiere saber por qué dejaron de construir el templo.

“El SEÑOR de los Ejércitos dice esto: Esta gente dice: El tiempo no ha llegado para que la casa del SEÑOR sea reconstruida. . . . ¿Es tiempo de que ustedes mismos vivan en sus casas con paneles, mientras que esta casa se encuentra en ruinas? ”(Hag. 1: 2–4) Dios estaba enojado. Su casa debe ser construida. No puede estar en ruinas. "‘. . . Cuando trajiste la cosecha a tu casa, la arruiné. ¿Por qué? "Esta es la declaración del SEÑOR de los Ejércitos:" Porque mi casa todavía está en ruinas, mientras cada uno de ustedes está ocupado con su propia casa "." (Hag. 1: 9) Guau. Hace más de 2,500 años, el pueblo de Dios había descuidado la construcción de la casa de Dios. Parece que la lenta erosión también fue un problema para ellos. A Dios no le gustó entonces. Él todavía no lo hace. Compromiso de oración 2 Dios, por favor, déjame ser parte de la solución y no del problema. Muéstrame lo que necesito ver. Abre mis ojos a tu realidad. Y dame el coraje para avanzar en las direcciones que deseas. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿Cómo era tu iglesia hace veinte años en comparación con la de hoy? Hable con otros para obtener una evaluación honesta. ¿Ves signos de erosión gradual? 2. ¿Cómo es el abandono de la construcción del templo descrito en Hageo 1 como una erosión gradual hoy en día? 3. ¿Qué crees que quiso decir Dios en Hageo 1: 9 con la frase "mientras cada uno de ustedes está ocupado con su propia casa"? CAPÍTULO 3 El pasado es el héroe Antes de comenzar a ver los resultados de la autopsia, tenga en cuenta esta perspectiva. Hubo varios puntos en los que estas iglesias podrían haber revertido el declive que estaban experimentando. Pero los miembros restantes en la iglesia se negaron a ver la realidad. Estaban cegados a la lenta erosión que se estaba produciendo.

La mayoría de las iglesias en Estados Unidos que cierran no cierran las puertas en uno o pocos eventos cataclísmicos. En la mayoría de los casos, de hecho, todos los que estudié, el problema era la lenta erosión. No habría una autopsia que realizar si se hubieran enfrentado a la realidad y, en el poder de Dios, se hubiera invertido. Pero no lo hicieron. Y por esa razón, debemos mirarlos después de su muerte. La autopsia: el hilo conductor El hilo más generalizado y común de nuestras autopsias fue que las iglesias fallecidas vivieron durante mucho tiempo con el pasado como héroe. Se mantuvieron más apretados con cada año progresivo. A menudo se aferraban a las cosas del pasado con desesperación y miedo. Y cuando cualquier fuerza interna o externa trató de cambiar el pasado, respondieron con enojo y resolución: "Moriremos antes de cambiar". Y lo hicieron. Escúchame claramente: estas iglesias no se aferraban a las verdades bíblicas. No se aferraban a la moral cristiana clara. No luchaban por las doctrinas primarias, o las doctrinas secundarias, o incluso las doctrinas terciarias. De hecho, no estaban luchando por doctrinas en absoluto. Estaban luchando por el pasado. Los buenos viejos tiempos. La forma en la que solía ser. La forma en que lo queremos hoy. Por supuesto, hubo algunos profetas y disidentes en estas iglesias. Advirtieron a otros que, si la iglesia no cambiaba, moriría. Pero los incondicionales no escucharon. Se resistieron ferozmente. Los disidentes se fueron. Y la muerte se acercaba más y más. Todo el mundo ama a un héroe "Héroe" suele ser una buena palabra. Habla de un hombre o una mujer que ha hecho algo notable, algo valiente, algo que vale la pena mencionar. Hombres y mujeres que luchan por nuestro país son héroes. Arriesgan sus vidas por nuestra libertad y seguridad. Los socorristas, como la policía, los bomberos y otro personal de emergencia son héroes. Mantienen a nuestras comunidades seguras. Nos protegen Lo hacen a menudo a riesgo de su bienestar o incluso de sus vidas. Me encanta leer Hebreos 11. La mayoría de los editores de la Biblia han insertado el subtítulo "Héroes de la fe" para este capítulo. Está Abel quien le ofreció a Dios un mejor sacrificio. Enoch quien fue quitado antes de la

muerte. Noah que construyó un arca. Abraham, que fue a donde Dios dijo, aunque no sabía dónde estaba. Sarah que concibió a una vejez imposible. Isaac que bendijo a una generación futura. José que recordaba el éxodo de los israelitas. Moisés que salió de Egipto por una tierra prometida. Y Rahab. Gideon. Barak. Sansón. Jefté David Samuel. Los profetas. Según el escritor de Hebreos, todos estos hombres y mujeres eran héroes de la fe porque obedecían a Dios aunque no conocían las consecuencias de esa obediencia. Se vieron a sí mismos como extranjeros de esta tierra y esta vida, residentes temporales de la tierra (v. 13). Sacrificaron su comodidad, sus hogares, sus formas de vida y sus posesiones porque sabían que esta vida era solo temporal, que les esperaba una vida mejor y eterna. Los "buenos viejos tiempos" no existían en sus mentes. El futuro celebró los mejores días. Ellos entendieron que esta vida no es un momento para sentirse cómodo. Cuando el pasado es héroe Hoy recibí un correo electrónico de alguien que estaba realmente enojado. Supongo que estaba enojado conmigo, pero no estoy seguro de por qué. Describió las iglesias estadounidenses como eran en los años 70 y 80, quizás antes. Estaba loco por los estilos musicales. Estaba loco por la arquitectura de la iglesia. Estaba loco por los altavoces de audio y las pantallas grandes. Estaba enojado con el atuendo de iglesia "apropiado". Sí, estaba realmente enojado. Debería haber escrito a alguien que no sea yo. Pregúntale a mis hijos. No soy ni cool ni contemporáneo. Para él, el pasado era su héroe. Se aferraba, aferrándose a las cosas de este mundo. Y debido a que se estaba escapando, estaba enojado, herido y probablemente temeroso. No me malinterpretes Hay mucho que reverenciar y recordar sobre el pasado. Estoy agradecido por los que vinieron antes que yo. Estoy agradecido por los eventos y las personas del pasado que dieron forma a mi vida. Recuerdo a mis padres cuya influencia nunca disminuirá a pesar de sus muertes. Recuerdo a un entrenador de fútbol de secundaria que compartió el evangelio conmigo. Recuerdo a un amigo que fue a Vietnam, pero no regresó. Murió por nuestra nación, incluyéndome a mí.

Recuerdo la iglesia donde me bauticé en Anniston, Alabama. Parece que todo lo que tuvo lugar en esa iglesia es parte de mis "viejos tiempos". Sí, respetamos el pasado. A veces veneramos el pasado. Pero no podemos vivir en el pasado. Señales de héroes pasados ¿Conoces el nombre de Harry Truman? Déjame ser más claro. ¿Conoces el nombre de Harry Randall Truman? No, él no era un ex presidente. Era propietario de una vivienda al pie del monte St. Helens en el estado de Washington. En 1980, la montaña volcánica mostraba signos de una gran erupción. De hecho, un experto declaró que la posibilidad de una gran erupción era prácticamente del 100%. La casa de Truman estaba ubicada en el extremo sur del lago Spirit, al pie de la montaña. Vivía en el camino más probable del flujo volcánico. Se enfrentaba a una muerte casi segura. Los funcionarios gubernamentales le imploraron que se fuera. Los amigos le dijeron que su incapacidad para moverse era equivalente a suicidarse. Los miembros de la familia le rogaron que se fuera para que no muriera. El 18 de mayo de 1980 tuvo lugar la masiva erupción. La lava fluía justo en el camino proyectado de la casa de Truman. El 18 de mayo de 1980, Harry Randall Truman murió. Simplemente no podía abandonar su hogar, incluso si eso significaba una muerte segura. Entonces, ¿a qué se aferraron las iglesias fallecidas? ¿Qué se negaron a dejar de enfrentar una muerte segura? Los estilos de adoración estaban ciertamente en la lista. Como se arreglaron órdenes de servicios de adoración. Y los tiempos de los servicios de adoración. Algunos se mantuvieron obstinadamente en edificios y habitaciones, especialmente si esa habitación o edificio era un monumento conmemorativo, llamado así por uno de los miembros del pasado. Algunos no aceptarían ningún nuevo pastor, excepto aquel que sirvió hace treinta años. Pero más que cualquier otro elemento, estas iglesias moribundas se enfocaron en sus propias necesidades en lugar de otras. Miraron hacia adentro en lugar de hacia afuera. Sus prioridades más altas fueron la forma en que siempre lo han hecho, y la que los hizo sentir más cómodos.

No era solo el pasado lo que veneraban. Fueron sus buenos viejos tiempos personales. Entonces, a diferencia de los héroes de Hebreos 11 que no se aferraron a nada de esta vida, estas iglesias moribundas se aferraron a todo, al menos todo lo que los hizo sentir cómodos y felices. Tal es la razón por la que hablamos de ellos en el pasado. Fueron advertidos. Se enfrentaban a una muerte segura. Vieron todas las señales. Pero al igual que Harry Randall Truman, preferían la muerte al cambio. Y la muerte es lo que tienen. Compromiso de oración 3 Dios, dame la convicción y el coraje de ser como los héroes de Hebreos 11. Enséñame a no aferrarme a esas cosas en mi iglesia que son mis preferencias y estilos personales. Muéstrame no solo cómo dejar ir, sino dónde soltar, para que pueda escuchar tus órdenes más de cerca. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿Hay áreas en tu iglesia donde te resistes al cambio simplemente por tus propias preferencias? 2. ¿Cuál es el tema común entre los héroes de Hebreos 11? 3. Mire Hebreos 11: 13–16 y analícelo a la luz de las iglesias que mueren aferrándose al pasado. CAPÍTULO 4 La iglesia se negó a parecerse a la comunidad Nuestra autopsia reveló esta condición en varias de las catorce iglesias. Mira las caras de los miembros antes de que la iglesia muriera oficialmente. Ahora mire los rostros de la mayoría de las personas que viven en la comunidad donde se encuentra la iglesia. Son significativamente diferentes. Aquí está el escenario típico que escuché. En los "buenos tiempos", la iglesia estaba en auge a medida que los residentes de la comunidad acudían en masa a la iglesia. La iglesia era parte de la comunidad y reflejaba a la comunidad.

