Arqui Steven Holl

1.-CONCEPTO DE ARQUITECTURA Y CONSTRUCCION Quiero vivir por la inspiración y concretar la inspiración en el espacio y la

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1.-CONCEPTO DE ARQUITECTURA Y CONSTRUCCION Quiero vivir por la inspiración y concretar la inspiración en el espacio y la luz. Arquitectura puede ser un regalo dejado para que otros puedan disfrutar de- la arquitectura con el paisaje pueden formar una realidad especial – un lugar especial, un lugar que está vivo – inspira vivo. Steven Holl no diseña iconos, no piensa en la arquitectura como punto de referencia, no proyecta de lo general a lo particular, sino que, por el contrario, empieza prestando atención al significado de la obra y la desarrolla articulando volúmenes, conectando ambientes, eligiendo materiales de revestimiento, iluminando el espacio resultante y construyendo algo único expresa la emblematicidad de su modo de proyectar. Holl se distancia de la arquitectura icónica, prefiriendo la metafórica, de la cual partir hacia un concierto de materiales y formas guiados por un equilibrio compositivo superior. No surge necesariamente una idea única sino un conjunto de ideas que forman la espina dorsal del proyecto. El significado del trabajo de arquitectura surge cuando encuentras la manera de conectar todos estos hilos. La arquitectura tiene que ser una cosa viva en el espacio, en la forma y en la perspectiva.

¿Qué piensa acerca de la creciente deslocalización del trabajo del arquitecto y cómo cree que las culturas locales se ven afectadas? Creo que la arquitectura necesita anclarse a su programa y emplazamiento. Su significado debe estar tan profundamente arraigado a sus condiciones de origen que no se deje perturbar por la moda. Mi primer libro, Anchoring, describe precisamente la relación de un edificio con su lugar, con su cultura, con sus orígenes metafísicos. El concepto que da origen a la arquitectura debe hacerse más profundo, en vez de más amplio, para construir un significado en el lugar, indiferente a cualquier estilo. ¿Cree pues que la arquitectura es un producto global? La arquitectura construida encarna los principios básicos de la luz, el espacio, la gravedad, la escala y la proporción y el mundo táctil del material y el detalle. Hoy la arquitectura se imagina y discute en debates mundiales. ¿Es, como dicen, el más europeo de los arquitectos americanos? -Creo que deberíamos ser todos ciudadanos del mundo. Pongo en duda la postura provinciana del arquitecto. Pienso que era inevitable en los siglos XIX y XX, pero hoy en día cuando viajas y piensas sobre el mundo te das cuenta de que todos vemos la televisión internacional, leemos la prensa internacional, y necesitamos ser por tanto internacionales en nuestro pensamiento.