Entonces la comunidad comenzó a cambiar. En algunos casos el cambio fue étnico o racial. En otros casos estuvo relacionado con la edad. Y a veces fue simplemente el cambio socioeconómico. Pero el cambio fue real y los miembros de la iglesia lo sintieron. La respuesta a la comunidad cambiante era a menudo sutil. Una familia en la iglesia decidiría "subir" a otra sección de la ciudad. Otros seguirían. La migración de personas dentro y fuera de la iglesia a menudo fue lenta y casi imperceptible. Pero fue muy real. Durante dos o tres décadas la iglesia se mantuvo firme. Si bien no estaba llegando a los nuevos residentes de la comunidad, los miembros tampoco se marchaban en masa. Estaban dispuestos a ingresar a la comunidad donde una vez vivían porque, después de todo, era su iglesia. Pero sus hijos, y especialmente sus nietos, no respondieron en consecuencia. Algunas de estas generaciones más jóvenes abandonaron completamente la ciudad. Otros se quedaron en las áreas, pero encontraron iglesias donde estaban sus hogares. No vieron el punto de conducir a una comunidad en transición que no tenía identidad con la iglesia. Así comenzó la iglesia su marcha de la muerte. Familia por familia la iglesia declinó. Por supuesto, la membresía de la iglesia creció. Los que una vez vivieron en la comunidad representaban al más antiguo de los miembros, y ninguna familia más joven los reemplazó. Por supuesto, habría un intento ocasional pero débil de llegar a la comunidad. Esencialmente, en esas raras ocasiones en que intentaron comunicarse, los miembros de la iglesia pidieron a los residentes de la comunidad que acudieran a ellos, a la iglesia. Casi nunca hubo ningún esfuerzo para entrar en la comunidad. Y nadie, en ningún momento, mencionó la posibilidad de una voluntad de entregar el liderazgo de la iglesia a los residentes de la comunidad. Lo que a un forastero puede parecerle de sentido común fue una traición para los miembros de la iglesia. Después de todo, era su iglesia. Los miembros de la comunidad nunca habían dado un centavo a la congregación. ¿Por qué alguna vez considerarían dejar que esos forasteros se apoderen de la iglesia? La iglesia se convierte en una fortaleza ¿Qué imágenes te vienen a la mente cuando escuchas la palabra “fortaleza”? ¿Un castillo medieval? ¿Fort Knox? Enormes edificios con

puertas y cerraduras y fosos? ¿Algo que es casi imposible para que entre el mundo exterior? Cualquiera de esas imágenes de palabras funcionará. La clave es mantener a las personas y las posesiones en el interior a salvo, y mantener a las personas del otro lado fuera. Si hablas con miembros de una iglesia moribunda, la mayoría negará que su iglesia sea una fortaleza. Pero en nuestra autopsia, encontramos que eso es exactamente lo que estaba ocurriendo. La gente de la comunidad no se sentía bienvenida en la iglesia. Aquellos en la iglesia estaban más preocupados por proteger la forma en que hacían la iglesia que por llegar a los residentes de la comunidad. Usted ve, estas iglesias realmente eran fortalezas. La sola idea de hacer cambios significativos para alcanzar e impactar a la comunidad es aterradora. Sugerir que los miembros de la iglesia comienzan a hacer la transición del liderazgo a los residentes de la comunidad parece absurdo. Es nuestra fortaleza, dicen. Los forasteros no son bienvenidos. Lucharemos para mantener a la iglesia tal como es hasta que muramos. Y ese día no está muy lejos. Otros Primero = Vida. Yo Primero = Muerte. Cuando una iglesia deja de tener un corazón y un ministerio para su comunidad, está en el camino hacia la muerte. Cada vez que se menciona a las iglesias locales en el Nuevo Testamento, siempre se les exhorta a centrarse en el otro. Pablo le dijo a la iglesia en Filipos que cuidara de los intereses de los demás, incluso cuando consideraba sus propios intereses: llena mi alegría pensando de la misma manera, teniendo el mismo amor, compartiendo los mismos sentimientos, enfocándome en un objetivo. No hagan nada por rivalidad o engreimiento, pero en humildad consideren a los demás como más importantes que ustedes mismos. Todos deben mirar hacia fuera, no solo por sus propios intereses, sino también por los intereses de los demás ”(Fil. 2: 1–4). ¿Lo entendiste? Iglesias vibrantes y vivas cuidan los intereses de los demás. Están preocupados por sus comunidades. Abren la puerta a los demás. Pero las iglesias moribundas se preocupan por la autoconservación. Están preocupados por una cierta manera de hacer la iglesia. Todos se tratan de uno mismo. Sus puertas están cerradas a la comunidad. Y aún más

tristemente, la mayoría de los miembros de la iglesia moribunda no admitirían que están cerrados a aquellos a quienes Dios los ha llamado para que alcancen y minen. Nuestra autopsia reveló que, en algún momento de su historia, la iglesia dejó de llegar a la comunidad y cuidarla. ¿Cómo podríamos decir? La iglesia no se parecía ni reflejaba la comunidad en la que estaba ubicada. O si lo hizo, dejó de ministrar a quienes los rodeaban. Dios llamó a la iglesia a mirar hacia afuera. Nuestra autopsia reveló que la iglesia se había vuelto egocéntrica y gratificante. Compromiso de oración 4 Dios, dame a mi iglesia ya mí un corazón para nuestra comunidad. Déjame ver a la gente a través de tus ojos. Y dame el coraje y la sabiduría para dejar ir a esta iglesia, para que los que mejor reflejan esta comunidad puedan guiarnos y enseñarnos. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿Intenta su iglesia alcanzar y ministrar a su comunidad, incluso hasta el punto de renunciar a la autoridad para llegar mejor a la gente? Explique su "sí" o "no". 2. ¿Cuándo actúa una iglesia como una fortaleza? 3. ¿Cómo se relaciona la exhortación de Pablo a la iglesia de Filipos con las iglesias de hoy que afectan a sus comunidades? CAPÍTULO 5 El presupuesto se movió hacia adentro Cuando conduces la autopsia de una iglesia, debes seguir el dinero. Porque a donde va el dinero de la iglesia, así va su corazón. De hecho, se puede ver en los presupuestos de las iglesias fallecidas durante varios años que comienzan a surgir patrones predecibles. Y, como probablemente pueda imaginar, los miembros de las iglesias moribundas no tienen idea de que se está llevando a cabo lentamente una marcha de la muerte financiera. Cuando Wellington R. Burt murió en 1919, era conocido como una de las personas más ricas de América. Había amasado una fortuna como barón

de la madera. De hecho, fue incluido en el número ocho entre las personas más ricas de Estados Unidos. También tenía poder político. Se había desempeñado como alcalde de Saginaw, Michigan, y como senador estatal de Michigan. Y él era codicioso. Muy codicioso. Su voluntad fue un reflejo casi perfecto de su codicia. Afirmó que nadie podría recibir un dólar de su patrimonio hasta veintiún años después de la muerte del último nieto sobreviviente. En otras palabras, no quería que la familia que conocía obtuviera nada de su dinero. Muchos lo intentaron, pero los tribunales sostuvieron la legitimidad de su codicia y su vida. En 2011, finalmente se hicieron distribuciones a una docena de parientes que Burt nunca conoció, noventa y dos años después de su muerte. Los restos físicos de Burt están en un mausoleo de quince pies de altura en Saginaw. Está fortificado como si intentara controlar su muerte de manera férrea, al igual que las formas cerradas de su vida. Iglesias también Nunca conocí a un miembro de una iglesia moribunda que pensaba que su iglesia era codiciosa. Ciertamente nunca conocí a alguien que pensara que su codicia se comparaba con reclusos tan miserables como Wellington Burt. Y ni siquiera estoy seguro de si la codicia es el mejor descriptor de estas iglesias. Quizás es mejor decir que sus fondos están enfocados hacia adentro. Por ejemplo, en muchas de las iglesias fallecidas, la porción de personal del presupuesto aumentó constantemente a lo largo de los años. No era que las iglesias estuvieran pagando más a su personal; más bien, la porción de personal del presupuesto aumentó proporcionalmente al total decreciente cada año. Las iglesias tenían menos para gastar, pero los costos de personal eran a menudo los últimos en recortarse. ¿Por qué? Porque los miembros de la iglesia vieron al personal como sus cuidadores personales. Los que pagaban por la iglesia debían pasar la mayor parte del tiempo, si no todo, visitando a los miembros, aconsejando a los miembros, asistiendo a funciones con los miembros, etc. No me malinterpreten, en las iglesias vibrantes el personal a menudo satisface las necesidades de los miembros. Eso es parte de su llamado dado

por Dios. Pero en las iglesias moribundas, se espera que el personal esté casi exclusivamente al servicio de los miembros de la iglesia. Eso significa que los miembros del personal no están llegando a otros más allá de la iglesia. Eso significa que no están involucrados en la comunidad en un sentido de encarnación. Eso significa que en su mayoría son manos contratadas para los miembros de la iglesia. Es por esa razón que el presupuesto para el personal es a menudo el último en irse. Asimismo, los costos de construcción e instalaciones se reducen solo como último recurso. Veremos este tema más detalladamente en el capítulo 11. Solo tenga en cuenta esta verdad: en las iglesias moribundas, los últimos gastos que deben reducirse son aquellos que hacen que los miembros se sientan más cómodos. ¿Dónde están los cortes hechos? Es fascinante ver veinte presupuestos anuales consecutivos de iglesias que cerraron. En las pocas iglesias donde pudimos obtener presupuestos, teníamos una idea más clara de por qué las iglesias finalmente murieron. Sigue el dinero. Mira las partidas en el presupuesto. Vea donde se hicieron los cortes. Nuestra autopsia reveló, en la mayoría de los casos, se hicieron recortes a los ministerios y programas con enfoque externo. Entonces, un ministerio particular a la comunidad ya no es esencial. Los fondos para llegar más allá de la iglesia ya no están disponibles. La decisión se justifica por la disminución de los recibos. Lo suficientemente justo. Pero note que los ministerios comunitarios y de extensión son los primeros en irse. No esos ministerios para los miembros de la iglesia. No al principio de todos modos. El joven rico y las iglesias fallecidas Has leído el texto muchas veces. Lo has oído predicar y enseñar. Un hombre rico se acerca a Jesús y le pregunta qué debe hacer para heredar la vida eterna. Jesús comienza con algunos de los Diez Mandamientos. Luego, en Marcos 10: 21–22, se produce este intercambio: “Luego, mirándolo, Jesús lo amó y le dijo: 'Te falta una cosa: ve, vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres, y Tendré tesoro en el cielo. Entonces ven, sígueme. "Pero él quedó aturdido por esta demanda, y se fue afligido, porque tenía muchas posesiones".

¿Lo entendiste? El hombre no pudo soltarse. No estaba simplemente triste ante la perspectiva de dejar ir. El texto decía que le dolía la idea de renunciar a sus posesiones. Nos aferramos a las cosas porque queremos nuestro modo de vida. Nuestro confort. Nuestras posesiones. Eso es lo que le sucede a las iglesias que mueren. Gastan por su forma de hacer iglesia. Su comodidad. Sus posesiones. Sigue el dinero. Aprenderás mucho sobre una iglesia. Por cierto, no todas las iglesias fallecidas murieron destrozadas. De hecho, algunos de ellos tenían un cofre del tesoro cuando murieron. Algunos habían heredado fondos. Otros habían acumulado fondos. No tienes que estar en quiebra para morir. No es una cuestión de cuánto tienes. Es lo que haces con tu dinero, o cuál es tu actitud con respecto al dinero. Algunas iglesias se aferran a los fondos porque el dinero mismo se convierte en el foco. Ya no preguntan cómo la iglesia puede hacer una diferencia para el Reino con el dinero. Se acumulan porque temen no tener suficiente dinero. Al igual que el joven rico, se afligen ante la idea de hacer algo con el dinero para alguien más allá de ellos mismos. Temen que no tendrán suficiente dinero si lo tienen. Así que mueren con "suficiente" dinero. La autopsia fue clara y reveladora En todas las iglesias autopsiadas, un patrón financiero desarrollado con el tiempo. El patrón era uno donde los fondos se usaban más para mantener la maquinaria de la iglesia en movimiento y para mantener felices a los miembros, que para financiar la Gran Comisión y el Gran Mandamiento. El dinero, sin embargo, fue sintomático de un problema cardíaco. La iglesia se preocupó más por sus propias necesidades que la comunidad y el mundo. Y ninguna iglesia puede sostener tal enfoque interno indefinidamente. Eventualmente morirá de insuficiencia cardíaca. Compromiso de oración 5 Señor, ayúdame a comprender que todo el dinero que creo que tengo es realmente tuyo. Ayúdame a comprender que todo el dinero que tiene

nuestra iglesia no es el de la iglesia, sino el tuyo. Danos corazones sanos para usar estos fondos de acuerdo con tu propósito. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿En qué se diferenciaría el presupuesto y el uso de los fondos de una iglesia saludable del de una iglesia moribunda? 2. ¿Cómo nos informa la historia del joven rico en Marcos 10 sobre cómo una iglesia puede ver el dinero que tiene? 3. ¿Cuáles son algunas maneras en que las iglesias pueden mover su uso de fondos desde un enfoque predominantemente interno a un enfoque externo? CAPÍTULO 6 La gran comision Se convierte en la gran omisión Cuando el pasado es un héroe, como señalamos en el capítulo 3, se desarrollan ciertos síntomas. Estos síntomas pueden convertirse en enfermedades, enfermedades que conducen a la muerte. Algunas iglesias comienzan con un gran corazón y un gran esfuerzo hacia la Gran Comisión. Pero los métodos utilizados se convierten en el foco más que en la Gran Comisión. Como consecuencia, la Gran Comisión se convierte en la Gran Omisión. Vivo en Nashville, Tennessee. Es un lugar increíble para vivir. De hecho, es el mejor lugar en el que he vivido. Hubo un tiempo en el que tenía planes de jubilación en otra parte, pero nunca me veo saliendo. Si Dios quiere, cuando llegue a la edad de jubilación, continuaré viviendo en este lugar que realmente se ha convertido en mi hogar. Hay mucho en esta ciudad, pero el talento musical es casi increíble. Nashville es el epicentro de la música cristiana y country. Uno de mis cantantes de country favoritos es Alan Jackson. Tiene innumerables éxitos, pero uno de mis favoritos es "Remember When". La canción está escrita desde la perspectiva de un hombre mayor a su esposa, ya que cuenta todas las veces que han vivido juntos, tanto buenas como malas. Es una canción dulce que termina con estas letras: “Recuerden cuando dijimos cuando nos pusimos grises, cuando los niños crecen y se

alejan. No estaremos tristes, nos alegraremos por toda la vida que hemos tenido. Y recordaremos cuándo. " La nostalgia puede ser buena. Puede ser divertido y saludable. Ciertamente necesitamos "recordar cuándo". Pero, como señalé anteriormente, no podemos vivir en el pasado y no podemos recrear el pasado. Hacemos "recordar cuándo", pero seguimos adelante. Nuestra autopsia reveló mucha nostalgia sobre el crecimiento de la iglesia. Hubo un montón de "recordar cuándo" sobre años particulares de números crecientes y días de alta asistencia. Sin embargo, los miembros de iglesias muertas o moribundas a menudo pasan por alto la razón detrás de esos años de crecimiento y expansión. Las iglesias prósperas tienen la Gran Comisión como la pieza central de su visión, mientras que las iglesias moribundas han olvidado el claro mandamiento de Cristo. Gran comisión amnesia Hay una serie de pasajes del Nuevo Testamento donde Jesús envía a sus seguidores. El texto que se usa más a menudo para referirse a la Gran Comisión es Mateo 28: 19–20: “Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. , enseñándoles a observar todo lo que te he mandado. Y recuerda, estoy contigo siempre, hasta el final de la era ". El imperativo en esos versículos es "ir". Pero a medida que avanzamos, hay varios subcomandos. Debemos hacer discípulos. Tenemos que bautizar. Nosotros debemos enseñar. Esas son muchas palabras de acción. Pero la iglesia fallecida, en algún lugar de su historia, se olvidó de actuar sobre la Gran Comisión. Así que dejaron de ir. Y haciendo discípulos. Y bautizándolos. Y enseñándoles. Quizás estoy siendo demasiado gentil para decir que la iglesia fallecida "se olvidó" de actuar sobre la Gran Comisión. Quizás es más exacto decir que la iglesia "decidió" no actuar por mandato de Cristo. Usted ve, la Gran Comisión requiere al menos dos puntos de obediencia de los miembros de la iglesia. Deben irse, y deben depender totalmente del poder de Cristo. Por eso Jesús les recordó: "Yo estoy contigo siempre". Cristo estaba listo y dispuesto a trabajar a través de ellos. De hecho, Jesús lo ordenó. Pero la iglesia fallecida, en su pasado, dejó de ir. Y se detuvo dependiendo de Cristo.

¿Por qué? "Ir" en el poder de Cristo requiere esfuerzo. Ciertamente, los resultados dependen de Él, pero la obediencia es un trabajo. Y la obediencia en su poder significa que estamos orando a Jesús para que podamos alcanzar a otros. Eso requiere un "otro" enfoque. Eso requiere que miremos más allá de nosotros mismos. Eso nos obliga a sentirnos incómodos. Eso nos obliga a ir. Al observar la muerte de catorce iglesias, vi un patrón común. La obediencia a la Gran Comisión se desvaneció; por lo general se desvaneció gradualmente. No es como si un día la iglesia enviara a docenas de miembros a la comunidad y de repente se detuviera. En cambio, el declive en el enfoque externo fue gradual, casi imperceptiblemente gradual. Era como la lenta erosión que se describe en el capítulo 2. Los esfuerzos de obediencia a la Gran Comisión se desvanecieron gradualmente, de modo que nadie se dio cuenta. O si alguien se dio cuenta, él o ella fue ignorado en gran medida. Los miembros más vocales solían abandonar la iglesia. Los miembros cómodos se quedaron atrás para el reloj de la muerte. Así que tal vez la "Gran Comisión de la amnesia" es realmente muy amable. Quizás esa descripción implica que los miembros no tuvieron la culpa, que ya no tenían la capacidad de recordar o saber lo que se suponía que debían hacer. Tal vez sería más veraz decir que estas iglesias moribundas tenían la "Gran desobediencia de la Comisión". Decidieron no recordar qué hacer. Eligieron su propio consuelo para alcanzar a otros con el evangelio. Es por eso que los resultados de la autopsia concluyeron que la Gran Comisión se convirtió en la gran omisión. La conveniente omisión de las palabras de acción Relacionada con la gran omisión está la naturaleza de las conversaciones entre los miembros de la iglesia de las iglesias moribundas. Estos miembros, como hemos señalado anteriormente, a menudo se fijan en los viejos tiempos. Y esos días en sus memorias incluyen algunos resultados espectaculares: • Un día de alta asistencia que a menudo marcó el pico de la iglesia. • Docenas de nuevos miembros cada año. • Ministerios vibrantes en la comunidad.

• Reconocimiento por su crecimiento por la denominación o algún organismo similar. Como los miembros de la iglesia moribunda recordaron esos días, a menudo décadas antes, anhelaban resultados similares hoy. A menudo se preguntaban por qué no podían replicar esos viejos tiempos. Y no era raro que culparan a otros por su difícil situación. Usted ve, estos miembros tenían una omisión conveniente en sus recuerdos. Querían los mismos resultados que antaño, pero no estaban dispuestos a gastar los esfuerzos. ¿Recuerdas las palabras de acción de Mateo 28? Id, haced discípulos, bautizad y enseñad. Los miembros de la iglesia moribunda no estaban dispuestos a ir a la comunidad para alcanzar y ministrar a las personas. No estaban dispuestos a invitar a sus amigos y familiares que no estaban en la iglesia. No estaban dispuestos a gastar los fondos necesarios para una difusión vibrante. Solo querían que sucediera. Sin oración Sin sacrificio Sin trabajo duro. Pero aquí está el problema más grande. Incluso si la iglesia comenzara a crecer por sí sola, los miembros de la iglesia moribunda solo aceptarían el crecimiento si los nuevos miembros fueran como ellos y si la iglesia continuara "haciendo la iglesia" de la forma que ellos querían. Esa realidad, cuando todo está dicho y hecho, es probable que esté en el centro del problema. Los miembros de las iglesias moribundas realmente no querían el crecimiento a menos que ese crecimiento cumpliera con sus preferencias y les permitiera permanecer cómodos. Pero el tema de las preferencias es su propia categoría por las razones por las que mueren las iglesias. Veremos ese problema en el siguiente capítulo de la autopsia. Compromiso de oración 6 Señor, recuérdame que debo ser una Gran Comisión cristiana en una iglesia de la Gran Comisión. Recuérdame que, en Tu fortaleza, debo hacer lo que sea necesario para llegar a mi comunidad con el poder transformador del Evangelio. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿Por qué la mayoría de las iglesias moribundas tienen miembros que sienten nostalgia por los "buenos viejos tiempos"? ¿Cuáles son las implicaciones bíblicas de esa mentalidad?

2. Observa y describe las diferentes partes de Mateo 28: 19–20. ¿Es tu iglesia más obediente o desobediente a esos mandamientos bíblicos? 3. ¿Cuál es la relación entre la promesa de Jesús de estar siempre con nosotros en Mateo 28:20 y una mentalidad que se centra en el propio consuelo? CAPÍTULO 7 La iglesia conducida por la preferencia Decir que la habitación estaba tensa sería una subestimación masiva. Pasaron ocho años antes de la muerte de la iglesia, pero pocos en esa sala habrían predicho la desaparición de la iglesia. La iglesia se había recuperado un poco durante el año pasado. Dado que la mayoría de los miembros no permitirían ningún elemento contemporáneo en el servicio muy serio y tradicional a las 11:00 a.m., algunos adultos jóvenes comenzaron su propio servicio contemporáneo a las 8:30. Clases de estudio de la Biblia encajan entre los dos servicios. Por supuesto, el servicio de las 8:30 no era realmente tan contemporáneo según los estándares modernos. Una guitarra acústica. Algunas canciones contemporáneas junto con los himnos más tradicionales. Un teclado en lugar del órgano. Pero fue realmente más mezclado que cualquier otra cosa. El nuevo servicio proporcionó el primer crecimiento en la iglesia en dos décadas. La asistencia del año anterior había bajado de setenta y cinco a sesenta y dos. Pero el nuevo servicio agregó treinta personas en promedio de asistencia, por lo que la iglesia estaba en un máximo de cinco años de noventa y dos en asistencia a la adoración. Cuando los adultos más jóvenes invitaron a sus amigos al primer servicio, siguieron escuchando el mismo estribillo: "Nos gusta el servicio, pero sería mejor para nosotros y nuestros hijos si el servicio fuera más tarde". La solución parecía simple. Trasladar el servicio tradicional a las 8:30 y el servicio contemporáneo a las 11:00. Incorrecto. El cambio requirió un voto de la iglesia. Al menos eso es lo que dijeron algunos de los miembros. Nadie pudo encontrar ninguna confirmación. Así que era hora de la reunión. Era hora de la sesión de negocios de Hades. Había alrededor de 150 personas presentes. Eso incluía a miembros que no habían ido a la iglesia en cinco años o más. Eso incluía personas que la