¿Cómo describiría su arquitectura? Estamos a favor de lo universal en lo particular. Una idea única es una fuerza que puede impulsar un diseño, pero la medida de nuestra arquitectura se halla en los fenómenos experimentales. Cuestión de escala Sus proyectos se caracterizan por abarcar múltiples escalas, ¿con cuál de ellas trabaja más cómodamente: con la escala pequeña de las casas, la escala intermedia de los museos o con las grandes infraestructuras que está construyendo en Asia? La arquitectura tiene una intensidad que es ajena al tamaño. Pensando en la obra maestra de Pierre Chareau, la Maison de Verre de París, los misteriosamente poderosos Jardines Ryoanji en Kyoto o las obras de Carlo Scarpa, me inclino a creer que el sentido y la intensidad de la arquitectura son más fáciles de alcanzar en obras de pequeña escala. Estoy a favor de la calidad por encima de la cantidad. Sin embargo, también podemos tratar de lograr un proyecto de calidad a gran escala, como ha sido nuestro reto con el Híbrido Enlazado de Pekín, un macro proyecto de unos 220.000 metros cuadrados, comprometido con cuestiones globales que afectan a las ciudades y el urbanismo. Estudiar y reflexionar sobre las realidades potenciales del futuro es enfrentarse a dimensiones urgentes, construcciones de gran escala. Acompaña cada proyecto con dibujos en acuarela que constituyen valiosas herramientas de expresión, ¿Cuál es el secreto de sus cuadernos? Cuando dibujo conecto lo subjetivo con lo objetivo; es una forma de pensamiento abierto y libre sentimiento, y es impredecible. No hago ninguna restricción, salvo en el formato del bloc de dibujo que es siempre de 5 x 7 cm. En él abro caminos de experimentación que luego pruebo en el estudio con maquetas de idea a modo de bocetos rápidos. Hay mucha energía en esta manera de comenzar un proyecto; es muy inspiradora y fresca. ANCLAJE. La arquitectura está ligada a la situación. A diferencia de la música, la pintura, la escultura, el cine y la literatura, una construcción (no móvil) está entrelazada, con la experiencia de un lugar. El emplazamiento de un edificio es más que un mero ingrediente de su concepción. Es su fundamento físico y metafísico (espiritual). La resolución de los aspectos funcionales del emplazamiento y del edificio, las vistas, los ángulos solares, la circulación y el acceso son la "física" que demanda la "metafísica" de la arquitectura. A través de una conexión, de un motivo extendido, un edificio es más que algo simplemente ajustado al emplazamiento. El edificio transciende los requerimientos físicos y funcionales al fusionarlos con un lugar, al recoger el sentido de una situación. La arquitectura no se entromete en un paisaje sino que más bien sirve para explicarlo. El esclarecimiento de un emplazamiento no es una réplica simplista de su contexto; revelar un aspecto de un lugar puede no confirmar su apariencia. De ahí que los modos de mirar habituales puedan interrumpirse. La arquitectura y el lugar deben tener una conexión experiencial, una conexión metafísica, una conexión poética. Cuando una obra de arquitectura funde con éxito un edificio y una situación, una tercera condición emerge. En esta tercera entidad, denotación y connotación se funden; la expresión está enlazada con la idea y ésta con el emplazamiento. Lo sugerente y lo implícito son aspectos múltiples de una intención. Un edificio tiene un emplazamiento. En esta situación única, sus intenciones se acumulan. Edificios y emplazamiento han sido interdependientes desde el origen de la arquitectura. En el pasado, esta conexión se hacía manifiesta sin intención consciente a través del uso de materiales y de oficios locales, y por la asociación del paisaje con acontecimientos de la historia y del mito. Hoy la conexión entre emplazamiento y arquitectura debe encontrarse por nuevos caminos, que son parte de una transformación operada en la vida moderna. Las ideas cultivadas a partir de la primera percepción del lugar, las reflexiones sobre los pensamientos iniciales o una reconsideración de la topografía existente pueden contribuir al entramado de la invención. Este modo de invención se enfoca a través de un espacio relativo, como distinto del espacio universal. Está en un dominio limitado. La arquitectura es una extensión; una modificación que establece