mayoría de las demás no sabían. Era obvio lo que estaba ocurriendo. Los miembros habían reclutado a otros para que asistieran a la reunión para votar y no para cambiar. El intercambio de palabras fue duro. Se hicieron acusaciones. Las guitarras fueron declaradas "del diablo". Un miembro declaró que dejaría morir a la iglesia antes de que se hiciera el cambio. Se saldría con la suya ocho años después. La votación no fue cerrada. Nada ha cambiado. Bueno, eso no es exactamente cierto. El primer servicio cesó cinco semanas después. La asistencia se redujo a cuarenta y tres al final del año. Y menos de ocho años después, la iglesia cerró sus puertas. Yo mismo y yo Cada una de las catorce iglesias autopsiadas tuvo algún nivel de este problema antes de morir. Un número significativo de miembros movió el enfoque de otros a ellos mismos. Y cuando una iglesia se mueve en esa dirección, se dirige al declive y luego a la muerte. La disminución puede ser prolongada, y la muerte puede ser retrasada. Pero es inevitable. La iglesia morirá. Una iglesia no puede sobrevivir a largo plazo cuando los miembros se centran en sus propias preferencias: • Mi estilo musical. • Mi duración deseada y el orden de los servicios de adoración. • Mi color y diseño deseado de edificios y habitaciones. • Mis actividades y programas. • Mi necesidad de ministros y personal. • Mi mi mi. La Biblia contiene pasajes aparentemente ilimitados sobre la actitud cristiana que todos los cristianos deberían tener siempre. Una de las mejores descripciones de esta actitud fue escrita por el apóstol Pablo en Filipenses 2: 5–11. Tenga en cuenta que este pasaje no es solo una descripción de la obediencia de Cristo; Es un ejemplo que debemos seguir. Tenemos que ser sirvientes. Debemos ser obedientes. Tenemos que poner a los demás primero. Debemos hacer lo que sea necesario para buscar lo mejor para los demás y para nuestra iglesia. Pablo lo expresa de manera poderosa y convincente: “Haz tu propia actitud la de Cristo Jesús”. Entonces, ¿qué hizo Jesús?

• Él "no consideró que la igualdad con Dios fuera algo que se usara para su propio beneficio". • "Se vació a sí mismo al asumir la forma de un esclavo". • "Se humilló a sí mismo". • Se hizo "obediente hasta el punto de la muerte, incluso hasta la muerte en una cruz". No había muchas indicaciones en las iglesias autopsiadas de que la mayoría de los miembros tuvieran una actitud tan abnegada. En cambio, la actitud era egoísta, se entregaba a sí misma y se autocomplacía. Era sobre mí, yo mismo y yo. La muerte era así inevitable. El alma de una iglesia saludable es una que se parece más a la mente de Cristo en las actitudes de los miembros. Lamentablemente, las iglesias moribundas rara vez tenían miembros que estaban tan centrados en el otro. La historia de Love Dare En 2008, un pequeño libro discreto tomó al mundo por asalto. The Love Dare era un libro basado en la película Fireproof, sobre un esposo luchador que intenta salvar su matrimonio agonizante. Su padre le da un pequeño libro escrito a mano que es un desafío de cuarenta días para convertirse en un mejor marido. Nadie predijo que el libro basado en la película se convertiría en un movimiento. Millones y millones de copias se han vendido. Más importante aún, millones de matrimonios se han salvado y fortalecido. La premisa del libro es simple. Todos los días, durante cuarenta días, un esposo o esposa debe hacer algo desinteresadamente por su cónyuge. El libro es un recordatorio poderoso y bíblico de que, en la relación matrimonial, cada parte debe tratar de cuidar los intereses de su cónyuge. Es un libro sobre el desinterés. Otro centrado. Así es como debemos entrar en relación con otros en la iglesia. La membresía en la iglesia no es miembro del club de campo. No se trata de pagar sus cuotas y obtener beneficios. Es como Pablo describió en 1 Corintios 12: 12–31. Somos miembros del cuerpo de Cristo. No existimos para servirnos a nosotros mismos; en cambio, existimos para el mayor bien del cuerpo. Los miembros de las iglesias moribundas no entendieron eso. Para la mayoría de los miembros, su afiliación con la iglesia se centró en sus

deseos y necesidades. Y, a medida que la iglesia se acercaba a la muerte, la intensidad de sus argumentos y demandas por sus preferencias creció. Una iglesia por definición es un cuerpo de creyentes que funciona para el mayor bien de la congregación. En esencia, cuando los miembros de la iglesia exigen cada vez más sus propias preferencias, la iglesia no se está convirtiendo en la iglesia. Por lo tanto, no es sorprendente ni inesperado, al menos desde el punto de vista de un observador, cuando la iglesia cierra sus puertas. La iglesia realmente murió antes de eso porque sus miembros se negaron a ser la iglesia. Compromiso de oración 7 Señor, abre mis ojos a las necesidades de los demás. Muéstrame cómo vivir más como Tu Hijo, que siempre pone en primer lugar los intereses de los demás. Y sobre todo muéstrame esa actitud mientras sirvo en mi iglesia. Preguntas para mayor reflexión 1. ¿Cuáles son algunas áreas comunes desafortunadamente donde los miembros de la iglesia insisten o exigen sus propias preferencias? ¿Por qué crees que eso sucede? 2. Lee 1 Corintios 12: 12–27 y relaciona el pasaje con cómo debemos tener las actitudes y acciones correctas en nuestra iglesia. 3. Lee Filipenses 2: 5–11 y compara la actitud de Cristo con la actitud de un miembro de iglesia egoísta y con derecho. CAPÍTULO 8 Disminuye la tenencia pastoral Me siento honrado y humilde de escuchar de los pastores. Aunque ninguno es perfecto, veo a los pastores como algunos de los más sacrificados y que dan a las personas que conozco. Es evidente que los pastores y su liderazgo son vitales para las iglesias. El problema es que muchos buenos líderes están abandonando las iglesias antes de que alcancen sus primeros años de liderazgo en una iglesia. Ese fue ciertamente el caso en las iglesias que autopsiamos.

En diez de las catorce iglesias fallecidas, el patrón de tenencia pastoral se hizo común. Nos dirigiremos a las otras cuatro iglesias en este capítulo también. Para la mayoría de las iglesias, los pastores iban y venían a un ritmo de dos a tres años, especialmente en las dos décadas que llevaron a la muerte de las iglesias. El ciclo era predecible. La iglesia estaba declinando. La iglesia llamaría a un nuevo pastor con la esperanza de que el pastor pudiera llevar a la iglesia a la salud. El pastor viene a la iglesia y guía algunos cambios. A los miembros no les gustan los cambios y se resisten. El pastor se desanima y se va. En algunos casos, el pastor fue despedido. Repetir ciclo. Una historia esperando que suceda Las historias que escucho sobre iglesias y pastores a veces son alentadoras y otras son desalentadoras. Temo que la siguiente correspondencia sea la indicación de una situación no tan esperanzadora. El pastor comenzó su correo electrónico a mí: He sido pastor de mi iglesia durante dieciocho meses. La asistencia ha disminuido de 97 a 76 en ese tiempo. Cada pastor antes de mí estuvo aquí menos de tres años, al menos los últimos diez pastores. La única excepción fue un pastor a fines de la década de 1990 que duró casi cinco años. Él continuó: Supongo que fui como el resto de ellos. Pensé que sería diferente. Pensé que mi ministerio no seguiría el mismo patrón que los otros. Parece que estoy equivocado. El comité de búsqueda de pastores me dijo que estaban listos para el liderazgo y el cambio; Estaban listos para moverse en otra dirección. Bueno, comencé a sugerir algunos pequeños cambios después de que llegué aquí, ¡y todo se me escapó! Le pregunté a uno de los miembros del comité de búsqueda por qué se resistían tanto al cambio, especialmente porque parecían decir lo contrario. Se encogió de hombros y dijo que no quería decir ese tipo de cambio, sea lo que sea lo que significaba. El correo electrónico del pastor concluyó con poca esperanza: Fui ingenuo al pensar que podía cambiar algo que los otros pastores no podían. Supongo que me iré de la iglesia pronto también. Para mí, es a la vez frustrante y financiera. La iglesia se ha reducido hasta el punto de que no pueden pagar mi salario. Han reducido mi paga una vez. No hay manera

de que puedan apoyar a un pastor de tiempo completo. Simplemente no veo a la iglesia haciéndolo mucho más largo. De hecho, la iglesia puede mantener sus puertas abiertas varios años más, pero también parece estar en la espiral de la muerte. Todas las señales apuntan de esa manera, particularmente la rotación constante de los pastores y la paga decreciente del pastor actual. Las etapas de la vida de la tenencia pastoral Durante más de dos décadas he estudiado, contemplado y escrito sobre la permanencia de un pastor. ¿Por qué la tenencia pastoral es relativamente breve en promedio? ¿Esa tenencia contiene etapas comunes y distintas? ¿Hay un punto en particular en la tenencia cuando más pastores dejan la iglesia? Cuanto más estudio el fenómeno de la tenencia pastoral, más estoy convencido de que hay etapas distintas con características claras. Ciertamente entiendo que hay un número de excepciones a mis delimitaciones. También soy plenamente consciente de que los años que designo para cada etapa no son precisos. Sin embargo, tengo cierto nivel de confianza en mis conclusiones. Y cada etapa tiene una relación con el tema de las iglesias moribundas. • Año 1: Luna de miel. Tanto el pastor como la iglesia tienen una pizarra en blanco y entran en la relación esperando y creyendo lo mejor el uno del otro. Quizás el pastor estaba cansado de un pastorado anterior, y tal vez la iglesia estaba feliz de reemplazar a su antiguo pastor. Durante una temporada, ninguno de los dos puede hacer mal ante los ojos del otro. Esa temporada no suele durar mucho. • Años 2 y 3: Conflictos y Desafíos. Ningún pastor es perfecto. Ninguna iglesia es perfecta. Cada parte descubre las imperfecciones después de unos meses. Como una pareja de recién casados, comenzaron a tener sus diferencias después de un tiempo. La salud espiritual tanto del pastor como de la iglesia probablemente determinará la gravedad de los conflictos y desafíos. • Años 4 y 5: Encrucijada, Parte 1. Este período es uno de los más críticos en la relación. Si el conflicto fue severo, el pastor probablemente se irá o será expulsado. De hecho, estos años, cuatro y cinco, son los años más comunes cuando un pastor deja una iglesia. Por otro lado, si el pastor y la iglesia manejan bien su relación, a menudo pueden esperar algunos de los mejores años por venir.