significados absolutos relativos a un lugar. Incluso cuando una nueva obra es una inversión de las condiciones inherentes, su orden trata de encarnar un aspecto, o de iluminar un significado específico, distinto de las generalidades del espacio abstracto. Existe un ideal en lo específico; un absoluto en lo relativo. La residencia Malaparte en Capri, de Adalberto Libera, se alza como un ejemplo misterioso de orden en el espacio, la luz y el tiempo. Sus muros simples se funden con la roca y el acantilado y se elevan del Mediterráneo como una extraña plataforma que se ofrece al sol. Sin estilo, casi sin fachadas identificables, conecta con su emplazamiento saltando por encima del tiempo. IDEA Y FENÓMENOS. La esencia de una obra de arquitectura es una unión orgánica entre concepto y forma. Las piezas no pueden ser substraídas o añadidas sin trastornar propiedades fundamentales. Un concepto, ya sea una declaración racionalmente explícita o una demostración subjetiva, establece un orden, un campo de investigación, un principio limitado. Dentro de los fenómenos de la experiencia en una edificación, la idea organizadora es un hilo oculto que conecta partes dispares con intención exacta. Aunque la experiencia de planos semitransparentes de cristal que definen un espacio con una luz difusa presenta una experiencia sensorial irreducible a un concepto declarado, esta inexpresión no es una brecha entre concepto y fenómenos, sino el orden o campo donde varias conclusiones se entrecruzan. El entrelazamiento de idea y fenómeno sucede cuando un edificio se lleva a cabo. Antes del comienzo, el esqueleto metafísico de la arquitectura de tiempo, luz, espacio y materia está sin ordenar. Los modos de composición están abiertos: línea, plano, volumen y proporción esperan ser activados. Cuando el emplazamiento, la cultura y el programa se dan, un orden, una idea, pueden formarse. Pero la idea es sólo concepción. La transparencia de una membrana, la condición mate de un muro revocado, el reflejo lustroso del vidrio opaco y el rayo de luz solar se entrelazan en relaciones recíprocas que forman la experiencia particular de un lugar. Los materiales al trabarse con los sentidos del perceptor proporcionan el detalle que nos transporta más allá de la visión aguda o la tactilidad. De la linealidad, la concavidad y la transparencia a la dureza, la elasticidad y la humedad, el dominio háptico se abre. Una arquitectura de materia y tactilidad apunta a una "poética de la revelación" (Martin Heidegger), que requiere una inspiración de ensamblador. El detalle, esta poética de la revelación, pone en juego conjuntamente la disonancia a escala íntima con la consonancia a gran escala. La serenidad vertical de un muro masivo es interrumpida por una jaula solitaria y diminuta de claridad, dando la escala y a la vez revelando el material y la materia. Similarmente, la experiencia espacial del paralaje, o distorsión perspectiva, al moverse a través de espacios que se solapan, definidos por sólidos y huecos, abre los fenómenos de los campos espaciales. La experiencia del espacio desde un punto de vista que está en perspectiva presenta un acoplamiento del espacio externo del horizonte y el punto óptico del cuerpo. Las órbitas de los ojos se convierten en un tipo de posición arquitectónica basado en un fenómeno de experiencia espacial que tiene que reconciliarse con el concepto y su ausencia de espacialidad experiencial. Un infinito número de puntos de vista podría decirse que componen el campo espacial de los fenómenos de una obra de arquitectura. El espacio permanece en el olvido sin la luz. La oscuridad y la sombra de la luz, sus diferentes fuentes, su opacidad, su transparencia, su translucidez y las condiciones de reflexión y refracción se entretejen para definir o redefinir el espacio. La luz somete al espacio a la incertidumbre, formando una especie de puente que tantea en los campos de la experiencia. El efecto de un baño de luz amarilla sobre un simple volumen desnudo o el efecto de un paraboloide de sombra sobre una pared blanca hueso nos manifiesta el reino psicológico y transcendente de los fenómenos de la arquitectura. Si consideramos el orden (la idea) como la percepción exterior y los fenómenos (la experiencia) como la percepción interior, entonces en una construcción física la percepción exterior y la percepción interior se entretejen. Desde este punto "de vista, los fenómenos de la experiencia son el material para un tipo de razonamiento que une el concepto y la sensación. Lo objetivo se unifica con lo subjetivo. La percepción exterior (del intelecto) y la percepción interior (de los sentidos) se sintetizan en un ordenamiento del espacio, la luz y el material. El pensamiento arquitectónico consiste en operar con los fenómenos partiendo de la idea. Mediante la realización nos damos cuenta de que la idea es sólo una semilla que ha de desarrollarse en los fenómenos. Las sensaciones de la experiencia se convierten en una especie de razonamiento distinto para la realización de la arquitectura. Tanto si se reflexiona sobre la unidad de concepto y sensación o sobre el entrelazamiento de idea y fenómeno, la esperanza es unir intelecto y sentimiento, precisión y espíritu.