• Años 6 a 10: Fruta y Cosecha. Mi investigación no está completa, pero es más que anecdótica. Es probable que una iglesia experimente algunos de sus mejores años, por casi cualquier métrica, durante este período de tenencia de un pastor. De hecho, en mis entrevistas con pastores y miembros, he escuchado este tema repetido. Ambas partes han trabajado a través de los tiempos difíciles. Ahora confían el uno en el otro y se aman más profundamente. • Años 11 y más allá: Cruce de caminos, Parte 2. Durante la primera era de cruce de caminos, el pastor decide quedarse o irse. O las congregaciones pueden tomar la decisión. Durante este período relativamente raro de más de diez años, el pastor seguirá uno de los dos caminos. Un camino es revitalizarse como líder y estar listo para enfrentar nuevos desafíos y lanzar nuevas visiones. O el pastor se resistirá al cambio, y luego se volverá complaciente. He visto ambos extremos, pero todavía estoy luchando por entender por qué los pastores van por un camino en lugar de otro. La mayoría de los pastores en las iglesias moribundas tienen una duración más corta. Nuestras autopsias revelaron esa triste tendencia en diez de las catorce iglesias. De hecho, la mayoría se fue en la segunda etapa de la tenencia pastoral, los conflictos y los desafíos. Cuando estos pastores iniciaron o incluso sugirieron un cambio, hubo una feroz resistencia. Realmente no vieron mucha esperanza basada en los patrones y la historia de la iglesia, así que se fueron. Y el ciclo se repitió hasta que, finalmente, la iglesia cerró sus puertas. Las excepciones Cuatro de las iglesias fallecidas tenían pastorados a largo plazo cerca o al final de sus vidas. Eran claramente una excepción a los patrones de las otras iglesias. ¿Por qué? El pastor tomó la decisión de adoptar la actitud de los miembros recalcitrantes. No hubo ningún intento de conducir hacia el cambio. No hubo ningún intento de tener un enfoque hacia afuera. No hubo ningún intento de ser más como la comunidad en la que se encontraba la iglesia. Estos pastores tomaron los caminos de menor resistencia. Probablemente sabían que la iglesia se dirigía hacia la desaparición, o al menos hacia un grave declive.

En el patrón de etapas de la vida, llegan a "Encrucijada, Parte 2", la etapa de once años y más allá. Pero, para estos pastores, el declive y la muerte de la iglesia era preferible al conflicto. Se convirtieron en cuidadores de miembros solamente. Se pusieron del lado de los miembros en cualquier indicio de cambio. Tres de los cuatro pastores llegaron a la edad de jubilación cuando las iglesias cerraron las puertas. El otro pastor pudo obtener una posición de personal en otra iglesia. Pero en todos los casos, las iglesias murieron. Compromiso de oración 8 Dios, por favor, dale a nuestro pastor un corazón y una visión para alcanzar y ministrar a las personas más allá de nuestros propios muros. Enséñame a ser el tipo de miembro de la iglesia que alienta y apoya a nuestro pastor, para que el desaliento y la desilusión no conduzcan a la partida. Preguntas para mayor reflexión 1. Describe el ciclo típico de tenencia pastoral en una iglesia moribunda. ¿Por qué se desarrolla este patrón? ¿Cómo puede revertirse? 2. Observe las etapas de la vida de la tenencia pastoral e identifique cuál de las dos etapas es más común en una iglesia moribunda. ¿Por qué la tenencia pastoral es incluso importante en cualquier iglesia? 3. Pablo le dijo a Timoteo que cumpliera su ministerio “haciendo la obra de un evangelista” (2 Tim. 4: 5). ¿Qué desafíos tendría un pastor de una iglesia moribunda para cumplir este mandato? CAPÍTULO 9 La iglesia raramente rezaba junta El hombre sentado frente a mí no estaba disfrutando el momento. Estábamos hablando de una iglesia que amaba. De hecho, el pequeño grupo de dos hombres y tres mujeres parecía incómodo. Estábamos hablando de una iglesia que murió cuatro años antes. Mike fue el primero en responder. Todavía se refería a ella como "su" iglesia. Él todavía estaba teniendo problemas para dejar ir. Todavía estaba de duelo. Lo último que necesita una persona afligida es ser parte de una autopsia. Pero accedió a hacerlo con la esperanza de que el proceso podría ayudar a

otras iglesias en el futuro. Le dije que esa era la esperanza y el propósito de este libro. Así que él respondió a mis preguntas. Añadió insights. Hablaba lentamente, metódicamente, como una persona que todavía estaba afligida. Porque el era. La pregunta Le hice la pregunta que le hice a todos los sobrevivientes de las iglesias fallecidas. ¿Los miembros de la iglesia oraron juntos? Inevitablemente se detuvieron. No estaban seguros de cómo responder a la pregunta. Verás, la mayoría de las iglesias, casi hasta el día en que cerraron las puertas, tuvieron algún tipo de tiempo de oración. Puede haber sido parte de los servicios de adoración. Puede haber sido con algún tipo de compañerismo como una comida de miércoles por la noche. Claro, oramos juntos. La respuesta vino en unanimidad pero no con mucho entusiasmo. Así que probé más. Describa sus tiempos de oración, solicité. Ahí es donde vendría la revelación. Ahí es donde descubrimos juntos la pregunta detrás de la pregunta. Cuando empezaron a describir sus tiempos de oración juntos, comenzaron a comprender más claramente. Escuchemos una de esas conversaciones, una que fue representativa de la mayoría de las respuestas. La respuesta Dorothy habló a continuación. "Oh, sí", dijo ella. “Oramos juntos como una iglesia. Tuvimos una comida de miércoles por la noche y tiempo de oración. Cuando éramos más grandes, pudimos pagar cocineros para preparar nuestras comidas. Pero como perdimos miembros, tuvimos que ir a la comida. Eso fue una pena, porque nunca se supo lo que traerían las otras personas. Recuerdo una noche cuando teníamos doce verduras y un postre. Sin carne. Sin pan. Eso fue una pena ". Se había salido del tema, así que la guié de vuelta. "Cuéntame sobre el tiempo de oración en la noche del miércoles", le pregunté. "Bueno", comenzó algo pensativa, "Carl pasaría una lista de oración a todos nosotros". La interrumpí porque no conocía a Carl. Ella continuó:

"Carl era un diácono y él tenía una fotocopiadora en su oficina. Solíamos tener un tipo de secretaria de la iglesia y copiarlos, pero tuvimos que dejarla ir porque no podíamos costearla. Carl simplemente se recuperó allí. Sabes, fue un día triste cuando ya no teníamos una secretaria a tiempo completo. Eso fue una pena ". Una vez más, le pido que vuelva al tema de la oración. "Eso es todo", dijo ella. “Carl pasaría la lista de oración, y una persona tendría la bendición y oraría por aquellos en la lista. Entonces comeríamos. Por supuesto, una vez no teníamos carne ni pan. Eso fue una pena ". Cuando los ojos abiertos Fue en ese momento que hice las preguntas: ¿Realmente crees que fue un momento significativo de oración? ¿Crees que así es como oraron las iglesias del Nuevo Testamento? Inevitablemente habría una pausa y luego una admisión. No, dijeron ellos. Era más como una rutina o ritual. Difícilmente se calificaría como oración corporativa en el sentido del Nuevo Testamento. Y luego se reflejarían. Sus ojos se abrirían. Recordarían aquellos días en que los miembros de la iglesia se reunían para momentos de oración poderosos. Algunos recordaron las oraciones de oración de veinticuatro horas que tenían las iglesias. Esos "buenos viejos tiempos" de oración típicamente coincidían con los mejores días de las iglesias, al menos hasta el punto de su recuerdo. No por casualidad, la oración y la salud de la iglesia iban de la mano. Cuando la iglesia se dedica a una oración significativa, se convierte tanto en la causa como en el resultado de una mayor salud de la iglesia. Un ejemplo del Nuevo Testamento Fue la primera iglesia, la iglesia de Jerusalén. Muchos se hicieron cristianos y comenzaron a reunirse en lugares en Jerusalén. Lucas, con su ojo por los detalles y la exactitud histórica, describe los primeros días de esta iglesia en Hechos 2:42: "Y se dedicaron a la enseñanza de los apóstoles, a la comunión, a la división del pan ya las oraciones". Podríamos gastar volúmenes en este versículo, pero note lo que los primeros seguidores de Cristo consideraron importante: la enseñanza de los apóstoles (la Palabra de Dios), la comunión y el partimiento del pan (entre sí) y las oraciones. No lea demasiado rápido después de la palabra "devoto" en Hechos 2:42. La palabra significado tiene mucha intensidad y deliberación. Es como una bestia salvaje y hambrienta dispuesta a devorar su presa. Cuando los

primeros miembros de la iglesia de Jerusalén se dedicaban a la oración, hacían mucho más que leer nombres de una lista. Fueron fervientes, intensos y apasionados por la oración. No tenían ninguna duda de que Dios estaba escuchando y respondiendo. El hecho de no orar equivale a no respirar. La oración no era un complemento para darles permiso para comer. Era algo serio para un grupo serio de miembros de la iglesia. La oración fue el alma de la iglesia primitiva. Pero no las iglesias fallecidas Hizo una pausa cuando le hice las mismas preguntas. Él no era diferente a los otros que habían dedicado su tiempo para estas autopsias. Pero él no tenía una respuesta lista a las preguntas: ¿Realmente crees que fue un tiempo significativo de oración? ¿Crees que así es como oraron las iglesias del Nuevo Testamento? Después de una breve pausa, dijo algo muy revelador. "Hubo un día en que la oración era poderosa en nuestra iglesia", comenzó. “La gente rezaba antes de los servicios de adoración. Los grupos pequeños pasaron mucho tiempo en oración. Oramos intensamente por nuestra comunidad ". "Entonces", se detuvo. Era como una luz cuando estaba encendida. "Entonces nuestra comunidad comenzó a cambiar", habló metódicamente y lentamente. "Estabamos asustados. Muchos miembros vendieron sus casas y salieron tan rápido como pudieron. Empezamos a centrarnos en el miedo. Dejamos de servir a la comunidad ”. "Y . . ”Las lágrimas brotaron de sus ojos. Empezó de nuevo. “Y dejamos de orar con la pasión que una vez tuvimos. Eso es. Ese fue el comienzo de la decadencia que llevó a nuestra muerte. Dejamos de tomar en serio la oración. Y la iglesia comenzó a morir. No hay oración. Sin esperanza. Y la iglesia comenzó a morir. Compromiso de oración 9 Señor, enséñame a orar. Enséñame a orar consistentemente. Enséñame a ser un líder en oración en mi iglesia. Y enséñame a mantener la oración apasionada y creyente como el alma de esta iglesia. Preguntas para el pensamiento de oración

1. La mayoría de las iglesias tienen momentos de oración. ¿Cuál es la diferencia entre aquellas iglesias que tienen una oración significativa y aquellas que no la tienen? 2. ¿Por qué el fracaso de una iglesia para participar en una oración significativa lleva a su desaparición? 3. ¿Cuál es el papel y el lugar de la oración en la iglesia primitiva de Jerusalén en el contexto de Hechos 2: 41–47? CAPÍTULO 10 La iglesia no tenía un propósito claro Es considerado una de las mayores victorias estadounidenses en la historia de los Juegos Olímpicos. El equipo de hockey de los Estados Unidos no debía tener una oportunidad en 1980. La Unión Soviética parecía invencible e imbatible. Su equipo incluía profesionales de élite que habían jugado juntos durante años. Los estadounidenses, por otro lado, tenían compañeros de equipo que nunca habían jugado juntos. Ninguno de ellos era profesional; habían venido de colegios y universidades en todo Estados Unidos. La victoria estadounidense sobre los soviéticos en la ronda de medallas parecía improbable, si no imposible. Según la película basada en estos héroes poco probables, el punto de inflexión para los estadounidenses llegó en una práctica dirigida por el entrenador Herb Brooks. El entrenador era exigente, quizás conducido a una falta. Brooks no estaba contento con el juego del equipo, por lo que hizo que los jugadores patinaran a toda velocidad hasta el punto de agotamiento. A algunos de los entrenadores asistentes les preocupaba que los jugadores se desmayaran o renunciaran. Instaron a Brooks a detenerse. Brooks siguió adelante. Durante las prácticas, Brooks le preguntaba a un jugador para quién jugaba. El jugador respondería con orgullo con el nombre de su colegio. Brooks estaba haciendo la misma pregunta durante esta práctica de agotamiento total. Uno de los jugadores de hockey, recordando la pregunta persistente de Brooks, levantó la vista de su posición postrada después de su último sprint. Jadeando por respirar, declaró: "Juego para los Estados Unidos de América".

Fue el momento definitorio. Lo consiguieron No jugaron para las universidades dispares de donde vinieron. Jugaron para los Estados Unidos de América. Y el equipo respondió. Derrotaron a los poderosos soviéticos en el primer juego de la ronda de medallas, y finalmente vencieron a Finlandia por la medalla de oro. Algunos dicen que la victoria sobre la Unión Soviética fue la mayor victoria olímpica para los estadounidenses. Otros dicen que fue el mejor momento en los deportes estadounidenses. La mayoría de las personas que estaban vivas en 1980 aún recuerdan "el milagro en el hielo". Las iglesias no lo consiguieron Los jugadores de hockey americanos lo consiguieron. No solo sabían el juego que estaban jugando; sabían para quién jugaban: "Juego para los Estados Unidos de América". Ellos entendieron claramente su propósito. Ellos entendieron claramente cómo llevar a cabo su propósito. Ese ciertamente no es el caso con aquellas iglesias que estaban muriendo. Cuando entrevisté a ex miembros de las iglesias fallecidas, se refirieron a sus últimos años de manera triste y similar: • "Estábamos pasando por los movimientos". • "Todo lo que hicimos parecía ser como si estuviéramos en una rutina o mala rutina". • "Nos apegamos más a nuestra forma de hacer iglesia que cuando le preguntamos al Señor qué quería que hiciéramos". • “Estábamos jugando un juego llamado iglesia. "No teníamos idea de lo que realmente se suponía que estábamos haciendo". • "Dejamos de preguntar qué deberíamos estar haciendo por temor a que requiera demasiado esfuerzo o cambio". Tienes la foto? La iglesia no era realmente una iglesia. No tenía ningún propósito. Ninguno de los miembros habló sobre el cumplimiento de la Gran Comisión. Ninguno de los miembros habló acerca de llevar a cabo el Gran Mandamiento en la iglesia. Ninguno se acercó a hablar con una pasión ardiente acerca de hacer una diferencia en la comunidad. Las iglesias no tenían ningún propósito. Estaban comprometidos en una actividad llamada "Esta es la forma en que siempre lo hemos hecho".

Ninguno de los miembros preguntó qué deberían hacer; estaban demasiado ocupados haciendo lo que siempre han hecho. Cuando la Iglesia tiene un Propósito Bíblico El apóstol Pablo siempre estuvo preocupado por las iglesias, particularmente aquellas en las que tuvo un papel activo en sus inicios. La iglesia de Filipos era una de esas iglesias. A pesar de que Paul no presiona los golpes cuando necesita ser firme, en la mayor parte de la carta lees sobre su gran amor por la iglesia. Al comienzo de la carta, les dice a los miembros de la iglesia en Filipos una de las razones principales por las que siente un amor incondicional por ellos: Le doy gracias a mi Dios por cada recuerdo de usted, siempre orando con alegría por todos ustedes en cada una de mis oraciones, por su asociación con el Evangelio desde el primer día hasta ahora. (Fil. 1: 3–5) ¿Lo entendiste? ¿Leíste claramente por qué estaba tan agradecido, por qué tenía tanta alegría? La última parte de la oración responde a estas preguntas: “. . . debido a su colaboración en el evangelio desde el primer día hasta ahora ". La iglesia entendió su propósito. Los miembros de Filipos sabían lo que debían hacer. Ellos debían vivir el evangelio. Debían proclamar el evangelio. Ellos debían asociarse con Pablo en el evangelio. Su propósito estaba total y completamente centrado en el evangelio. Pablo sintió una gran alegría por la forma en que entendieron su propósito. Y no te pierdas esa última frase: ". . . desde el primer día hasta ahora. ”Los miembros de la iglesia de Filipo no dejaron de entender su propósito. Desde el día en que la iglesia comenzó hasta el día en que Pablo escribió la carta, ellos sabían lo que debían hacer. Así vivieron el evangelio y compartieron el evangelio. Pero las iglesias moribundas, en algún momento de su historia, olvidaron su propósito. Rara vez alguien podría señalar un evento singular o un momento histórico en el que se olvidó el propósito. Fue un proceso mortal y lento. Las actitudes cambiaron de centradas en el evangelio y centradas en el otro a centradas en sí mismas. Un enfoque hacia el exterior se convirtió en una obsesión interior. Las rutinas, tradiciones y rituales reemplazaron el propósito original de ser personas impulsadas por el Evangelio.

A medida que la iglesia perdió su propósito, ella, lenta pero seguramente, comenzó a morir. El proceso fue típicamente largo, pero la muerte llegó. Una iglesia sin un propósito centrado en el evangelio ya no es una iglesia en absoluto. Compromiso de oración 10 Dios, reaviva los corazones de los miembros de nuestra iglesia, incluyéndome a mí, a tener una pasión por el evangelio. Enseñar a nuestra iglesia a compartir el evangelio con los demás. Enséñanos a vivir como hombres y mujeres que somos portadores verdaderos de las buenas nuevas de Jesucristo. Recuérdanos nuestro propósito. Nos condena de nuestro propósito. Danos poder para vivir nuestro propósito. Preguntas para el pensamiento de oración 1. Utilizando la ilustración del equipo olímpico de hockey de los Estados Unidos de 1980, explique la necesidad de que las iglesias moribundas vuelvan a descubrir su propósito. 2. ¿Cómo pueden la rutina y la tradición obstaculizar que una iglesia cumpla su propósito? 3. ¿Qué quiso decir Pablo en Filipenses 1: 3–5 cuando agradeció a la iglesia por su colaboración en el evangelio? CAPÍTULO 11 La iglesia obsesionada Sobre las instalaciones De las catorce iglesias fallecidas, pude ver las antiguas instalaciones de solo una de ellas. Varios habían sido arrasados; Edificios nuevos e impresionantes ahora están donde estaban antes. Un par de ellos estaban detrás de vallas erigidas apresuradamente. Fueron condenados y cualquier intento de ingresar a la propiedad fue ilegal. Una de las iglesias, sin embargo, no había sido vendida ni condenada. Se sentó en la propiedad como lo había hecho durante décadas pasadas. El antiguo anciano de la iglesia fallecida todavía tenía una llave. Él me permitió ir con él al edificio abandonado. Había algo que él quería que yo viera. "Realmente no hay mercado para la propiedad", dijo cuando entramos. "No estoy seguro de lo que finalmente sucederá aquí. Probablemente será como

muchos de los edificios alrededor de la ciudad, abandonados y descuidados ". Esperaba telarañas y montones de polvo. Sin duda, Good Housekeeping no le otorgaría el sello de aprobación. Pero era tolerable. Me dio la impresión de que alguien hacía limpiezas ligeras en el edificio abandonado de forma ocasional, como una persona que limpia alrededor de una tumba en un cementerio. No había servicios públicos para el edificio, por lo que me llevó con una linterna grande. Caminó con confianza y rapidez. Él sabía su camino alrededor. Paramos. La luz apuntaba a una habitación, una habitación individual. "Esto es todo", dijo en voz baja. No podía decir si su tono era de respeto o tristeza. El cartel seguía en la habitación: Lydia Room. "Esta habitación era el equivalente a un salón o la habitación de una novia en otras iglesias", ofreció sin ninguna pregunta de mi parte. "Había un gran orgullo por esta habitación", dijo. “Tenía los mejores muebles. Obtuvo la primera atención antes que nada en la iglesia ". Continuó su historia, y fue tristemente típica. La habitación se convertiría en el foco de la disensión. ¿Quién podría usarlo? ¿Quién decidió qué muebles fueron allí? ¿Podría la gente fuera de la iglesia usarlo? ¿Podría celebrarse allí una comunión de iglesia normal? "Los argumentos fueron bastante feos", dijo. "Y no creo que lo supiera en ese momento, pero al mirar hacia atrás, nuestro enfoque en esta sala marcó el comienzo de nuestro fuerte descenso". El pauso. "Sé que morimos por muchas razones", ofreció, "pero las peleas en esta sala son las señales más claras que tengo de ese punto al cierre de las puertas. Parece tan tonto, tan triste ahora. Estábamos peleando por una estúpida habitación mientras moría la iglesia ". La realidad de la obsesión Lamentablemente la historia de este anciano es muy común. Una iglesia se separó y finalmente murió cuando el viejo púlpito fue reemplazado por uno nuevo. La iglesia en realidad tuvo una reunión de negocios y una gran batalla para votar sobre el nuevo púlpito. Los miembros que no habían estado en la iglesia durante años se presentaron a la votación. De hecho, los llamados miembros inactivos a menudo se activaron para una reunión de negocios disputada en las iglesias moribundas. Su presencia terminó abruptamente una vez que terminó la votación.