IDEOLOGÍA FRENTE A IDEA. Las teorías generales de la arquitectura están restringidas por un problema central; a saber, que si una teoría particular es cierta, entonces todas las otras teorías son falsas. El pluralismo, por otra parte, conduce a una arquitectura empírica. Un tercer camino, tan elástico como definido, es la adopción de un concepto limitado. El momento, la cultura, la circunstancia programática y el emplazamiento son factores específicos a partir de los cuales puede formarse una idea organizativa. Un concepto específico puede desarrollarse como un orden preciso, sin consideración de las demandas universales de una ideología particular. Una teoría de la arquitectura que conduce a un sistema para pensar sobre los edificios y para hacer edificios tiene, como base, una serie de ideas fijas que constituyen una ideología. La ideología es evidente en cada proyecto que es consistente con la teoría general. Por el contrario, una arquitectura basada en un concepto limitado comienza con la desigualdad y la variación. Ilumina la singularidad de una situación específica. Los principios de proporción y la reflexión sobre el ritmo y los números no se invalidan porque se comience con un concepto "limitado". Los principios abstractos de la composición arquitectónica toman una posición subordinada dentro de la idea organizativa. El orden "de lo universal a lo específico" se invierte para convertirse en "de lo específico a lo universal". El crítico observará que esta estrategia de la inversión puede convertirse en una ideología en sí misma. No es esa nuestra intención, pero incluso si eso fuera así, esa sería una ideología siempre cambiante, una teoría del cisne negro, mutable e impredecible. Sería una ideología que negaría la homogeneidad de lo aceptado al celebrar lo extraordinario, en paralelo con la diversidad de la naturaleza. Si es una teoría, es una teoría que permite una arquitectura de comienzos singulares misteriosos, con la esperanza de un significado original y único en cada lugar. Su objetivo es la variación, la precisión y una celebración de lo todavía desconocido. "Los aspectos de las cosas que son más importantes para nosotros están ocultos a causa de su simplicidad y familiaridad" . L. Wittgenstein PENSAMIENTOS: Holl es reconocido por su habilidad para mezclar espacio y luz, con una gran sensibilidad contextual y por utilizar conceptos únicos en cada uno de sus proyectos. Considerado como uno de los mejores arquitectos americanos, sus edificios destacan por el uso de formas cúbicas, el empleo de vidrio y por el empleo de superficies alabeadas. “Dependo enteramente de diagramas conceptuales, los considero mi arma secreta. Me permiten partir de cero de un proyecto al siguiente, de un lugar al siguiente. Si abordase los proyectos con un vocabulario fijo ya estaría agotado; habría perdido interés por la arquitectura hace tiempo. Encontrar un concepto inicial que capture la esencia de las oportunidades arquitectónicas únicas de cada proyecto es, para mí, la única manera de abordarlo, la puerta a través de la cual acceden las nuevas ideas de la arquitectura. Aunque muchos, si no la mayoría, de los que aprecian mi obra parecen concentrarse en las cualidades experimentales o fenomenológicas de mi trabajo – la luz, el uso de los materiales, y así sucesivamente -, para mí, lo importante es la idea” "Un edificio tiene que ofrecer aún más cuando entras, de lo que ves cuando lo miras desde fuera". "Hoy tenemos la suerte de que la guerra de estilos ha quedado atrás y el trabajo arquitectónico tiene mayor nivel, sobre todo porque hay un tipo de clientes ilustrados que generan ese tipo de arte. Además, contamos con el potencial tecnológico que permite hacer una arquitectura ecológica y, a la vez, de gran intensidad artística". "La mejor arquitectura es la que está en equilibrio con el espacio y la luz que la inspiran, pero que, por otro lado, posee un alto grado de funcionalidad", concluye Holl. LA CASA STRETTO: La casa Stretto (1989 - 1992) en Dallas, Texas, fue proyectada por el arquitecto americano Steven Holl para unos clientes dueños de una magnífica colección de arte y de un terreno extraordinario. Éstos no le pusieron ningún condicionante al arquitecto. Desde el principio del proyecto, la casa Stretto fue ideal. Para empezar, uno de los clientes había crecido en una vivienda proyectada por el mítico Frank Lloyd Wright y, por lo tanto, ya había heredado de su familia el afecto a la arquitectura.