El grupo del "nuevo púlpito" derrotó al grupo del "viejo púlpito" en una votación cerrada. El grupo "viejo púlpito" tomó el púlpito y comenzó una nueva iglesia. Me resistí a una serie de frases sobre el posible nombre de la nueva iglesia, porque la historia es patéticamente triste y verdadera. Por cierto, la nueva iglesia murió solo dos años después de su inicio. La iglesia más antigua se mantuvo durante otros once años antes de su desaparición. Varias de las catorce iglesias se enfocaron en los memoriales. No escuches mi declaración como una crítica de los memoriales. Recientemente he financiado un memorial en memoria de mi nieto. Entiendo el dibujo emocional que tienen. Los memoriales vienen en forma de sillas, mesas, habitaciones y otros lugares donde se puede colocar una placa limpia. El punto no son los memoriales en sí mismos; el punto es que los monumentos se convirtieron en una obsesión en muchas de estas iglesias. Cada vez se ponía más énfasis en el pasado y se descuidaba el futuro. Las historias son, desafortunadamente, interminables. En una iglesia, una familia financió la remodelación y remodelación de una sala de reuniones de tamaño mediano. Años después de esa donación, los miembros de la familia extendida cambiaron el bloqueo de la sala y tomaron decisiones unilaterales sobre quién podría usarla. Las peleas de la iglesia han estallado en vitrales, bancas, cortinas, color de pintura, color de alfombra, y una y otra vez. Las iglesias moribundas, la mayoría de las veces, experimentan severas batallas por la obsesión de las instalaciones antes de su desaparición. Irónicamente, muchas de estas iglesias no estaban obsesionadas con todas las instalaciones. La mayor parte del edificio podría deteriorarse notablemente, pero seguirían colgando y protegiendo ese elemento o área. Ser un buen administrador de esas cosas materiales que Dios le ha dado a nuestras iglesias es bueno. Estar obsesionado con cualquier artículo que descuide su misión es la idolatría. Jesus y las cosas Jesús fue muy claro en cualquier obsesión con las cosas materiales. Predicó el mejor mensaje de todos, el Sermón del Monte. Justo después de hablar sobre el valor eterno de la oración y el ayuno, reprendió a los oyentes que estaban obsesionados con los elementos materiales y temporales. En Mateo 6: 19-21, Él dijo:

No recojan tesoros en la tierra, donde la polilla y el óxido destruyen y donde los ladrones entran y roban. Pero recolecta tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido destruyen, y donde los ladrones no entran y no roban. Porque donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón. Las palabras de Jesús se aplican a todos nosotros. Debemos ser buenos administradores de las finanzas personales y las posesiones. Del mismo modo, debemos ser buenos administradores de los elementos materiales en nuestras iglesias. Pero si nos enfocamos en las "cosas", sin importar cuán significativas sean, para que nos distraigamos de lo eterno, hemos perdido nuestro enfoque. Y una iglesia que ha perdido su enfoque eterno está un paso más cerca de morir y morir. Compromiso de oración 11 Señor, enséñame la administración apropiada de todos los elementos materiales que me das personalmente y en mi iglesia. Ayúdame, nunca permitas que esa mayordomía se convierta en obsesión e idolatría, especialmente cuando pierdo mi perspectiva sobre lo que realmente importa. Preguntas para el pensamiento de oración 1. Explicar la diferencia entre una iglesia que es un buen administrador de las cosas físicas en lugar de que la iglesia se obsesione e idólatra por ellas. ¿Cuáles son algunos ejemplos de cada uno? 2. ¿Por qué tantas iglesias tienen conflictos por “cosas”? 3. Mire las palabras de Jesús en Mateo 6: 19–21 y explique cómo se aplican a una iglesia que está prosperando o muriendo. ¿Cuáles son ejemplos de cómo las iglesias pueden ser obedientes a sus palabras: "Pero recolecten tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido destruyen, y donde los ladrones no ingresan y roban"? PARTE 2 ¿Hay esperanza para la iglesia moribunda? Doce respuestas Capitulo 12 Mi iglesia tiene síntomas de enfermedad: cuatro respuestas

Aunque este libro es breve, el camino para llegar a este punto debe parecer arduo. Se ha comunicado una gran cantidad de información negativa hasta este punto. Realmente no sé cómo podría haber hecho lo contrario. Este libro es una autopsia. Estoy tratando de discernir por qué murieron las iglesias. Es difícil ser brillante y alegre cuando hablas sobre la decadencia, la muerte y la muerte. Estos últimos tres capítulos pueden no parecer tan sombríos. Ofrezco cierto grado de esperanza y soluciones para las iglesias que aún están vivas. Pero por favor escuchame claramente. Estas no son soluciones mágicas, fáciles de arreglar. Las doce respuestas que ofrezco en tres capítulos no son una receta para crear o reparar la iglesia perfecta. Por el contrario, son más un grito a Dios para que intervenga, y para crear una buena disposición por parte de los miembros de la iglesia para ser obedientes. Es algo serio. Es aleccionador El camino A medida que avancemos en estos capítulos finales, abordaré tres tipos de iglesias: iglesias que tienen síntomas de enfermedad; Iglesias muy enfermas; y muriendo iglesias. Y si tuviéramos que estimar el número de iglesias en cada categoría, ofrecería lo siguiente: • Saludable: 10% • Síntomas de la enfermedad: 40%. • Muy enfermo: 40% • Morir: 10% Aunque estos números no son precisos, creo que reflejan la condición real de las iglesias en todo Estados Unidos. En este capítulo, veremos el primer grupo de iglesias que conforman aproximadamente el 40 por ciento de la población de la iglesia estadounidense. Estas son iglesias en etapas tempranas pero claras de enfermedad. ¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad? Probablemente hay más de 150,000 iglesias que se ajustan a esta categoría. Si bien el proceso es impreciso, una de las señales de que la enfermedad podría estar afianzándose incluye una actitud generalizada en la iglesia de que los mejores días están en el pasado. Si le preguntara a los miembros

de más largo plazo sobre los mejores días de la iglesia, muy pocos reconocerían el presente desde ese punto de vista. Si bien los números no lo son todo, se pueden decir desde una perspectiva sintomática. Es probable que las iglesias con síntomas de enfermedad hayan disminuido la asistencia a la adoración en los últimos cinco años. Si han crecido, la tasa de crecimiento fue más lenta que la tasa de crecimiento de la comunidad en la que se encuentran. Muchos líderes dejan de mirar los números cuando comenzaron a disminuir. Y cuando se ignoran los números, tienden a empeorar aún más. Los ministerios y programas para estas iglesias tienden a estar cambiando cada vez más para los miembros de la congregación en lugar de los de fuera. En términos simples, la iglesia se está moviendo de un enfoque externo a un enfoque interno. Si bien se pueden agregar algunos miembros nuevos cada año, no hay ningún sentido de que se realicen verdaderos discípulos. De hecho, la mayoría de estas iglesias no tienen un plan claro para hacer discípulos. Finalmente, aunque de ninguna manera exhaustiva, la iglesia tiene una gran cantidad de programas y ministerios desordenados. Hay mucha actividad y actividad, pero gran parte de ella no tiene un propósito significativo. La mayoría de estas actividades contribuyen poco o nada a la formación de los discípulos. La razón principal por la que se continúan esos programas y ministerios es simplemente porque "así es como siempre lo hemos hecho". Cuatro respuestas En cada uno de los capítulos finales, ofreceré cuatro de las doce respuestas para cada una de las categorías de la iglesia. A riesgo de redundancia, escuche que estas no son soluciones rápidas. Son respuestas categóricas importantes que deben adaptarse para cada iglesia. 1. Ore para que Dios abra los ojos del liderazgo y los miembros para que tengan oportunidades de llegar a la comunidad donde se encuentra la iglesia. Jesús le dijo a Sus seguidores en Jerusalén, justo antes de su ascensión, que debían ser testigos: "Pero recibirás poder cuando el Espíritu Santo haya venido sobre ti, y serás Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta el extremos de la tierra ”(Hechos 1: 8). El primer

mandato es impactar a tu comunidad local. La mayoría de las iglesias con síntomas de enfermedad se han enfocado más hacia adentro. 2. Realice una auditoría honesta de cómo los miembros de la iglesia pasan su tiempo participando. En la mayoría de estas iglesias, los miembros están involucrados en ministerios por sí mismos, a menudo con exclusión de los ministerios más allá de la iglesia. La iglesia pierde el impulso hacia el exterior cuando los miembros comienzan a formar grupos sagrados. 3. Tome una auditoría de cómo la iglesia gasta su dinero. Nuevamente, a medida que las iglesias se enferman, es más probable que usen fondos para sus propios miembros en lugar de llegar a su comunidad. El equilibrio es la clave, y la mayoría de estas iglesias están fuera de equilibrio. 4. Haz planes específicos para ministrar y evangelizar a tu comunidad. Usted ha orado al respecto. Usted ha evaluado honestamente su tiempo en los programas y el ministerio, y cómo la iglesia gasta sus fondos. Ahora es el momento de desarrollar planes específicos y concretos para impactar a la comunidad. Un líder de la iglesia que conozco fue al director de una escuela primaria pública cercana. Le preguntó al director qué es lo que más necesitaba la escuela. El próximo verano, más de 100 miembros de la iglesia estaban pintando paredes en la escuela. Los ministerios comunitarios crecieron a partir de ese compromiso. Compromiso de oración 12 Señor, déjame ver mi iglesia con honestidad y con los ojos abiertos. Ayúdame a comprender dónde nos hemos desequilibrado con los ministerios internos y externos. Y dé a nuestra iglesia una visión para hacer una diferencia en nuestra comunidad. Aún más, Dios, utilízame para ser un catalizador e instrumento para los cambios que deben tener lugar en nuestra iglesia. Preguntas para el pensamiento de oración 1. En este capítulo lees acerca de las iglesias que estaban comenzando a mostrar signos de enfermedad. ¿Cuáles son algunos de esos signos? ¿Cuáles son otras posibles señales? ¿Tiene tu iglesia alguna señal de enfermedad? 2. Resuma las cuatro respuestas para las iglesias que muestran signos de enfermedad. ¿Qué otras respuestas podrían agregarse a estas cuatro? 3. ¿Cuál es el contexto de Hechos 1: 8? ¿Cómo puede ser aplicable y relevante para las iglesias de hoy con signos tempranos de enfermedad?

Capitulo 13 Mi iglesia está muy enferma: cuatro respuestas Frank fue miembro de la primera iglesia en la que serví como pastor. Nunca lo conocí, pero escuché su historia varias veces. La iglesia era muy pequeña y muy rural. Todos en la iglesia conocían a todos los que habían asistido a la iglesia. Frank, me dijeron, comenzó a desarrollar síntomas de su enfermedad varios años antes de su muerte. De vez en cuando se le exhortaba a ir al médico, pero él se negó. Tal vez sus formas robustas e independientes podrían explicar su comportamiento. A menudo me preguntaba si la pobreza en la comunidad rural impedía que las personas buscaran ayuda médica. Cualesquiera sean las razones, Frank se enfermó y todavía se negó a ayudar. Su condición se deterioró por más de dos años antes de que él buscara atención médica. Y solo buscó ayuda porque la enfermedad era tan grave que no podía trabajar. Frank tuvo que volver a trabajar en su pequeña granja. Después de dos días de pruebas, él y su esposa obtuvieron los resultados sombríos. Había desarrollado una enfermedad que, cuando se atrapa a tiempo, puede ser tratada fácilmente. De hecho, algunos pacientes tuvieron la enfermedad durante un año antes de buscar tratamiento y están bien hoy. Pero Frank esperó más de dos años. Esperó hasta que estuvo muy enfermo. Sería declarado terminal un año después. Luego murió. Muchas veces, su viuda afligida me decía que estaría vivo hoy si acabara de ver a un médico antes. Sentí su pena. Sentí su culpa. Iglesias que se enferman mucho Rara vez una iglesia pasa de la categoría de "síntomas de enfermedad" a "muy enferma" de la noche a la mañana. Es más un continuo. Por eso es tan difícil detectar y responder si estás cerca de la iglesia. De un día para otro, nada parece cambiar. Pero se está produciendo un deterioro subyacente. Sin intervención, la situación solo empeora. No hay un momento claramente definitorio en el que podamos declarar que una iglesia se ha mudado a la categoría de "muy enferma". La iglesia

se parece más a Frank, donde las condiciones empeoran gradual pero progresivamente con el tiempo. Y si la iglesia espera hasta que está muy enferma, es extremadamente difícil mejorar. Estimamos que, al igual que las iglesias con síntomas de enfermedad, las iglesias muy enfermas representan el 40 por ciento del número de congregaciones estadounidenses. Como recordatorio, eso es más de 150,000 iglesias. Entonces, ¿cuáles son algunos de los indicadores de que una iglesia está muy enferma? Nuevamente, la terminología y las definiciones son imprecisas, pero aquí están algunos de los signos más notables: • Disminución numérica significativa en los últimos diez a veinte años. La mayoría de las veces medimos la asistencia a la adoración para esta métrica. • Tiempos prolongados de apatía. Ocasionales momentos de intenso conflicto. La iglesia parece más apática que cualquier otra cosa, pero el conflicto puede surgir con una intensidad sorprendente. • La iglesia no es conocida en la comunidad. Pregúntele a un empleado de una tienda en la comunidad. Tal vez te sorprenda lo pocos que saben que existe la iglesia. • Los nuevos miembros son raros. El éxodo supera claramente la entrada. • Puerta giratoria de pastores. La frustración y el conflicto limitan los años de tenencia pastoral. • Los "buenos viejos tiempos" son típicamente veinte o más años en el pasado. Ha habido una larga temporada desde que alguien se sintió realmente bien con la iglesia. Las iglesias muy enfermas no tienen que manifestar todos estos síntomas, pero típicamente tienen al menos tres de ellos. El desafío con las iglesias muy enfermas es como el desafío presentado con Frank. Una vez que pasan a esta etapa, la reversión del deterioro es increíblemente difícil. Si los miembros hubieran reconocido los problemas antes, es más probable que la ayuda sea beneficiosa. Lamentablemente, es raro ver a una iglesia que está muy enferma revertir su curso. Con el tiempo, las iglesias se mueven a la etapa terminal y finalmente mueren. Para estar seguro, ese período de tiempo puede ser muy largo. Las iglesias como instituciones luchan tenazmente antes de cerrar las puertas. Pero la realidad es que muchas de las iglesias han dejado de ser la iglesia a pesar de que parecen estar abiertas al servicio.

Cuatro respuestas Me encanta ser un dispensador de esperanza. Pero me niego a ser un dispensador de falsas esperanzas. La realidad actual es que la mayoría de las iglesias en esta categoría se dirigen hacia la muerte y la muerte. Una vez más, el proceso puede ser largo, pero parece tan inevitable para muchos. ¿Dónde está la esperanza en Dios? ¿No creo que Él pueda realizar los milagros necesarios para revertir los cursos de estas iglesias? Por supuesto que sí. Pero en las Escrituras, Dios generalmente trabaja con un pueblo dispuesto, al menos un líder dispuesto. Cuando liberó a los judíos de la esclavitud de Egipto, tuvo un líder llamado Moisés. Ese líder inicialmente se mostró reacio, pero finalmente obedeció y la gente lo siguió. La reconstrucción de Jerusalén no fue fácil después del exilio, pero Dios usó a Nehemías para dirigir la reconstrucción del muro alrededor de la ciudad. Usó a Hageo para dirigir la reconstrucción del templo. Sí, la reversión es posible, pero Dios generalmente espera a un líder dispuesto a encontrar personas dispuestas a hacerlo. ¿Cuáles son, entonces, algunas respuestas que los líderes y miembros de la iglesia pueden tener en su iglesia si está muy enferma? Una vez más, ofrezco cuatro categorías amplias. 1. La iglesia debe admitir y confesar su necesidad extrema. La mayoría de las iglesias se mueven hacia la muerte porque se niegan a reconocer su condición. A veces, un solo líder será usado por Dios para mover a la iglesia en esta dirección positiva. 2. La iglesia debe orar por sabiduría y fuerza para hacer lo que sea necesario. El cambio no será fácil. 3. La iglesia debe estar dispuesta a cambiar radicalmente. Francamente, este suele ser el punto de mayor resistencia. La iglesia tiene que cambiar décadas de problemas de comportamiento acumulativos en muy poco tiempo. 4. Ese cambio debe llevar a la acción y un enfoque hacia afuera. Cuando una iglesia comienza a actuar positivamente con este cambio radical, esencialmente se ha convertido en una nueva iglesia. ¿Puede ocurrir la reversión? Es altamente improbable. Pero no es inútil. Nuestra esperanza se basa en las palabras de Jesús después de confrontar al joven rico que quería entrar en el Reino de Dios:

"Con los hombres esto es imposible, pero con Dios todas las cosas son posibles" (Mateo 19:26) Compromiso de oración 13 Creo que todas las cosas son posibles a través de ti, Dios. Muéstrame lo que necesito hacer para guiar a mi iglesia de desesperada a la esperanza. Y dame el coraje y la fuerza para hacer esos cambios, incluso aquellos cambios que serán muy dolorosos. Preguntas para el pensamiento de oración 1. ¿Cuáles son los síntomas de una iglesia muy enferma? ¿Tiene tu iglesia alguno de estos síntomas? 2. Lee Hageo 1. ¿Cómo se relaciona la historia de la reconstrucción del templo con revertir el curso de una iglesia muy enferma? 3. ¿Dónde comienza una iglesia muy enferma si sus miembros y líderes realmente desean una inversión? ¿Qué sacrificios hay que hacer? ¿A qué comodidades hay que renunciar? Capitulo 14 Mi iglesia se está muriendo: Cuatro respuestas Muerte. Moribundo. Esos son temas que la mayoría de nosotros nos gusta evitar. Pero, a menos que Jesús regrese antes de nuestra muerte, es el camino inevitable para todos nosotros. En lugar de actuar como si no existiera, deberíamos abrazar nuestra mortalidad terrenal de una manera que traiga la mayor gloria a Dios. Muchos de ustedes han caminado con alguien que se está muriendo. Mi primera experiencia fue con mi padre. Tenía veintiocho años. No quería aceptar lo que me habían dicho. Después de la negación, comencé a tener resentimiento por mi injusticia percibida de todo esto. Tuve dos niños pequeños, edades dos y cuatro. El tercer hijo no nacería por un año más. Quería que mi padre viera crecer a sus nietos. Quería que la increíble influencia que había tenido en mi vida estuviera disponible para mis hijos.

Supongo que era egoísta. Quería que mi papá viviera por mí. Yo lo necesitaba Necesitaba sus tranquilas garantías. Necesitaba su consejo. Necesitaba su amor. Solo quería que mi papá viviera. Tenía veintiocho años. Pensé que mi papá estaría conmigo por unas décadas más. Era demasiado joven para morir. Simplemente no era justo. Había sobrevivido a terribles heridas en la Segunda Guerra Mundial. Ganó el Corazón Púrpura y otras medallas. ¿Por qué permitiría Dios que este cáncer lo tomara cuando lo había protegido tan bien en el pasado? Me negué a aceptar que mi padre se estaba muriendo. El era mi heroe Él era mi mejor amigo. La conversación Sería la última conversación significativa que tendría con mi papá. En lugar de ministrarle a él, él me atendió. Eso también fue injusto. Eso fue egoísta de mi parte. Él sabía que necesitaba escuchar estas palabras de él. Me dijo cómo y cuándo se convirtió en un seguidor de Cristo. Me contó cómo fue a la guerra, nunca le pidió a Dios que lo perdonara. Me contó cómo se comprometió con Dios a entregar a sus futuros hijos al servicio del Señor si regresaba y se casaba con mi madre. Me miró con amor total y penetrantes ojos de verdad. "Thom", comenzó. “Tú y tu hermano son las respuestas a mis oraciones. Mi vida es completa. Puedo ir ahora. Estaré bien." No lo dejé ir de inmediato. Sería un proceso durante las próximas semanas. Pero la liberación de mi padre comenzó ese día. La muerte vino al mundo con el pecado del hombre. La vida eterna vino al mundo con la muerte y la resurrección de Jesús. Papá murió. Fue el primer funeral que oficié. Lo dejé ir. La muerte de una iglesia Nadie quiere que su iglesia muera. Nadie desea abandonar la iglesia que ama. Nadie quiere perder la iglesia a la que ella le dio tantos años. Pero las iglesias mueren. Ciertamente la iglesia universal nunca morirá. Jesús lo dejó muy claro. Él dijo: "Sobre esta roca edificaré Mi iglesia, y las fuerzas del Hades no la vencerán" (Mat. 16:18). Pero las congregaciones individuales mueren.

Tu iglesia puede ser una de esas iglesias moribundas. He tomado la longitud de este breve libro para describir los síntomas de esas iglesias. Y puedes haber sido como yo estaba con mi padre. No esta sucediendo Negación. Pero ahora es el momento de dejarlo ir. Aferrarse no hará ningún bien a nadie. Una iglesia moribunda es de poco beneficio para el Reino. . . a menos que muera bien. ¿Cómo podría una iglesia morir bien? Permítanme ofrecer cuatro respuestas mientras concluyo este pequeño tomo. Y permítame sugerirle cuatro formas en que puede ser parte de una iglesia que muere con dignidad. Cuatro respuestas: la muerte con dignidad Si realmente ha reconocido que su iglesia se está muriendo, ¿qué pueden hacer usted y los pocos miembros que quedan? ¿Qué puedes hacer en los últimos días de tu congregación para asegurarte de que la muerte de tu iglesia realmente puede hacer una diferencia para bien para el Reino? Aquí hay cuatro opciones. 1. Venda la propiedad y entregue los fondos a otra iglesia, tal vez una nueva iglesia que haya comenzado o comience pronto. Puede estar seguro de que la muerte de su iglesia ayudó a otra iglesia a vivir. 2. Dar el edificio a otra iglesia. Las nuevas iglesias están comenzando por miles cada mes en América. Uno de sus mayores desafíos es encontrar un lugar donde puedan reunirse. 3. Si su iglesia está en un vecindario de transición, cámbiese el liderazgo y las propiedades a aquellos que realmente residen en el vecindario. Algunas iglesias anglosajonas están empezando a hacerlo, donde el vecindario ahora es predominantemente afroamericano u otro grupo étnico. 4. Fusionarse con otra iglesia, pero deje que la otra iglesia tenga la propiedad y el liderazgo de su iglesia. En términos simples, estás permitiendo que la iglesia saludable se haga cargo de tu iglesia. Eso es sacrificial. Esa es una manera de morir con dignidad. Todas estas opciones son dolorosas, porque todas las opciones son verdaderamente sacrificiales. Lo que estás haciendo es permitir que tu iglesia muera para que otra viva. Al hacerlo, estás siguiendo el ejemplo de Aquel que hizo el sacrificio final con Su muerte.

Y ese es el mejor ejemplo a seguir. Compromiso de oración 14 Señor, si es tu voluntad que nuestra iglesia muera, por favor házmelo saber. Y dame el coraje y la fuerza para dejarte ir. Para tu gloria Preguntas para el pensamiento de oración 1. ¿Cómo se relaciona Mateo 16:18 con las iglesias moribundas? 2. ¿Cuáles son las cuatro formas en que una iglesia moribunda puede ofrecer vida a otra iglesia? 3. Sobre todo, ¿qué has aprendido de este breve libro? ¿Qué te ha enseñado Dios al leer estos capítulos? Una nota de Thom: Los invito a acompañarme cada día para un nuevo artículo en mi blog, ThomRainer.com. Acojo con satisfacción la interacción y los comentarios en el blog, y respondo a muchos de ellos a lo largo del día.