Situación: La vivienda se encuentra en un paisaje caracterizado por un arroyo que alimentaba a tres estanques. Éstos estaban contenidos entre pequeños muros de hormigón por los que saltaba el agua con el sonido de un constante murmullo. Concepto: Conversando con uno de sus estudiantes, que también asistía a clases de música en la prestigiosa escuela Juilliard de Nueva York, Holl le preguntó si sabía de alguna composición musical que estuviese estructurada de forma paralela al agua que corría por el lugar. El estudiante le habló de la forma "Stretto", donde una fase musical se solapa con otra. Entonces la pieza del stretto "Música para instrumentos de cuerda, percusión y celesta" escrita en 1936 por el compositor húngaro Béla Bartók vino a sus mentes. La pieza musical está dividida en cuatro movimientos y se caracteriza por superposiciones entre instrumentos de percusión (pesados) y de cuerda (ligeros). Potentes movimientos de divisiones rítmicas y énfasis irregulares hacen que el tiempo parezca detenerse o acelerarse con una velocidad irresistible. Le llevó al arquitecto seis meses proponer un boceto de la casa estructurada entorno a esta música de cuatro piezas. Fue la idea de un espacio acuoso que tendría que mantenerse y materializarse con la construcción de la vivienda. Materiales: Tanto sus bloques de hormigón pulidos como su estructura metálica son parte de la arquitectura vernácula de Texas. Estos materiales componen los cuatro sectores de la casa que, a su vez, se dividen en dos módulos: uno rectangular y pesado de mampostería que hace referencia a las presas de hormigón del terreno, y otro ligero y curvilíneo de metal que cubre las diversas estancias.

. La música de la casa Stretto Steven Holl admiraba las conexiones que Bartók hizo entre la música tradicional y la moderna. De manera similar a estas composiciones extraordinarias donde reverberaban melodías originales, la casa Stretto construye el espacio acuoso con materiales tradicionales. Así, tanto sus bloques de hormigón pulidos como su estructura metálica son parte de la arquitectura vernácula de Texas. Estos materiales componen los cuatro sectores de la casa que, a su vez, se dividen en dos módulos: uno rectangular y pesado de mampostería que hace referencia a las presas de hormigón del terreno, y otro ligero y curvilíneo de metal que cubre las diversas estancias - estar, depósito de obras de arte y comedor. Cada una de los cuerpos de mampostería acomoda las zonas de servicio en la vivienda - las escaleras que conducen al dormitorio y a una salita, el baño, la biblioteca y la cocina. El último módulo es un estanque parcialmente cubierto, a modo de una última estancia inundada. Ya desde la llegada a la vivienda, que se realiza por un puente que salva el arroyo y accede a un patio de piedra con una fuente, se revela la yuxtaposición de espacios en toda la casa. Si la planta es

completamente ortogonal, la sección es curvilínea. Por el contrario, y parecido a las inversiones que se producen en el primer movimiento de la pieza de Bartók, en el pabellón de invitados se invierte la morfología. La forma "Stretto" permite a Steven Holl dividir el espacio de tal forma que cada parte es importante para la siguiente. Los movimientos del espacio evolucionan de distintas formas: la superficie del suelo sobrepasa el siguiente nivel, el techo solapa las paredes y los muros curvilíneos introducen la luz del día en la vivienda. El agua que desborda las presas y parece simbolizar los solapes de la forma Stretto también toma parte en este juego al reflejar en el paisaje las superposiciones del interior de la casa. En la casa Stretto Steven Holl hace una llamada a los sentidos y juega con la percepción artística y el entendimiento del lugar. Es el placer de experimentar la arquitectura por secuencias de luz, espacios, texturas, olores y sonidos.